OPINIÓN

Una reflexión sobre el cáncer de mamas

por Arminda García Arminda García

El cáncer de mamas es un padecimiento que puede desarrollarse en cualquier mujer, independientemente de su edad o nivel social. Para enfrentar una situación de salud de este tipo, las pacientes requieren mucho respaldo de su familia, amigos y seres queridos. Por eso, la motivación, el afecto, la comprensión, la empatía, son vitales porque ayudarán a asumir con positivismo y entusiasmo la cirugía, los tratamientos, terapias o cualquier otra indicación médica, lo que contribuirá a su mejoría.

Es importante recordar que el impacto del diagnóstico y los efectos del tratamiento son fuertes, por esta razón la compañía de familiares y amigos, durante las visitas médicas y otras vivencias propias de la enfermedad es vital para ayudarla a sobrellevar la situación. Además, así podrán enterarse y tener en cuenta las recomendaciones de los especialistas para el cuidado de la paciente en las distintas fases de la enfermedad, las cuales son decisivas para su recuperación favorable.

Por otro lado, las mujeres afectadas por este padecimiento se encuentran muy sensibles con respecto a sus relaciones con familiares y amigos. Es importante motivarlas a evitar las personas conflictivas o abrumadoras, que le puedan generar desgaste físico o espiritual. Esto no significa que deben romper definitivamente con ellas, pero, lo mejor es rodearse de gente positiva y alejarse un poco de las negativas durante su proceso de mejoramiento.

Del mismo modo, las personas más cercanas deben informarse. Esto les ayudará a comprender de forma personalizada cómo ayudar a la paciente en las distintas fases, adaptándose a sus características particulares. Sus necesidades cambian a lo largo del proceso, tanto desde el punto de vista emocional, como en el aspecto físico.

Así mismo, a través de la comunicación, se puede tratar de animar a la paciente respetando sus sentimientos y escuchando sus necesidades. Es relevante que se exprese y cuente con el respaldo de sus amigos y familiares, preguntándole directamente cómo ayudarle, permitiendo que manifieste de manera abierta sus aflicciones, sin recibir presiones de los demás, y tomando en cuenta sus estados de ánimo, que sin duda serán cambiantes debido  a su vulnerabilidad.

Los grupos de apoyo son importantes como soporte emocional, pues permiten brindar información útil a través de sesiones en las que las personas comparten experiencias similares, temores, dudas y reciben consejos para superar la situación que está viviendo. En estas reuniones se alienta a las pacientes a compartir sus problemas y así pueden sentirse reconfortadas y comprendidas. Por esto, hay que motivarlas para que asistan.

Como se puede observar, existen algunas medidas que se pueden tomar para propiciar la mejor actitud, de parientes o amigas, que se encuentran en ese momento tan difícil y motivarlas a responder efectivamente.