OPINIÓN

Perseguidores

por Luis Velázquez Alvaray Luis Velázquez Alvaray

Víctor Venegas

 

La detención arbitraria e ilegal del dirigente magisterial Víctor Venegas es una más en la cadena terrorista de la tiranía, que anda envalentonada, desde que retornó al redil perverso de Miraflores, el paisano y testaferro del jefe de los soles, Alex Saab, con oficina equipada y alto cargo para continuar inundando de droga los Estados Unidos, y como jefe oficial de la lavadora del régimen.

Los que luchan por la libertad sufren el encarcelamiento y la tortura, mientras se pasean a sus anchas los integrantes del cártel más poderoso del mundo que despacha del propio palacio presidencial.

Venegas es un luchador honesto, entregado a la causa de la libertad, de los valores democráticos, de la calle libre que protesta contra la injusticia, por la defensa de los educadores, odiados por estos iletrados, ignaros, filisteos. Solo conocen de odio, maltrato, tortura: ilicitud, arbitrariedad, desafuero.

La maquinaria del terror chavista nunca ha cesado. El Foro Penal ha señalado que Javier Tarazona, preso desde el año 2021, -por las mismas causas de Víctor Venegas: ser luchadores por la democracia para nuestro país-, es cruelmente torturado, vejado humillado, a pesar de estar en delicada situación de salud.

El dirigente César Pérez Vivas es víctima de ataques armados, por el peligroso Freddy Bernal y sus grupos de guerrillas urbanas habilitadas en el estado Táchira y la frontera colombiana, con el centro de operaciones en la gobernación de esta entidad.

Al caso de Venegas, Tarazona y Pérez Vivas se suman la de los numerosos presos políticos y militares, encarcelados o perseguidos, violando todos sus derechos.

El líder magisterial fue detenido sin orden judicial, no ha sido presentado en los tribunales, mientras fabrican ”los delitos permanece incomunicado, violándose la Constitución Nacional, clara en señalar la inviolabilidad de la libertad personal.

¿Qué ha hecho Víctor Venegas?

Sus armas, como la de todo el magisterio, son lápiz, papel, borrador, tiza y pizarra.

Marchas pacíficas para reclamar:

– Tercera firma de la convención colectiva.

– Solicitar pago de la deuda de 280% desde hace 5 años.

– Incumplir la vigente convención colectiva.

– Informar de la precaria situación que vive el magisterio venezolano.

La tiranía desafiante y soberbia solo cuenta con la arbitrariedad y la fuerza, mientras encarcelan y persiguen a los que luchan. Muchos Venegas se multiplican en todos los rincones del país, buscando una solución para salir del terrorismo. Movilización social de los millones de Venegas que claman por justicia.