OPINIÓN

Pedir más sanciones es homicidio preterintencional

por Eduardo Semtei Eduardo Semtei

Y traición a la patria.

Pandemia. enfermedad epidémica que se extiende a muchos países o que ataca a casi todos los individuos de una localidad o región.

Homicidio preterintencional. se verifica cuando el agresor actúa con la intención de provocar lesiones a otra persona (indistintamente si son o no chavistas u opositores; sector público o sector privado) tales como: escasez, inflación, crisis eléctrica y de suministro de agua con un medio idóneo para ello (las sanciones que impiden tener recursos para comprar medicinas, mascarillas, antibióticos. Las decisiones de Trump: solo las sanciones salvan), pero finalmente le provoca la muerte (lo mata el coronavirus). Así, se tiene en cuenta la intención –que no es la de matar– (es arrinconar y desesperar a la gente para que intenten derrocar a Maduro) y el medio (las sanciones de Trump) –que no debía razonablemente ocasionar la muerte (solo hambruna, crisis médica, fallas eléctricas, falta de agua, escasez de gasolina etc.) pero finalmente sí lo mata el coronavirus.

La tormenta perfecta. Las sanciones están colocando a Venezuela en el medio de una tormenta perfecta. Ningún otro país está sometido a tan profundas y desgarradoras realidades. 1. Pandemia. Todos los países serán afectados. No se salva nadie. Cada país está tomando sus medidas radicales Y casi todos tienen recursos para enfrentar la crisis. Para viabilizar y sostener las medidas radicales. Las medidas tienen costos y gastos asociados. Venezuela no tiene cómo financiarlas, cómo pagarla. Los ministerios del ramo no tienen los inventarios, las divisas y cada vez tenemos menos; hay más mengua, más pobreza. El gobierno de Chávez/Maduro quebró, arruinó a Pdvsa y al país. Estamos indefensos; en crisis sanitaria total; con hospitales sin agua; sin electricidad; sin insumos. Estamos a la merced del tiempo. Sometidos a los avatares de lo desconocido. Menos de 25% de las salas de terapia intensiva de hospitales públicos están operativas. Todas las publicaciones sobre el ranking de los sistemas de salud mundiales y de América Latina colocan a Venezuela en los últimos lugares. No estamos preparados ni equipados para enfrentar la pandemia. Y las sanciones la agravan. Estamos al borde del precipicio y bien jodidos. 2. La guerra petrolera entre Rusia y Arabia Saudita han bajado los precios petroleros al sótano del valor, de 20 a 25 dólares el barril. Con las sanciones nuestro crudo sale al mercado con un descuento de hasta 30%, lo que arroja un precio promedio de 15 dólares el barril. (Chávez lo llegó a vender a 120 dólares y despilfarró, malgastó, corrompió, dilapidó toda esa inmensa fortuna y hoy estamos como estamos). Es decir, tenemos mucho menos recursos para alimentos y medicinas per cápita que cualquier país del mundo; incluyendo Haití y hay ¡Dios Santo! algunos venezolanos que piden aún más sanciones, sabiendo que menos ingresos significa manos medicinas y menos alimentos y mayor cantidad de muertes. Por eso es homicidio preterintencional. 3. La crisis financiera simultánea en todo el globo retrae la economía, disminuye el PIB y por lo tanto aúpa y alienta la crisis económica que atraviesa Venezuela. Más de 25% del valor de mercado de todas las empresas del mundo se evaporaron, eso se traduce en una crisis económica pandémica (qué palabrita para ponerse de moda) que arrastra primero a los más débiles: nosotros.

Este es el momento preciso para que los venezolanos se acuerden en un solo bloque para luchar contra el coronavirus que puede demoler la salud pública y convertirse en un contagio mortal de miles y  miles de muertos.

Este es el momento de constituir un comité nacional de emergencia contra el coronavirus formado por 30 personas. 15 propuestos por la Asamblea Nacional de Guaidò y 15 propuestos por el Ministerio de Salud. Igual de oportuno es señalar que los 15 seleccionados por la oposición deben provenir tanto de G4 como de la MDN (la Mesita) y que el G4 abandone finalmente y para siempre  el sectarismo, la división y la exclusión que no ha servido para nada. La locura que lo ha conducido a la abstención electoral. Nombrar ese organismo de conjunto al igual que se hizo con el Comité de Postulaciones del CNE de 21 personas. Es decir, que sí se puede.

Este es el momento en que el Comité Nacional de Emergencia contra el coronavirus nombre una comisión de expertos para diseñar y ejecutar los planes de defensa sanitaria formada por 7 personas; 3 propuestas por Guaidò y 3 por Maduro y 1 por la Cruz Roja Internacional o Nacional, quien la presidirá

Este es el momento que los fondos disponibles del Ministerio de Salud se pongan a disposición del Comité Nacional de Emergencia  para luchar contra la pandemia

Este es el momento en que Guaidò ponga a disposición del Comité Nacional de Emergencia los 80 millones de dólares que tiene disponible en la Ley contra Enfermedades Vitales y no lo gaste en viáticos y sueldos.

Este es el momento en que el Comité Nacional de Emergencia solicite por unanimidad al gobierno de Trump la suspensión de las sanciones que impide la venta de petróleo y las operaciones financieras, como una vía de financiamiento de suministros, equipos, alimentos e insumos contra la pandemia. Dichos fondos estarán a disposición del Comité Nacional de Emergencia, que muy bien puede adoptar el sistema de Acuerdo Petrolero Humanitario diseñado por el doctor Francisco Rodríguez; canje de petróleo por alimentos y medicinas.

Es hora de Venezuela, de unidad y de defensa de nuestro sufrido pueblo.

No es tiempo de enfrentamientos políticos.

Sígannos los buenos.

@eduardo_semtei