Ningún ciudadano debe estar por encima de la Constitución y las leyes, formando una democracia fuerte que respete los derechos humanos universales, ser justos los unos a los otros, guiada por un liderazgo transformacional que impulse la excelencia educativa. Las universidades del país deben ubicarse entre las mejores veinte universidades del mundo, no conformarse por haber sido calificadas entre las mejores cien de América Latina. Al país hay que ubicarlo en niveles excepcionales de desarrollo en ciencia y tecnología. Además, es fundamental comprender las fuerzas financieras globales que permitan conformar una economía competitiva mundialmente.
Alemania ha tenido el más alto nivel de crecimiento económico en los últimos 15 años en la Unión Europea; sin embargo, muchos de sus ciudadanos no tienen acceso a una vivienda digna por su alto costo. Por tanto, no es solo desarrollar capacidades y dar oportunidades al ciudadano, hay un aspecto moral que cubrir, de allí que las categorías contenidas en los modelos de desarrollo económico no deben ser reduccionistas sino fractales. La política y la institucionalidad son pilares fundamentales para conformar una estructura de incentivos en la sociedad, estos incentivos son la fuerza motora de los ciudadanos para fortalecer su autoestima, viendo a través de ellos como recibe servicios de calidad y atención inmediata a sus problemas, por ejemplo,poder desarrollar sus talentos en instituciones educacionales de primer nivel. Es el ciudadano con su aporte creativo y productivo, es la colectividad en general que al final tiene un alto impacto en el desempeño económico del país, eso no se logra a través de clientelismo ni facilismo, mucho menos de dádivas.
Bobbio (1996) señala en su libro Teoria General de la Política que “la finalidad del cuerpo político es la de otorgar a los individuos la seguridad en su vida, su libertad y sus bienes y cuando el gobierno deja de estar en condiciones de garantizar la seguridad o cuando esta obligación política no cumple con esa función, la obediencia desaparece (pag:16)”. Uno de los fundamentos del nacimiento del Estado es el paso que se da de la vida primitiva, constituida por aspectos de salvajismo y barbarie, a la época civil o ciudadana.
La seguridad ciudadana es un problema recurrente sin darle solución, así como la distribución del ingreso salarial de la población para enfrentar la pobreza. La euforia de la vida fácil y del Estado paternalista profundizó el clientelismo a todos los niveles, la razón es evidente el crecimiento se basa en la repartición de la renta petrolera.La política ha privado sobre la moral, donde el populismo ha marcado la acción política del Estado pudiéndose ver la incidencia negativa en su responsabilidad principal como es lograr niveles de desarrollo humano de muy alto nivel.
Las políticas públicas del Estado no han dado resultado, evidenciándose un gigantismo organizacional generando anomia e ineficiencia en su desempeño, mostrando debilidad financiera y administrativa, así mismo,hay muestra de incompetencia gubernamental la cual puede estar basada en la falta capacidad para gobernar.
Yesel Dror manifiesta: “Hay un serio problema de gobernación en el mundo, derivado no solamente del hecho de que los políticos se guían por paradigmas obsoletos, sino también debido a la carencia de habilidades gubernamentales para enfrentar las transformaciones que los gobernantes han precipitado y para las que no están lo suficientemente bien preparados”.
El Estado mantiene un estricto control de precios y adecua los márgenes de comercialización que afectan los productos esenciales, mediante el fortalecimiento de los mecanismos de protección al consumidor que han sido establecidos;más, sin embargo, ninguna de esas políticas ha funcionado, todo lo contrario, el pueblo está pasando mucha hambre, generando una grave desnutrición en la población. Es indudable que han debido buscarse nuevas formas y maneras de enfrentar el problema macroeconómico y microeconómico del país, pero la falta de creatividad y la inercia gubernamental ha podido más que la visión renovadora de acciones de políticas públicas más acorde con los nuevos tiempos, el socialismo del siglo XXI fracaso estrepitosamente. El Ejecutivo nacional actual habla de una democracia protagónica revolucionaria de alto valor ético, la cual se puede reconocer como una propuesta de un Estado socialista del siglo XXI, donde la soberanía reside en el pueblo, teniendo como valores la solidaridad social y el bien para todos. Pero lo vivido por el pueblo ha sido todo lo contrario, miseria, hambre y corrupción.
Dror argumenta en el libro Capacidad para gobernar con relación a la seguridad pública y el orden de la seguridad personal, moral y ética: “A menos que la criminalidad, la violencia política, la corrupción por narcotráfico, etc., se mantengan en un nivel muy bajo, nada va a funcionar. Más aún, sin un éxito tangible en el mejoramiento de la seguridad pública y el orden, los gobiernos centrales y los sistemas políticos como un todo carecerán de credibilidad para grandes segmentos de la población, así como para actores externos importantes; esta credibilidad, por sí misma, es fundamental para otras dimensiones esenciales de la arquitectura societaria”.
Mientras que, por otro lado, Amartya Sen (1999) dice:»El desarrollo precisa de la remoción de grandes fuentes de ausencia de libertad, la pobreza tanto como la tiranía; las oportunidades económicas limitadas tanto como la marginación social sistemática; el deterioro de los servicios públicos como la intolerancia.» Por tanto impera una gran necesidad de cambio, en este caso política e institucional que podría considerase como un golpe de timón, lo delicado es que el Estado tome conciencia de la necesidad de reorientar la acción de gobierno a través de un proceso de reinstitucionalización solamente cuando la situación ha llegado a un punto crítico, se requiere de una nueva teoría de políticas públicas y gerenciales; como por ejemplo de planificación, en la actualidad se trabaja con una planificación tradicional o situacional en vez de una planificación estratégica, esta toma en cuenta las oportunidades y amenazas del entorno.La ineficacia del Estado en los últimos años y el conjunto de ineficiencias acumuladas a raíz de un proceso de expansión desordenada de sus funciones, hacen evidente la necesidad de producir cambios fundamentales en los mecanismos y formas de acción del sector público, de allí la necesidad de transformación y modernización del sector público.
Joan Prats y Catalá (1996) reflejan una visión de planificación estratégica, “todo análisis de gobernabilidad comienza con el establecimiento del mapa de los actores estratégicos. Para ello hay que superar el simplismo del tipo relaciones “estado-sector privado-sociedad civil” para intentar captar la complejidad y diversidad de los actores, sus expectativas y conflictos, las reglas de interacción explícita o implícitamente adoptadas, y la adecuación de todo ello a los desafíos que el sistema sociopolítico plantea. El análisis tiene que comenzar identificando en un momento histórico dado los actores estratégicos –internos e internacionales-, los recursos de poder que controlan, su solidez interna, sus expectativas, sus mapas mentales, su capacidad para representar o para agregar los intereses que dicen representar o expresar, el tipo de alianzas estratégicas y los posibles conflictos”.
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