Por Julio Alejandro Ríos Gutiérrez
Si usted está leyendo estas líneas, es probable que se deba en parte a que le vamos a ahorrar un mal rato. Puede seguir adelante tranquilo, porque esto no va de escándalos, tragedias o desgracias.
El sesgo pesimista y escandaloso de algunos medios de comunicación está alejando a las personas, sobre todo a las más jóvenes. Es un fenómeno que se replica en varios países y que es conocido como news avoidance (evitación de las noticias). Una reacción a la “infoxicación”.
Estudios como el del Digital News Report del Reuters Institute han detectado en el último lustro un incremento en el porcentaje de quienes evitan el consumo de noticias porque les generan emociones negativas que impactan en su estabilidad emocional. Incluso describen la naturaleza de las noticias como “deprimente o abrumadora”.
El informe del Reuters Institute se basa en una encuesta aplicada a 93.000 personas de 46 países, incluidos España, Argentina, México, Chile y Colombia. El informe revela un incremento en el porcentaje de quienes evitan las noticias. Del 27% de 2017 al 38% en 2022, es decir, 4 de cada 10 personas. Aunque hubo países donde los porcentajes son aún más altos, como España, con 33%, o Brasil, con 54%.
En el informe 2023, el promedio de quienes evitan las noticias con sesgo violento ya es del 55%. Las describen como información que “satura, agota y provoca malestar emocional”.
Según el mismo informe, los países con un mayor declive en el interés por el consumo de noticias durante el período de 2017 a 2023, son Argentina (bajó de 77% a 43%), Francia (de 59% a 36%), España (de 85% a 51%), Estados Unidos (de 67% a 49%) y Reino Unido (de 70% a 53%).
El informe de este año diferencia por primera vez las motivaciones de la evitación: “Este grupo se divide entre aquellos que intentan evitar periódicamente todas las fuentes de noticias y aquellos que intentan restringir específicamente su uso de noticias en momentos particulares o para ciertos temas”, describe Nic Newman, coordinador de este reporte de 2023. Por ejemplo, los temas que la gente evita en mayor medida son los referidos a conflictos bélicos (en específico el que se padece en Ucrania), política o crimen organizado (historias frecuentes en México ante el incremento de desapariciones y ejecuciones cada vez más violentas).
Las audiencias desean librarse de la “infoxicación”. Erika Villavivencio Ayub, profesora de la la Facultad de Psicología de la UNAM, la define como “el exceso de información; siempre conectados, recibiendo centenares de noticias cada día”
En México, de acuerdo con el Inegi –el instituto nacional dedicado a la estadística–, en 2016 el 58% de los internautas leía periódicos en línea, pero en 2022 ya solo lo hacía el 34% y la lectura de revistas también cayó en el mismo lapso, de 51,4% a 34,9%.
Desánimo y desconfianza
La evitación de las noticias se ha elevado particularmente entre los jóvenes. En el segmento de 18 a 24 años, es de 40%; en el de 25 a 34 años, alcanza el 42% y en el de más de 35 años es del 36%, pues no se sienten identificados, ni representados por las noticias de los medios tradicionales.
Este fenómeno se entreteje con el incremento del recelo hacia las noticias. En el informe 2023 del mismo instituto, apenas 36% dijo confiar en los medios de comunicación.
A esto se suma que los medios y formatos tradicionales, como los noticieros televisivos o periódicos impresos, se han vuelto sinónimo de tedio. Mientras que en 2017 el 51% de los encuestado en el Digital News Report dijeron consumir periódicos, en 2023 ya nada más representan 20%.
Los consumidores prefieren contenidos breves, ágiles y con un tono de cercanía y jocosidad, con los llamados influencers, en redes sociales como TikTok o Instagram. Aunque hay que decir que por la naturaleza de sus contenidos más desinhibidos, los influencers no siempre se apegan a los valores de calidad y rigor, propios de la profesión periodística.
La desconfianza hacia las empresas periodísticas no solo se debe a sus enfoques alarmistas, sino también a la sospecha de que esos consorcios obedecen a intereses de grupos de poder, lo cual ha sido cierto en algunos casos latinoamericanos, específicamente en México.
Este declive de la conexión y los bajos niveles de confianza incide en la forma de consumir información y de relacionarse con ella. Y, en última instancia, en la cada vez más incierta cuenta de resultados de los medios tradicionales.
Además propicia la desinformación en diversas modalidades. Por eso es común encontrar noticias falsas que se anuncian con frases al estilo de: “lo que nunca verás en la prensa” o “lo que los medios te van a ocultar”.
Razones principales por las que los jóvenes se alejan de las noticias. Julio Alejandro Ríos a partir de datos del Digital News Report 2022, Reuters Institute, CC BY-NC-ND
Periodismo de soluciones: un enfoque de esperanza
Una de las alternativas para otorgarle enfoques más alentadores a los contenidos en la prensa, es el periodismo de soluciones. De acuerdo con la Red de Periodismo de Soluciones (SJN, por sus siglas en inglés), este “investiga y explica, de forma crítica y clara, los esfuerzos por resolver problemas ampliamente compartidos, en el que las respuestas a los problemas también son noticia”.
El periodismo de soluciones surge en Estados Unidos y se adopta en algunos países europeos, pero aún es incipiente en América Latina, de acuerdo con Jonathan Gutiérrez, coordinador para América Latina de la SJN. Gutiérrez aclara que este tipo de periodismo también se debe realizar con “rigor, criterio y ética”.
“Una herencia de los medios tradicionales es el sensacionalismo catastrófico que no construye y causa pesimismo en las audiencias. Bien ejercido, el periodismo de soluciones puede aportar a la sociedad y reflejar el papel de la comunidad en la solución. Compromete a las audiencias y ofrece grandes beneficios”, consideró Iván Carrillo, comunicador especializado en periodismo de soluciones, durante un panel en el Seminario Internacional de Periodismo de Investigación organizado por la Maestría en Periodismo Digital del Sistema de Universidad Virtual de la Universidad de Guadalajara.
En el mismo evento académico, Natalia Luján, creadora de contenido en Esto no es Radio, añadió que se debe colocar “a las audiencias en el centro, y mantener una fuerte conexión con ellas”, y de preferencia, cada medio debería contar con un editor de audiencias.
Positividad y creatividad
Con el panorama dantesco que pintan en ocasiones los medios, pareciera entendible que las personas se alejen de las noticias para ejercer su legítimo derecho a ser felices y a aprovechar su tiempo libre en un esparcimiento que les traiga dicha.
Por ello, entre la variedad de retos del periodismo en la era digital, uno de ellos consiste en encontrar ángulos positivos para sus contenidos, una premisa básica del periodismo de soluciones. Los mismos encuestados del Digital News Report 2023 prefieren estos enfoques y a 46% le agrada el periodismo de soluciones.
Además del fondo, también la forma importa. Los periodistas y comunicadores debemos explorar formatos y narrativas más ágiles, creativas y atractivas, con la misma frescura que los influencers, pero al mismo tiempo, con los valores de rigor y calidad, propios del periodismo profesional.
Artículo publicado por The Conversation
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional