Nueve años de gestión como alcalde del municipio Naguanagua, en el estado Carabobo, fueron suficientes para que Alejandro Feo La Cruz intente ahora subir otro escalón: asumir la Gobernación del estado en medio de un panorama complicado. Por un lado, tiene el reto de frenar la abstención que podría haber en las elecciones regionales tras el cese de las protestas. Además, compite con una polémica figura de las filas del oficialismo, que pelea por el cargo quitándose la ropa y regalando camisas alusivas a la Vinotinto identificadas con su nombre.
Son las 8:00 am y en varios sectores de Valencia ya comienzan a funcionar los típicos mercados de toldo que ofrecen variedad de productos a la población. En Naguanagua se encuentran “Los mercados de Alejandro”, creados en 2013 por el alcalde ante la escasez de alimentos y los altos costos. Este programa social es una de las grandes obras que deja en el municipio y que ahora quiere expandir.
Una hora más tarde, el ahora candidato llega al mercado de la urbanización Tazajal. Saluda a la gente, prueba algunos productos y explica las razones para votar el próximo 15 de octubre.
“Hola, Alejandro. Yo creo en ti, pero no nos puedes defraudar. El estado te necesita, hay que darle un cariñito a Carabobo”, le dijo una señora que espera para pagar en la fila.
Feo La Cruz continúa el recorrido entre el bullicio de quienes lo rodean y hasta se aventura a voltear varias cachapas dispuestas en un budare para ser vendidas en el sitio.
En la zona la gente lo conoce, van a votar aunque teman que suceda lo mismo que pasó con la Asamblea Nacional: que el gobierno no reconozca sus competencias en caso de ganar como gobernador.
De esto es consciente el ex alcalde. Sabe de la incertidumbre del electorado para participar en los comicios, aunque reitera que participar es la única manera de evitar que “sigan destruyendo el estado”.
Feo La Cruz es candidato por consenso de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en el estado Carabobo. No tuvo que competir con otro dirigente en un proceso de primarias, las organizaciones de la alianza acordaron que fuera el candidato y para él tal decisión es un compromiso aún mayor de ganar la gobernación.
“Es un peso muy grande haber recibido la confianza de organizaciones políticas que eran adversarios naturales dentro de la Unidad y de liderazgos reconocidos dentro del estado (…) Eso es algo que nos obliga a estar a la altura del compromiso que tenemos hoy. No solo de ganar, sino de trabajar para los carabobeños por igual y sumar todos los talentos del estado, de los distintos sectores políticos y sociales”, asegura.
El candidato por la Unidad reconoce que su gestión como alcalde del municipio Naguanagua ayudó para que fuera electo por consenso. A su juicio, se trató de una “especie de entrenamiento de alto nivel”.
“Estamos seguros de que asumir la Gobernación de Carabobo será un reto más alto, pero haber estado estos nueve años en el municipio nos prepara para poder asumirlo”, agrega.
Sobre ese tiempo en Naguanagua, asegura que su gestión es profundamente social por la creación de los mercados y de programas educativos, de emprendimiento y culturales. De ser electo gobernador, planea expandirlos en toda la entidad.
“Hay que generar herramientas para la superación de la pobreza y empoderar a madres de familia, que son el pilar del hogar y prepararlas para el emprendimiento y trabajo. Tenemos un menú importante de programas sociales que tiene ese corte y son sustentables aún y en tiempos de crisis”, detalla.
“Carabobo no está para juegos, hace falta seriedad”
Para Feo La Cruz, los comicios regionales del próximo 15 de octubre no son solo una posibilidad de que la oposición obtenga la mayoría de las gobernaciones. También ve reflejada la oportunidad de devolver esperanza a los ciudadanos que piden un cambio para el país.
Pero en la carrera por la gobernación no está solo. Compite con una figura bastante polémica de las filas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Rafael Lacava, ex alcalde de Puerto Cabello bastante sonado por estos días por sus excentricidades y discurso hostil. La entidad está repleta con afiches y vallas con su foto y las camisas alusivas a la Vinotinto son repartidas por doquier.
“Me siento sereno, sabemos el trabajo que debemos hacer. El estado se encuentra en una situación de orfandad: niños comiendo de la basura, gente sin medicamentos, falta de alimentos y, por eso, los carabobeños sienten que necesitan alguien que le de confianza”, refiere el candidato, tras ser consultado sobre el papel que maneja su adversario.
Agrega que la situación del país demanda que sean personas serias y con firmeza las que asuman este tipo de retos. “La situación no está para juegos, hace falta responsabilidad, firmeza, que podamos rescatar principios y valores. Hace falta seriedad y eso es lo que vamos a llevar a la gobernación”.
El abogado que se convirtió en alcalde
Desde pequeño, Alejandro Feo La Cruz siempre tuvo fijada la idea de ser gobernador de Carabobo, el estado donde nació y creció. Sueña con que la entidad sea una tierra de verdaderas oportunidades.
Feo La Cruz estudió Derecho en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB). Fue su trabajo en una firma de abogados de Valencia lo que lo involucró con las empresas de la zona industrial, justo en la época en la que el chavismo llegaba al poder. Cuando empiezan a efectuarse las primeras expropiaciones en el sector comenzó a involucrarse en la política.
En el año 2000 se incorporó como director de la Alcaldía de Naguanagua. Su gestión lo ayudó para postularse como diputado al Consejo Legislativo, donde resultó electo en 2004. Cuatro años más tarde buscó por primera vez la Alcaldía del municipio Naguanagua y ganó con 44% de los votos. En 2008 buscó la reelección y fue electo.
Ahora trabaja para llegar a la Gobernación. No cree que el corto período de la campaña electoral sea un problema para lograr buenos resultados en los comicios.
“No es una campaña corta para quien ha estado siempre aquí en Carabobo y ha estado en los momentos buenos y difíciles (…) Carabobo es mi casa, mi tierra, donde nací y nacieron mis abuelos, mis padres, mis hijos. Uno siempre quiere cuidar su casa y que esté bonita y siempre quiere que los que viven en la casa sean muy felices y se sientan bien”, finaliza.
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