OPINIÓN

Smart City, una visión holística sobre el futuro de las personas en las ciudades: Posliderazgo

por Roberto Ramírez Basterrechea Roberto Ramírez Basterrechea

Los ciudadanos en las Smart City trabajan con base en valores firmes, ejemplares e imitables, con el fin de avanzar en la conformación de un modelo de ciudadanización inteligente que impregne la conciencia individual de los ciudadanos y de las autoridades políticas de un rediseño cultural más cooperativo y menos indiferentes a las situaciones comunes.

Las Smart City deben ser modelo de democracia y justicia, para ello debemos generar espacios que promuevan una ciudadanización inteligente, que dé sentido a soluciones inteligentes e institucionalizadas. Las Smart City apuntan al crecimiento de personas comprometidas con su entorno, utilizando las tecnologías como una herramienta garante del bienestar de la población. De ahí que la tecnología no es lo que define a las Smart City, ella se define en la creatividad, en las ideas innovadoras que facilitan la conexión entre gobierno y ciudadanos, perfilando la noción de una verdadera ciudadanización inteligente.

Smart City como un patrón geométrico de la naturaleza, significa incluir lo que se conoce como la “grieta de la timidez”. Se trata de una conducta mediante la cual los árboles se cuidan entre ellos, así evitan hacerse sombra y no compiten por la luz. Para los árboles, producir hojas es un gran costo de energía por lo que un choque entre las hojas del árbol que está al lado, es un desperdicio energético. La naturaleza elige lo óptimo y en ella no siempre prevalece la ley del más fuerte, la naturaleza nos muestra cómo la vida funciona mejor si colaboramos.

Las Smart City se vuelven eficientes y sostenibles capaces de dar respuestas a las necesidades básicas más elementales. Podemos afirmar que, en un entorno de cooperación, los árboles adquieren forma de fractales, estos se encuentran en otros entornos naturales, como los arrecifes de coral o en los cultivos de flores. En contraposición con la geometría empleada por el hombre en la construcción con líneas rectas y curvas uniformes; la naturaleza nos muestra cuál es el concepto que debemos adquirir para la construcción y desarrollo de las Smart City.

El actuar estructurado de la naturaleza se corresponde en parte a la iniciativa individual que promueve el valor grupal e institucionalizado en función de los parámetros de las Smart City, pero también es la coordinación o conformación espontánea de personas con un enfoque de gestión institucionalizada sobre el flujo de conocimiento individual o grupal. Es una colaboración natural que adquiere relevancia en el actual contexto de innovación urbana y cultural de las Smart City, donde las fronteras de la jerarquización política tienden a ser más permeables. El entrelazamiento colaborativo del conocimiento se corresponde a: capacitar, facilitar, orientar, entusiasmar, motivar, comunicar, modelar conductas, crear cultura y un largo etcétera. Estas habilidades promueven un mayor compromiso con el desarrollo de ciudades inteligentes y sostenibles.

Las Smart City es un territorio con un componente holístico que incluye seguridad, productividad, competitividad,innovación, sostenibilidad, emprendimiento, participación, formación y capacitación; entonces estamos hablando de educación permanente, gobernanza participativa, gestión reflexiva y compromiso ético para desarrollar el capital social y calidad ambiental. La arquitectura de los árboles deben ser el diseño de las Smart City, porque la naturaleza nos muestra que el liderazgo no se trata de estar al mando, sino de unirse a través de instituciones que potencien la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.

Así podemos definir las Smart City, como un tejido de interacciones implexo y continuum, donde las nuevas tecnologías nos abren la posibilidad de vivir en este tejido eficiente de realidades y soluciones con experiencias posibles de escribirlas a través de instituciones inteligentes que priorizan el beneficio y bien común[1].


[1] Dr. Roberto Ramírez Basterrechea es PhD en Administración Política y Economía en la UE por la Universidad del País Vasco en colaboración con el Instituto Max Planck – Heidelberg Alemania. Especialista en Gestión de Ciudades inteligentes (Smart Cities). Especialista en Gestión de Gobiernos Inteligentes (Smart Government). Director y creador de la Diplomatura en Smart City. Fundador de la Startup SmartCitGreen. Candidato al Parlamento Europeo para el año 2024.