La líder nacional, María Corina Machado Parisca, ha sostenido e insistido, de manera inequívocamente clara e inmanipulable, que dentro del clamor popular por el cumplimiento de los compromisos de Barbados está el objetivo irrenunciable de asegurar el respeto al derecho a elegir de nuestro pueblo, de manera pacífica, transparente y verificable, de un legítimo gobierno para Venezuela.
La ruta electoral ha sido para María Corina una demostración de tenacidad y coherencia desde sus tiempos en Súmate como líder de la sociedad civil, la cual se activó para exigir transparencia de las elecciones.
Para muchos de nosotros la ruta de lucha para elegir legítimamente y “hasta el final” fue asumida exigiendo primarias, desde las elecciones del año 2006. Lo que conseguimos por vez primera el 12 de febrero de 2012.
Asumida certeramente la escogencia de María Corina como mecanismo para dirimir en buena lid el inicio de una transición de superación del actual estado de cosas que nos hunde como país, salvando escollos de las llamadas falsas oposiciones y las compraventas de conciencias a las que ha apelado el régimen criminal en el poder, desde ya hace demasiado tiempo.
Una y otra vez el rostro asfixiado de nuestra gente ha intentado librarse de la tortura a la que se le ha estado sometiendo, secuestrado por criminales que, sin dejarle respirar el aire puro de nuestra bellas tierras venezolanas, han violado sistemáticamente nuestros derechos humanos, sin consideración intrafamiliar, pisoteando básicas lealtades que las relaciones civilizadas entre ciudadanos de un país se deben a sí mismos, como a sus instituciones. Estas, cuando funcionan, nos benefician a todos porque nos permiten trabajar en la construcción de un destino mejor, de progreso y de democracia efectiva, para conseguir y compartir seguridad personal y jurídica para la justicia, la salud y el desarrollo del conocimiento para acción por el bienestar a niveles socioeconómicos cónsonos con la dignidad humana.
Para hacer respetar la soberanía popular, el movimiento del cambio confió la dirección de nuestro movimiento nacional de primarias a María Corina. Líder escogida en legítimo proceso el 22 de octubre de 2023. Allí estuvo nuestro primer gran triunfo al escogerla a ella. Luego, María Corina, ha conseguido para todos nosotros los venezolanos la oportunidad de concretar dicho cambio con dos decisivos triunfos, ya imposibles de desconocer: 1) Demostró que pudo designar candidatura sustituta, abarcando todos los estratos sociales, todas las regiones, todos los estados del territorio nacional, en defensa del derecho a elegir. Sólo su voz decir que era Corina Yoris y el país se volcó con sus simpatías por la académica. La bloquearon y nos respondió al grito de ¡avanzar! con ¡Edmundo para todo el mundo!
Con Edmundo González asumido por María Corina se han mantenido cifras de apoyo nacional irrebatibles hacia lo trascendente del propósito de lograr «La Victoria» que comenzamos aquel 12 de febrero cuando elegimos en primarias por vez primera. Así se certifica, con nuestra líder electa en primarias, que es Edmundo González nuestro virtual presidente para la transición, en el tono de reconstrucción como el mismísimo Edmundo González la ha descrito fehacientemente en su primer mensaje a la nación: en armonía con todos los movimientos y partidos que le apoyan desde la Unidad democrática y para todos los venezolanos de bien que desean reconstruir el país.
Se trata ahora de divulgar entre todos los miembros de las fuerzas armadas, de los profesionales de los distintos sectores de la seguridad y la defensa nacionales, de sus familiares y amigos. También desde otras tantas instituciones claves para un cambio ordenado, debe entenderse que ha llegado el tiempo de la decisión definitiva de todo un país que defenderá su derecho a refrendar y cobrar el inminente triunfo electoral venidero en 91 días, el 28 de julio.
Aunque el proceso vuelvan a intentar forzarlo, que traten de desvirtuar con más o menos absurdas manipulaciones, no lograrán desviarlo. La ruta o curso original electoral está sellado en el ánimo popular. Lo representa una líder que se ha colocado por encima de miserias, mezquindades e intereses de la mediocridad delictiva. María Corina ha pactado con el alma de nuestro pueblo, con el que tiene una conexión que de no respetarse más bien podrían conseguir hacerlo desbordar, lo cual los colocaría en el peor escenario para esos mismos que lo intenten. No es posible burlarse de nuestro pueblo nuevamente, como lo hicieron en 2018.
El pueblo está decidido a cobrar el cambio ganado por su líder María Corina Machado con su candidato designado: Edmundo González. La tarjeta es la de la Mesa de la Unidad Democrática, MUD. Ese es el vehículo para elegir el 28 de julio, y por amplísima mayoría, la que está prácticamente cantada: ¡Edmundo para todo el mundo!
Una infeliz idea de seguir con agendas ocultas o rehenes con que nos pretendan manipular y torcer resultados afianzará más bien la confirmación plebiscitaria de una nación que ya llegó «hasta el final» y no se calará un continuismo por efecto de la represión criminal de armas que le sean usurpadas al auténtico Ejército Libertador de Venezuela. ¡AVANZAR!
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@gonzalezdelcas