«Nosotros sabemos lo que es una dictadura, no habrá ley, no habrá derecho de expresión, las cárceles se abrirán para quienes no estén de acuerdo con este gobierno, no se le permitirá a nadie disentir. Todos los problemas que hoy vemos y queremos acabar, los problemas de corrupción y del Poder Judicial, se harán más graves aún…” Carlos Andrés Pérez, expresidente de Venezuela
Un hecho insólito sacude las redes sociales: Luis Ratti, un ciudadano que se autodenomina “restructurador” de Vente Venezuela, anuncia la expulsión de María Corina Machado, la líder histórica del partido. Ratti asegura que cuenta con el respaldo de aproximadamente 500 supuestos miembros de Vente Venezuela, que han decidido tomar el control del partido y nombrar una nueva dirección nacional. ¿Qué hay detrás de este intento de golpe político?
El partido ya no se llamará Vente Venezuela, sino Nueva Vente Venezuela, conformado por ciudadanos que rechazan la línea política de María Corina Machado, fundadora y líder histórica de Vente Venezuela. Según Ratti, Machado se ha negado a participar en la vía electoral para aspirar a la Presidencia de la República, lo que considera un error estratégico. Lo que podría parecer una broma es una realidad: otro partido de la oposición que cae en manos del régimen. Vente Venezuela, fundado por Machado en 2012, es un partido con una estructura organizativa federada y presencia a nivel nacional. Tras el triunfo de su líder en las elecciones primarias de la Plataforma Unitaria de 2023, se convirtió en el mayor partido opositor del país, superando a todos los partidos del llamado G4, que reconocieron el liderazgo de Machado.
Este episodio se suma a la larga lista de intervenciones de partidos políticos que ha sufrido el país durante el gobierno de Maduro, generalmente orquestadas por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) afín al régimen. En estas intervenciones, la junta directiva o la mayoría de los miembros de los partidos políticos, tanto de la oposición como del chavismo, son suspendidos, expulsados o sustituidos por miembros designados por el TSJ. Sin embargo, el caso de Luis Ratti es una excepción, ya que no ha pasado por el TSJ, sino que ha actuado por su cuenta, dando un golpe de Estado interno a Vente Venezuela, una organización política que no está registrada en el Consejo Nacional Electoral, que le negó la oficialización a 8 nuevos partidos políticos, entre ellos Vente Venezuela, impidiéndoles participar en las elecciones legislativas de 2015. Tampoco es reconocida por el TSJ, por lo que Ratti se atribuye una autoridad que no le corresponde.
El régimen de Maduro busca desarticular cualquier tipo de oposición que se le enfrente. Para ello, crea una oposición ficticia con dirigentes que se pliegan a sus intereses, y planea realizar unas elecciones presidenciales fraudulentas a finales del año entrante para intentar legitimar a estos actores. Esto supone el golpe final a la política: no habrá espacio para la disidencia organizada ni para las elecciones libres. La “nueva oposición” va a convertir la política en Venezuela en una farsa, violando el acuerdo de Barbados que se firmó entre representantes del gobierno y de los partidos de oposición de Venezuela el 17 de octubre de 2023. Este acuerdo establecía la promoción de los derechos políticos y las garantías electorales para el próximo proceso comicial presidencial de 2024. Pero con este hecho se vulneran los derechos de la líder de oposición María Corina Machado, y se busca confundir, dividir y desmotivar al pueblo venezolano, que ve en ella una esperanza. “Vente, que te tocó”, parece ser la consigna de esta nueva arremetida.
Esta situación afectará negativamente a la estabilidad política de Venezuela, ya que debilitará a la oposición y fortalecerá al régimen. Al crear una falsa oposición, el régimen busca deslegitimar a la verdadera oposición, que representa una amenaza para su continuidad en el poder. Además, al intervenir los partidos políticos, el régimen viola la Constitución y los derechos humanos, y socava la democracia y el Estado de derecho. La expresión “Vente, que te tocó” refleja la intención del régimen de acabar con todos los partidos que se le oponen, y también la resistencia de los ciudadanos que no se dejan intimidar por sus maniobras. Al día de hoy, Vente Venezuela es uno de los partidos más emblemáticos de la oposición, y su líder, María Corina Machado, es una de las figuras más respetadas y admiradas por el pueblo venezolano. Por eso, el régimen intenta dividir y destruir a Vente Venezuela, en contraposición Vente Venezuela seguirá siendo un partido fuerte y unido, que lucha por la libertad y la justicia de Venezuela. Vente Venezuela no se rinde, y tampoco el pueblo venezolano.
@robertveraz