OPINIÓN

Vitrina Venezuela: Reflexiones sobre organización

por Benjamín Tripier Benjamín Tripier

La mejor organización es la que funciona; por eso solo hay una mejor manera, en la que una empresa o institución puede organizarse, dado un conjunto de atributos y referencias.

Hablar de organización es hablar de gente. No una persona o personas aisladas, sino grupos de personas. Experiencia, conocimiento y esfuerzo de grupos de personas.

Cuando la gente combina sus talentos y esfuerzos y los orienta a un objetivo común, forma organizaciones.

No hay una fórmula simple para diseñar una organización; no obstante, hay algunos elementos que si bien son simples en esencia, no lo son a la hora de llevarlos a la práctica: los conceptos básicos fundamentales de cada tipo de negocio y sus características de diferenciación; y complementarlos con temas tales como minimizar el desperdicio y el gasto, mejorar la calidad, y dar el mejor servicio a los clientes.

Organización consiste en procesos y no en bienes o servicios; son prácticas y procedimientos; lealtad y orgullo de pertenecer. Por eso es que varían tanto de una empresa o institución a la otra, en cuanto a sus atributos estructurales y tienen logros que van más allá de lo que se puede conseguir individualmente.

Un número cualquiera de personas enfrentadas al reto de llevar a cabo una tarea compleja deberá considerar dos aspectos: cómo dividir el trabajo y cómo coordinar sus esfuerzos (Mintzberg).

La estructura de una organización es el medio formal a través del cual se coordinan las actividades de su fuerza de trabajo para lograr sus objetivos.

Una organización debería poder ser ajustada periódicamente para mantenerse competitiva y eficiente frente a los estímulos del mercado. Por ejemplo, la cantidad de niveles en una organización es inversamente proporcional a su capacidad de respuesta; se esperaría que ante estímulos del mercado sea capaz de volverse más plana, y tener más posibilidades de dar una respuesta rápida; los bancos en Venezuela hoy en día son un ejemplo de organizaciones que necesitan aplanarse (además de hacerse más livianas y flexibles).

Un propósito de la revisión permanente es asegurar la fluidez de la comunicación entre las decisiones y los que tienen que ejecutarlas. Hay que tener en cuenta que, por ejemplo, el 78% del tiempo de los altos gerentes se aplica en comunicación verbal; y 90% de esas comunicaciones son no planificadas.

Para el diseño de una organización deben considerarse los siguientes factores:

Todos los factores mencionados utilizados en la combinación apropiada, dan como resultado una organización distintiva, capaz de generar diferencias competitivas. Consiste en balancear en la organización elementos de tamaño, tecnología y capacidad de respuesta a estímulos del entorno. Siempre teniendo en cuenta los principios de:

Los tipos básicos de organización son:

En toda organización hay un componente formal, visible, referencial y dibujable y otro que es informal, invisible, real e imposible de dibujar. La relación entre ellos es la equivalente a la parte visible de un iceberg (20%) y la parte sumergida (80%) que no se ve, pero que está allí. Los porcentajes mencionados adquieren importancia al momento de predecir el comportamiento de una organización ante determinado estímulo; si no se toman en cuenta ambos, el riesgo es alto. Esto se llama saber “leer” la organización.

En la formal o visible debe encontrarse:

En la informal o difícil de ver o percibir:

Las organizaciones y sus componentes, se mueven permanentemente entre tres dimensiones, el caos, la estabilidad y el alto desempeño. Distintas áreas de una organización están moviéndose contantemente entre estas tres dimensiones.

Ante impactos del ambiente, una organización entra en caos, genera los mecanismos de compensación hasta alcanzar estabilidad, y apoyándose en ella, se mueve hacia el alto desempeño, hasta que otro estimulo la separe de su situación presente.

Si muchas áreas de una empresa entran en caos simultáneamente, la reacción es estratégica y posiblemente anticipable. Si ningún área de la empresa entra en caos, el riesgo consiste en no está asimilando el impacto del entorno y puede morir (por inmovilidad). El caos bueno es el que dispara proyectos de mejora; el caos malo es el que inmoviliza y puede matar.

Alto desempeño se caracteriza por la claridad de la misión y el sentido de cuerpo alrededor de ella; por una estructura de valores sólida y distintiva, respeto por la gente y sistemas que soportan la misión y los valores.

Estabilidad es cuando hay claridad de dirección y objetivos, manejo consistente de las prioridades, políticas y procedimientos bien definidos y manejo adecuado del nivel gerencial.

Caos ocurre cuando no hay una dirección clara y los objetivos a corto plazo entran en crisis, cambio frecuente de prioridades; cambio del “nosotros’ por el “ellos” y la consecuente asignación de culpas y falta de compromiso.

Tradicionalmente, las organizaciones se orientaron a hacer bien su trabajo, reforzándose el concepto de eficiencia que fue mandatorio en el diseño de nuestras organizaciones públicas y privadas. Con la educación creciente de los consumidores y los clientes y la evolución y sofisticación de los mercados, comenzó a tener valor el producto o servicio que una empresa o institución entregaba, así como su calidad, precio y oportunidad, dando pié al concepto de eficacia.

Eficacia y eficiencia. La especialización, la tecnología, y la escala de operación contribuyen con ambas. La combinación de las dos es crítica para la supervivencia y el éxito de una organización; hay que balancearlas de forma tal de no sacrificar una por la otra. No obstante, después de tantos años orientados a la eficiencia, creo que debería privilegiarse a la eficacia.

En esta etapa de cambio que vive el país toda empresa o institución pública o privada debe estar en un proceso de revisión permanente de su organización. Esto significa asegurarse de que sus recursos están distribuidos y ubicados en el mejor sitio, de la mejor manera y con el perfil adecuado para enfrentarse a un ambiente cambiante o por lo menos inestable.

Los conceptos de organización que comparto en esta página son solo un paseo superficial y limitado sobre temas que tratados en abstracto pueden no parecer relevantes, pero que cuando se aplican a cada empresa, a cada caso en particular, muestran aspectos desconocidos sobre las potencialidades positivas y negativas de una organización.

Propongo que cada empresa o institución revise la forma en que está organizada, de forma tal de confirmar su situación actual o identificar trabajos (mayores o menores) de reconstitución de su capacidad para continuar enfrentando el entorno. En ello les va la vida.

Tendencias mundiales

Las empresas tienden cada vez más a ser:

Noticias destacadas

Lo que no fue noticia (y debería serlo)

Mail: btripier@ntn-consultores.com   Instagram: @benjamintripier    Twitter: @btripier