La gnosis: “Es la esencia de la francmasonería” (Albert Pike), porque es el conocimiento tradicional. La gnosis, para comprenderla hay que leerla detrás de letra, meditarla, porque su mensaje está más allá de lo físico, es espiritual, y se debe estar cualificado para entrar en ella. En la masonería, en el emblema que la identifica, esta la escuadra y el compás, en el centro está la letra “G”, que significa: “Gnosis”, prueba de orden, belleza y sabiduría. En esta oportunidad deseo transmitir una sencilla instrucción relacionada con el conocimiento, que en griego se le define como gnosis. El objetivo de la gnosis es presentarse como sabiduría del G.A.D.U., asimilar todos los misterios para develarlos a los seres humanos cualificados. La masonería, su base, se sustenta en la gnosis, en el conocimiento por medio de los símbolos, representados en los instrumentos del albañil y el arquitecto, entre los cuales se destacan: la escuadra, el compás, la regla, el martillo o mazo, el cincel, la palanca, la plomada, el nivel, la palustre o cuchara. Por lo tanto, los masones somos herederos de esta ciencia milenaria, que son base de todas las religiones místicas, aunque estas solo transmiten la parte exotérica, no Iniciática, y la Masonería solo lo transmite a los seres humanos cualificados, esto quiere decir, de niveles de conciencia elevados. Se puede afirmar que, la gnosis masónica escocesa es el resumen histórico de todas las escuelas iniciáticas. La masonería, su gnosis, es un compendio del conocimiento de las culturas egipcias, persas, caldeas, india, griega y la Judea del Maestro Jesús. Esto quiere decir que la gnosis masónica tiene el Secreto del Universo y el secreto de la evolución. La masonería, en su libre albedrío, deja a sus adeptos la libertad de la interpretación personal del conocimiento recibido, porque la Augusta Institución Masónica no es dogmática, y uno de sus principios es que se basa en la razón y cuando se trasciende es iniciática. La masonería es inmutable, aun sea de libre interpretación y resistente en los cambios. La augusta Institución posee los secretos de las antiguas iniciaciones y de una *tradición Invariable». que procede en línea recta de los secretos que nos transmitieron los antiguos Grandes Iniciados, que hoy los Masones lo conocen y lo transmite a personas selectas que sean libres y practicantes de las virtudes. Los dogmas desvirtúan la esencia del conocimiento, y es posible que en los primeros siglos el conocimiento se transmitió la palabra de oído a oído a los iniciados al margen de dogmas y clérigos para no profanarla. El objeto de la Gnosis, del conocimiento, es la perfección del ser, abrir conciencia, y en esto se inspiraron los misterios egipcios y griegos. Para el estudio y comprensión del conocimiento o Gnosis, lo dividimos en tres escalones: Aprendices, incapaz de comprender el conocimiento, solo conocen la letra de la ley y el culto exterior del culto. Compañero, son más sensibles, más despiertos, conocen más de ciencia, impera la razón. Los maestros son los únicos que tienen derecho a la develación, conocen el secreto para dominar la materia y se elevan al mundo del Espíritu. Para un Incoado poco tiene que ver con códigos y Biblias, pues se relaciona directamente con su divinidad, que está dentro de nosotros, se desligaba de toda ley religiosa y moral. A pesar de todas las persecuciones en la antigüedad, la Gnosis sobrevivió a todas las herejías, pero en el mundo moderno, el egoísmo, ha llevado a los magos negros a utilizar la gnosis para mover energías negativas para sus propios intereses, es lo que llamamos profanamente brujería. Esto es una interpretación falsa de la Gnosis. Un aspirante al sendero del conocimiento, debe despojarse de su vieja personalidad, del ser humano antiguo, y después desnudo, se viste con el traje de Luz de los elegidos. La iniciación al conocimiento, tiene por objeto guiarlo por el sendero de la Luz, utilizando su Iniciación para su evolución. Para esto, la piedra en bruto debe llegar a ser la piedra tallada, para que pueda formar parte de la rítmica arquitectura del que creó los mundos. Para tallar la piedra, se necesitan el Martillo, que simboliza la voluntad, la fuerza inconsciente, y el cincel, simboliza el juicio, la fuerza organizadora del espíritu. El que domina los sentimientos, las emociones, domina su voluntad. El ser humano debe dominar sus impulsos y hacer firme su voluntad. Con la gnosis, se han conservado la tradición de los misterios. Cuando el masón está lleno de conocimiento, contempla, ama, se siente transportado, se siente pleno ante la luz. Para concluir, la masonería no propaga ninguna creencia, acepta la existencia de un Ser Superior, Creador del Universo, que está contenido en el libro de la naturaleza, captada por la conciencia humana, la intuición, la razón y la sabia analogía de la fe. También reconoce y estudia a los grandes avatares e Iluminados como los maestros Buda, Jesús, Moisés, Mahoma, etc. que nos dejaron grandes mensajes de luz.