La masonería, para el mundo profano, se mueve a base de términos y conceptos, muy diferentes a los que tenemos los militantes en ella: para nosotros todo es simbólico. En este artículo, en pocas palabras, explicaré dos términos muy importantes para nosotros los masones: operativo y especulativo.
¿Qué significan estas dos palabras en el plano profano? Operativo: Hay dos formas de utilizarlo. Adjetivo: es aquello que obra y hace efecto, ejemplo. Esa máquina no está operativa. Sustantivo: es un plan para desarrollar una acción y conseguir un objetivo. Eje: el operativo fue un éxito. Operativo es “preparado y listo para entrar en acción o conjunto de acciones coordinadas para conseguir un fin”. Viene del verbo transitivo e intransitivo “operar” y del sufijo “tivo”, indica inclinación o capacidad para, del latín operativus. En conclusión, “operativo” “es aquello que está en funcionamiento, activo y es útil cumpliendo la acción que le corresponde”.
Especulativo: del latín speculatĭo. “Especulativo” son conceptos abstractos mediante el lenguaje escrito. Es meditar y hacer suposiciones sin fundamento y base real, no encuentra soluciones prácticas. Es perderse en una hipótesis sobre algo que no se conoce con certeza. ¿Un escritor es un especulador?, como los libros de Dan Brown. Para la filosofía, la especulación es el proceso intelectual que permite la resolución dialéctica de aquellas contradicciones que aparecen en una unidad de orden superior.
Después de escudriñar en el camino profano la definición de estos dos términos, ahora nos introducimos en el sendero iniciático de la masonería. Según los historiadores de los antiguos maestros de la masonería, esta existe desde la noche de los tiempos. Los masones se reconocen como “operativos”, por su acción como constructores, desde los “picapedreros, hasta los experimentados maestros que dirigían las grandes obras. Desde mi óptica los términos” especular y experimentar están muy ligados.
La especulación termina cuando se experimenta su enunciado. Por lo tanto el que experimenta es un “operativo”. Los masones somos albañiles u operativos, que experimentamos lo que especulan los Grandes Maestros con sus “planos” de la obra. Rene Guenon dice: “En 1717, cuando se fundó la primera Gran Logia en Inglaterra y a la masonería se le calificó de ‘especulativa’, comenzó su degeneración”.
El masón, en sus tiempos operativos, también eran especulativos, el solo hecho de trazar planos y maquetas es especular, es utilizar tu mente para idear algo: pero a esta idea le dan forma los “masones operativos”. Recordemos que la palabra masón se traduce como albañil. El albañil, era el que picaba las piedras, le daba forma cúbica o rectangular para levantar los muros de las grandiosas obras que todavía existen como: catedrales, fuertes y palacios.
El oficio de albañil es uno de los más antiguos en la historia del ser humano. Los albañiles, eran clasificados en aprendices, compañeros y maestros. Los dos primeros mientras aprendían el oficio vivían en la casa del maestro, que por lo regular es el dueño de la obra, y solo recibían como salario su manutención de alimentación y habitación. Después de aprender el oficio comenzaban a recibir salario de acuerdo con su calificación.
Dice la historia que era muy difícil llegar a ser maestro, las condiciones que se colocaban eran inalcanzables. En la masonería, un albañil es un constructor de templos, pero no hechos por sus manos en forma física. Construyen su “templo interior”, con el cincel, el mazo, el conocimiento y las virtudes. Un templo que está más allá de lo físico. Somos especulativos en la búsqueda del conocimiento y la luz, pero somos operativos en la construcción de nuestro templo interior, interiorizando nuestro arte real, para encontrarse con el maestro interno. Así se califica el trabajo de un masón. Antes se traían buenas piedras de las canteras, ahora “un masón es una piedra” extraída de las canteras del mundo profano.
La masonería operativa se desarrolla en la masonería iniciática, en la que el masón se interna en el estudio de los conocimientos de tipo trascendente que le brinda su rito, para llevarlo a lo profundo de su propia individualidad, al encuentro con la divinidad. La masonería especulativa surgió de la operativa, pero la masonería iniciática surgió de la especulativa. ¿Será verdad que la masonería especulativa no es otra cosa que la aplicación de la masonería operativa?
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