OPINIÓN

Ni olvidamos ni nos callamos

por Aaron Rodríguez Moro Aaron Rodríguez Moro

Habían tardado mucho. Bastó que un grupo de jóvenes, entre los que se encuentran cuatro de nuestros dirigentes juveniles de Voluntad Popular, salieran a recordar la memoria de Neomar Lander, para que el régimen volviera a mostrar su verdadera cara dictatorial y represora. Cuatro muchachos valientes que se niegan a olvidar, estuvieron  presos, a causa de unas pancartas y gritos de protesta, y hoy se encuentran en el limbo de régimen de presentación e infinitas prohibiciones.

Neomar Lander fue asesinado en 2017 durante una protesta. Negarse a recordarlo es matarlo dos veces. Es olvidar el sacrificio de tantos chamos que dejaron la vida en la calle por una libertad que aún no llega; por eso Maduro no perdona que alcemos la voz para rememorar nuestros caídos; es por eso que  nos tratan como delincuentes, porque no perdonan que las nuevas generaciones se vistan de memoria y conciencia.

Tal vez, el alcalde de Chacao, Gustavo Duque, y el régimen de Maduro quisieran que nuestras consignas fueran gritos al vacío; que no hablemos de los derechos humanos, ni de las garantías de la democracia. Tal vez quieren que centremos la política en lo superficial y en lo que no toca intereses, pero Voluntad Popular no es actor de ese teatro.

Voluntad Popular es un partido con memoria y dignidad. No en vano, es la tolda naranja la que siempre tiene a dirigentes presos y exiliados. No en vano, para los déspotas del régimen somos criminales e irregulares. Es precisamente la claridad de nuestras ideas y objetivos lo que nos hace irreconciliables con la tiranía. Por eso nos persiguen con injusticia y alevosía.

Los compañeros Luis Martínez, Carlos Maneiro, Argelia Rovaina y Jholbert Godoy salieron de sus casas a una actividad política, pacífica y de dignidad, pero el régimen se los llevó. Son estos cuatro valientes el vivo ejemplo de que en Venezuela las cosas no solo siguen mal, sino que están peor. Pues la política de festivales de reguetón no puede tapar la verdad: que en Venezuela se nos tiene prohibida la memoria y que solo podemos estar tranquilos mientras aceptemos callados que somos una sociedad sin derecho.

La actuación de Gustavo Duque nos da una vez más la razón, en que hay quienes se visten del discurso opositor, pero son aliados del poder. Será la historia la que los pondrá en su justo lugar.

En estas horas de oscuridad exigimos libertad plena para nuestros cuatro activistas y todos los presos políticos. Pues ni olvidamos ni nos callamos. Seremos libres.

@rodriguezaaron