OPINIÓN

Vitrina Venezuela: “Cuando pierdes, te vas”

por Benjamín Tripier Benjamín Tripier

Siempre está la sospecha de porqué Lula habrá dicho eso; porque siempre justificó públicamente las atrocidades, aun a riesgo de perder cara; y porqué es que en este momento lo hace; por más que esa frase y ese pensamiento que sostiene en los últimos meses, resulten “favorables” a la oposición y a un cambio genuino de gobierno. Si eso no le incomodó en ninguna de las elecciones anteriores, porqué ahora sí; ¿qué hay detrás de esa postura? Porque genuina no es… hay algo detrás.

Porque no perdamos de vista que Lula, junto con Fidel Castro es el fundador del Foro de Sao Paulo, centro estratégico de los esfuerzos de desestabilización en la región, que, durante muchos años fue financiado por Chávez primero y por Maduro después. Ellos más bien propiciaban los fraudes electorales y el sostenimiento de las izquierdas en el poder, a cualquier costo.

El cambio de postura, tal vez se deba a que ya, el gobierno de Venezuela, dejó de ser izquierda, pero aún sigue siendo percibido como si lo fuera, afectando la reputación del resto de los gobiernos de izquierda de la región. Y tal vez con esa posición quiere marcar distancia y preservar las posibilidades a futuro. Porque más allá de la ideología, hay que evaluar si un gobierno lo hace bien, o, todo lo contrario, lo hace mal, o lo hace peor.

La otra posibilidad es que realmente vea el potencial de la amenaza de Maduro del ”baño de sangre” y de la “guerra civil”, y que, contando con el apoyo de desestabilizadores de oficio cubanos e iraníes, esta vez no solo sea parte de una argumentación, sino que esta vez pueda ser cumplida. Que esta vez pueda pasar del dicho al hecho.

Porque, además de contar con el aparato de seguridad para llevar a cabo la amenaza, hay temor del mensaje indirecto a grupos civiles de choque para que lo lleven a cabo “en forma espontánea”; entre ese 1,2 millones de seguidores que algunos le atribuyen al chavismo, no cabe duda de que hay gente capaz de eso y mucho más.

Otra posible interpretación es que todo sea parte de una coreografía armada para permitirle a Maduro abandonar el poder sin que sus fuerzas internas noten la permisividad con la que el gobierno permitió (porque podría no haberlo permitido) que la oposición hubiera llegado hasta donde llegó, poniéndole obstáculos que pudieran ser salvados, y facilitar su evolución sin que se note que estaban facilitándolo.

Como conclusión, me inclino a pensar que Lula reafirmó con sus declaraciones, la posibilidad del baño de sangre y la guerra civil, reforzando la intencionalidad de Maduro de colocar sobre la mesa una amenaza que efectivamente pudiera ser cumplida. Si la gente dudaba sobre la amenaza original, con las palabras de Lula, la convierten en una posibilidad real y concreta.

Todo lo anterior es porque Lula nunca se hubiera pronunciado tan abiertamente en contra de Maduro; son sapos del mismo pozo y, de alguna manera, se ayudan y protegen. Y si tuvo que lanzarse con esos comentarios es porque ve que los resultados no les serán favorables, pero tenían que intentarlo reforzando las amenazas.

El verdadero mensaje genuino de Lula, viendo cómo vienen los resultados, es el de “cuando pierdes, te vas” … siempre con la esperanza de que no pierda y haciendo todo lo posible para que gane.

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