Hablar otro idioma no es tan solo una herramienta personal de comunicación; es, además, una llave poderosa que abre las puertas de muchas oportunidades al momento de postularse para una posición de trabajo, lo cual puede convertirse en un punto a favor del solicitante.
En Estados Unidos son cada vez son más las empresas que están entendiendo la necesidad de contratar trabajadores bilingües como una ventaja competitiva, debido al aumento de la población latina. Esto ha derivado en un notable crecimiento de este mercado de trabajo.
En primer lugar, los individuos que dominan dos idiomas se caracterizan por tener una personalidad enriquecida por el conocimiento de estos lenguajes y sus culturas, pues cuentan con la referencia directa de dos estilos de vida. Un gran atractivo para las organizaciones cuando necesitan abarcar nuevos mercados.
Por otro lado, estudios demuestran que los bilingües son personas multitasking, capaces de procesar varias labores simultáneamente y enfocarse en lo relevante, lo cual fortalece esta característica como una cualidad útil para manejar distintas responsabilidades al mismo tiempo.
Así mismo, demuestran tener un pensamiento más creativo, pues pensar en dos idiomas les agiliza las ideas, los hace más perspicaces y les agudiza la capacidad de ser ingeniosos. Según algunos autores, este tipo de personas asumen retos, buscan nuevas oportunidades más allá de lo obvio, no se desalientan ante las críticas y están prestos al aprendizaje, beneficiando a las empresas.
Además, son individuos con mejor concentración, mayor capacidad cognitiva y velocidad en el procesamiento de la información. Estas habilidades facilitan la atención y la resolución de problemas, así como la conducta y el desempeño competitivo esperado, aspectos que están relacionados con su habilidad para integrarse al ambiente laboral.
Del mismo modo, el bilingüismo genera apertura y disposición para interactuar con personas de otras nacionalidades, lo que permite una vinculación y conocimiento de su comportamiento, modismos, tradiciones, etc, que enriquece su experiencia cultural.
Por lo tanto, ser bilingüe es una fortaleza que debe ser aprovechada para competir en el mercado laboral y cubrir las expectativas de las empresas en cuanto a sus necesidades de integración cultural a través de la comunicación en otro idioma.