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¿Sabes si eres un objetivo en guerras psicológicas?

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¿Qué papel tienen los psicólogos en la “Psywar”?

¿Todos estamos inmersos en una guerra psicológica en el mundo? Las operaciones psicológicas, en el contexto contemporáneo emerge como una herramienta estratégica fundamental en el panorama moderno de conflictos y relaciones internacionales. Este fenómeno, arraigado en la intersección de la psicología, la comunicación y la estrategia militar, se centra en la manipulación de las percepciones, las emociones y las creencias para influir en el comportamiento humano en situaciones de conflicto.

La psywar se basa en la comprensión profunda de la psicología humana y su aplicación en el ámbito de la persuasión y la influencia. A través del uso estratégico de la comunicación, la propaganda y otras herramientas psicológicas, los actores involucrados en la guerra psicológica buscan moldear las actitudes, percepciones y comportamientos de los individuos y las sociedades. Estas operaciones psicológicas tienen como objetivo fortalecer la posición propia, debilitar al enemigo, o influir en terceros países o grupos de interés.

Operaciones psicológicas 

El pasado 2 de mayo de 2024, el Cuarto Grupo de “Operaciones Psicológicas”, expertos en «psywar» —guerra psicológica— publicaron un anuncio de reclutamiento en un video titulado «Ghosts in the Machine 2″ que ilustra el trabajo realizado por los efectivos militares de estas operaciones en el ámbito internacional porque es ilegal que el ejército estadounidense las realice contra los ciudadanos estadounidenses. Este vídeo se caracteriza por imágenes impresionantes y una narración compuesta por voces de líderes históricos reconocibles. A través de mensajes crípticos que resaltan el poder de las palabras, las ideas y las «manos invisibles» de esta guerra silenciosa pero efectiva. Los líderes del Comando de Operaciones Especiales del Ejército y los reclutadores de fuerzas especiales están adoptando un enfoque novedoso y motivacional a través de vídeos para captar el interés de 650 ciudadanos que se incorporen en esta área. Estos esfuerzos subrayan la importancia de la comunicación estratégica y el “engagement” para atraer talentos a estas posiciones especializadas.

Estrategias y guerras psicológicas

Son utilizadas por militares, organizaciones gubernamentales y, en algunos casos, grupos no gubernamentales, para influir en las percepciones, actitudes y comportamientos de los grupos objetivo. El propósito principal de estas operaciones es afectar la moral y la psicología de los adversarios o del público en general para lograr metas estratégicas.

La propaganda es uno de los instrumentos más comunes en la psywar. Incluye la difusión de información, rumores, noticias falsas o exageradas para influir en la opinión pública o desmoralizar al enemigo. Puede ser tanto abiertas como encubiertas, y se dirige a audiencias tanto amigas como enemigas.

La desinformación involucra la creación y distribución de información para engañar y confundir al adversario. Por otro lado, la contrainformación busca refutar la desinformación y proteger las tesis propias.

Las operaciones psicológicas proponen actividades encubiertas destinadas a engañar directamente al enemigo, haciéndole pensar que están ocurriendo ciertas acciones que no son reales o hacer creer que las verdaderas son falsas. Contempla el uso de la intimidación y las amenazas para inducir el temor y la incertidumbre en las poblaciones o fuerzas enemigas para disminuir su voluntad de luchar o resistir.

Procura el fortalecimiento de la moral propia. No solo se trata de debilitar al enemigo, sino también de fortalecer la moral de las propias tropas y la población civil mediante mensajes de esperanza, victoria y solidaridad.

El uso de medios de comunicación es esencial, por ello la guerra psicológica se apoya mucho en el uso efectivo de mensajes online, en radio, televisión, internet, y redes sociales, para transmitir mensajes diseñados específicamente. Un caso de operaciones psicológicas sería la difusión como transmitir información falsa sobre la superioridad de las fuerzas propias o sembrar dudas sobre la moral de las tropas enemigas.

Historia y Evolución

Si bien la guerra psicológica ha existido en diversas formas a lo largo de la historia, su papel se ha amplificado con el advenimiento de los medios de comunicación modernos y la globalización. Durante la Primera y la Segunda Guerra Mundial, la propaganda desempeñó un papel crucial en la movilización de las poblaciones civiles y en la imagen del enemigo, como en el caso de la Alemania Nazi como la censura extrema y la quema de libros, que no solo destruyó innumerables obras literarias y científicas valiosas sino que también representó un intento por controlar el pensamiento y la información, suprimiendo la diversidad de ideas y el libre pensamiento, o cuando convenció a sus ciudadanos de que eran “superiores” mientras demonizaban a la población judía. Por su parte, los aliados usaron la dicotomía del bien y del mal y de la libertad en contra de la opresión. Durante la Guerra Fría, la competencia ideológica entre Estados Unidos y la Unión Soviética llevó a una intensificación de la guerra psicológica, con el uso de emisiones de radio, televisión y medios impresos para difundir mensajes políticos.

Implicaciones contemporáneas

En el mundo la guerra psicológica ha adquirido nuevas dimensiones con el surgimiento de Internet y las redes sociales. Las campañas de desinformación, la manipulación de las redes sociales y la difusión de noticias falsas son casos de tácticas utilizadas para influir en la opinión pública y desestabilizar a los adversarios. Además, la guerra psicológica se ha extendido más allá del ámbito militar, siendo utilizada por actores no estatales, como grupos terroristas, para promover sus agendas y reclutar seguidores. También se están usando en el campo de la política.

La guerra psicológica representa un aspecto clave de la estrategia cada vez más relevante. Su capacidad para moldear las percepciones y manipular las emociones humanas la convierte en una herramienta poderosa en manos de aquellos que buscan influir en el curso de los eventos internacionales. Sin embargo, su uso indebido puede tener consecuencias devastadoras, erosionando la confianza pública y socavando los valores democráticos primordiales. Por lo tanto, es básico comprender y abordar de manera crítica el fenómeno de la guerra psicológica en el contexto actual de conflictos y tensiones globales.

La inteligencia artificial (IA) en la guerra psicológica

Los gobiernos y las fuerzas armadas de varios países activan aceleradamente el uso de la inteligencia artificial (IA) en la guerra psicológica. La IA ofrece capacidades avanzadas de análisis de datos y procesamiento de información, lo que permite una segmentación más precisa de audiencias, personalización de mensajes y detección de tendencias y patrones en las comunicaciones digitales. Estas capacidades pueden ser utilizadas para amplificar la difusión de propaganda, el manejo de la información y la desinformación, y la influencia en la opinión pública.

Además, la IA también se está empleando en mejorar la capacidad de las fuerzas armadas para monitorear y analizar la actividad en línea, identificar campañas de desinformación y contrarrestarlas. Abarca el uso de algoritmos de aprendizaje automático para detectar y neutralizar cuentas y redes sociales falsas o maliciosas que puedan estar difundiendo información engañosa o desestabilizadora.

El uso de la IA en la guerra psicológica plantea preocupaciones éticas y de seguridad, especialmente en lo que respecta a la privacidad, la manipulación de la información y el potencial para la escalada de conflictos. Por lo tanto, es importante que las políticas y regulaciones relacionadas con el uso de la IA sean cuidadosamente consideradas y supervisadas para garantizar que se maneje de manera responsable y en consonancia con los principios democráticos y los derechos humanos.

Papel de los psicólogos en la psywar

El desempeño de los psicólogos en la guerra psicológica es multifacético y elemental para comprender y aplicar eficazmente las estrategias psicológicas en el ámbito militar y de seguridad nacional. Algunos de los roles que los psicólogos pueden desempeñar incluyen el análisis y la evaluación de las motivaciones, creencias, actitudes y comportamientos humanos. Esto es crucial para comprender las percepciones y vulnerabilidades de los diferentes grupos de interés y diseñar estrategias de influencia efectivas.

Los psicólogos colaboran en el desarrollo de estrategias psicológicas para influir en la opinión pública, o en caso de adversarios desanimar o amedrentar al enemigo y a su vez fortalecer la cohesión interna. Esto implica el diseño de mensajes y tácticas que aprovechen los principios de la psicología social y la comunicación persuasiva.

Los profesionales de la conducta forman parte del entrenamiento y la capacitación de personal militar en técnicas de guerra psicológica, la identificación de objetivos psicológicos, la elaboración de mensajes efectivos y el manejo de la desinformación.

Después de implementar estrategias psicológicas, coadyuvan a evaluar su impacto y el nivel de efectividad en la población objetivo.

Los psicólogos también desempeñan un papel importante en garantizar que las estrategias de guerra psicológica se implementen de manera ética y responsable. Esto conlleva consideraciones éticas sobre la manipulación de la información, el respeto a los derechos humanos y la minimización del daño psicológico. De la misma manera desempeñan un papel decisivo en la planificación, ejecución y evaluación de las operaciones de psywar, aportando su experiencia para comprender e influir en el comportamiento humano en situaciones de conflicto y seguridad nacional.

Operaciones psicológicas de contrainteligencia

En el ámbito de la contrainteligencia, los psicólogos ejercen una labor esencial en la detección y neutralización de operaciones de guerra psicológica del enemigo. Los psicólogos están capacitados para identificar y analizar las amenazas que pueden surgir de las operaciones de guerra psicológica del adversario. Esto implica la comprensión de las tácticas y técnicas utilizadas para intervenir en las percepciones y el comportamiento de las personas, así como la evaluación de su impacto potencial en la seguridad y la estabilidad. Igualmente pueden desarrollar perfiles característicos de los operadores enemigos involucrados en actividades de guerra. Esto comprende la identificación de características de personalidad, motivaciones y patrones de comportamiento que puedan indicar la participación en actividades hostiles o desestabilizadoras. Al mismo tiempo de detectar las operaciones del enemigo, los psicólogos pueden evaluar las vulnerabilidades psicológicas dentro de las propias fuerzas armadas y agencias de seguridad. Esto involucra identificar áreas donde la desinformación o la manipulación psicológica podrían tener un impacto negativo en la moral, la cohesión o la seguridad interna. Obviamente son los psicólogos los más preparados para reclutar a los efectivos para estas operaciones de psywar.

Desarrollo de contramedidas psicológicas 

Con base en el análisis de amenazas y perfiles psicológicos, se puede colaborar en el desarrollo de medidas para neutralizar las operaciones de psywar del enemigo. Esto utiliza la implementación de programas de contrapropaganda, la educación de la fuerza laboral en la identificación de desinformación, y la promoción de la resiliencia anímica en el personal militar y civil.

Los psicólogos proporcionan asesoramiento estratégico a líderes militares y de inteligencia sobre cómo mitigar los riesgos asociados con las operaciones de guerra psicológica del enemigo, en la formulación de políticas y procedimientos para contrarrestar las amenazas psicológicas, y en proteger la seguridad y la estabilidad internas.

Modificación de conducta en la psywar

Es una técnica fundamental en la guerra psicológica. Su objetivo es alterar o terciar en el comportamiento de un grupo o individuo mediante el uso controlado de estímulos psicológicos. Se trata de inducir cambios en la percepción, actitud o su conducta que favorezcan los objetivos de quien implementa estas operaciones. Mediante la propaganda y mensajes estratégicos, se puede reforzar o debilitar ciertas actitudes en la población o en las fuerzas enemigas, conduciendo a cambios en su comportamiento, como sería el caso de enfatizar la inviabilidad de la resistencia, o la inevitabilidad de una derrota, lo cual puede reducir la moral y la disposición de luchar del enemigo.

Utilizando técnicas de condicionamiento clásico u operante, se pueden crear asociaciones en la mente de los objetivos, mostrando consistentemente imágenes negativas o desmoralizadoras justo antes de noticias o discursos del adversario para hacer que la audiencia desarrolle una respuesta emocional negativa condicionada hacia ellos.

Controlar la información que recibe un grupo puede modificar su percepción de la realidad, afectando sus decisiones y comportamientos. Al aumentar información sobre los propios éxitos y ocultar los del adversario puede hacer que la propia población se sienta más segura y la del adversario más insegura.

A través de recompensas e incentivos, o castigos y disuasivos, se puede motivar a las personas a actuar de manera esperada o a evitar conductas indeseables. Esto puede envolver desde ofertas de amnistía hasta amenazas de represalias.

La modificación de conducta en el contexto de la psywar es diseñada para ser sutil, y a menudo, se implementa de manera que los sujetos no se den cuenta de que están siendo conducidos. Esto hace que las operaciones psicológicas sean a veces controversiales, especialmente cuando se aplican sin el consentimiento o conocimiento de las personas afectadas.

Manejo y control de la información

La desinformación consiste en la difusión deliberada de información falsa o engañosa con el objetivo de confundir, desorientar o manipular a la audiencia. Como sería la creación de rumores, la manipulación de imágenes o videos, o la propagación de noticias falsas a través de medios de comunicación y redes sociales.

La guerra psicológica puede ser directa, involucrando acciones como la propaganda abierta y la difusión de mensajes explícitos, o indirecta, a través de tácticas más sutiles como el uso de simbología, colores o música para influir en las emociones y las asociaciones mentales de las personas.

El manejo de la información implica presentar información de manera selectiva para cambiar las percepciones y creencias de la audiencia, con la omisión de información relevante, la distorsión de hechos o la presentación sesgada de eventos para respaldar una narrativa particular.

Con el crecimiento del mundo online, Internet y las redes sociales, las operaciones psicológicas en línea también se están trasladando al ámbito digital. Esto incluye el uso de bots y cuentas falsas para difundir propaganda y desinformación en línea, así como la manipulación de algoritmos de redes sociales para amplificar ciertos mensajes y suprimir otros.

Casos históricos de desinformación en operaciones psicológicas

Uno de los casos más notorios de operaciones psicológicas en la historia ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial con la formación del llamado Ejército Fantasma de los aliados. Esta unidad especializada desempeñó un papel clave al desorientar a las fuerzas alemanas mediante el uso de engaños radiofónicos, disfraces y personificaciones. En el contexto de la Operación Fortaleza, emplearon tanques inflables y camiones falsos para desviar la atención de las tropas alemanas que tenía como objetivo hacer creer al alto mando de la Alemania nazi que la principal invasión aliada de Europa en 1944 no sería en Normandía. En una reciente ceremonia en Washington, los pocos miembros sobrevivientes de esta unidad fueron condecorados con la Medalla de Oro del Congreso, en reconocimiento a su estratégica e influyente labor en el conflicto bélico.

En la actualidad, muchas de las tácticas empleadas en operaciones psicológicas se mantienen clasificadas.

Un caso contemporáneo de relevancia es el apoyo proporcionado a Ucrania. Desde 2014, expertos estadounidenses en operaciones psicológicas han estado colaborando con las fuerzas ucranianas para ayudarlas a combatir las campañas de desinformación emprendidas por Rusia. Tras la invasión rusa en febrero de 2022, Ucrania ha implementado una serie de estrategias de comunicación, como el uso de folletos y plataformas de redes sociales, diseñadas para persuadir a las tropas rusas de rendirse, proporcionándoles información específica sobre los procedimientos y lugares para la entrega.

¿Operaciones psicológicas en la política?

Cualquier parecido entre la psywar en la guerra o en la política sí es verdadero. Al fin y al cabo la frase «la guerra es la continuación de la política por otros medios» fue acuñada por Carl von Clausewitz, un general prusiano y teórico militar. Esta declaración se encuentra en su obra más famosa, «De la guerra» («Vom Kriege»), que es uno de los tratados más influyentes en la actualidad sobre estrategia militar, a pesar de ser escrito en el siglo XIX. Clausewitz desarrolló esta idea para expresar cómo la guerra es esencialmente un instrumento político, utilizado cuando los métodos diplomáticos fallan o no son posibles, pero siempre con el objetivo de lograr fines políticos. Pero este tema de las operaciones psicológicas en la política y en las campañas electorales la trataremos en otra oportunidad

 


María Mercedes y Vladimir Gessen son psicólogos y autores de ¿Quién es el Universo? y Maestría de la Felicidad

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