Netflix se está convirtiendo no solo en la cadena de suscripción streaming con más contenido original en su catálogo, sino que además acaba de romper su propio récord en producciones originales: nada más en julio el canal estrenará casi sesenta títulos de producción propia, lo que coloca en una posición privilegiada con respecto a sus competidores.
Julio tendrá un significado especial para Netflix: con el mes alcanzará la considerable suma de 59 nuevas producciones originales estrenadas a la vez, lo que convierte en pionero no solo en contenido propio, sino que le pone al frente de la batalla entre canales streaming, en lo tocante a la cantidad de material original a disposición de los suscriptores. La programación que se estrenará en unas pocas semanas incluye varias temporadas de sus series originales, algunos shows nuevos, películas, documentales e incluso animé.
Se trata de un fenómeno que demuestra la capacidad del gigante de las cadenas por suscripción streaming para renovarse a sí mismo: a los nuevos episodios de Umbrella Academy, se unirá una película de alto perfil protagonizada Charlize Theron, la secuela de la película para adolescentes The Kissing Booth, la última temporada de la serie de 2016 Last Chance U, además del muy publicitado remake del clásico de la década de los ochenta The Babysitters Club. Se trata de un considerable número que demuestra que la estrategia de negocios de Netflix está comenzando un nuevo recorrido que tiene un único objetivo: dejar de depender en lo posible de otras productoras y estudios para sostener la vigencia y estabilidad de su catálogo.
Los últimos dos años no han sido fáciles para Netflix, que de tener el control del mercado por suscripción streaming ha tenido que enfrentarse a todo tipo de competidores, lo que además afectó la integridad de su catálogo original y le arrebató numerosos contenidos emblemáticos desde su llegada a la pantalla chica. A la cancelación sistemática de las series de Marvel que Netflix coproducía junto a la casa de las ideas, siguió la muy pública estrategia de HBOMax para arrebatarle Friends, que terminó por convertirse en un símbolo de la capacidad de los nuevos canales para enfrentarse al considerable poder y capacidad de Netflix.
Para finales de 2019 y luego de que su mayor activo hasta el momento, la colosal y prestigiosa The Irishman de Martin Scorsese llegara al final de la temporada de premios con las manos vacías, la perspectiva de competir resultaba desalentadora. De modo que Netflix tuvo que tomar la decisión frontal de hacer frente a la rápida erosión de su catálogo con una estrategia agresiva de producción original.
Inversión y renovada frontera
Para Netlix, la llegada Disney Plus, HBOMax, Hulu, Apple TV Plus y Amazon Prime Video significó una batalla no solo por conservar su posición dentro de la preferencia del público, sino además asegurar que su catálogo, que hasta hace un par de años dependía en mayor o en menor manera de productoras y estudios terciarios, encontrara una necesaria autonomía. Eso, mientras el resto de las cadenas se afanaban por una oferta variada y numerosa, que incluyen spin off de franquicias cinematográficas de considerable popularidad, varias de las series clásicas más populares y una oferta a futuro llena de rostros de la lista A de Hollywood.
¿Cómo podría Netflix enfrentarse a una situación semejante?
Para comenzar, vale la pena analizar el panorama con cuidado: no todas las cadenas tienen la posibilidad de usar contenido externo con licencia, lo que supone una restricción de catálogo importante. Un buen ejemplo de lo anterior, es el caso de QUIBI y HBOMax, últimos en llegar al mercado online y también, los que han tenido mayores problemas para producir su contenido debido a la emergencia mundial del coronavirus. Entre ambos, QUIBI está luchando por sobrevivir con contenido original que no puede suplir de inmediato (la cadena no incluye contenido con licencia), mientras que HBOMax recurre a su extenso catálogo de Warner, así como su versión por cable.
¿Es suficiente?
No tanto como piensas. Por ahora, todos los canales por suscripción streaming intentan renovar su catálogo de estrenos con películas y series de terceros, mientras que el contenido original se ha reducido como respuesta inmediata a las consecuencias de la pandemia. De modo, que a seis meses de llegar a la pantalla chica, tanto Disney Plus y Apple TV Plus llevan un ritmo mucho más lento que Netflix en cuanto al crecimiento de su material original. Disney Plus tiene apenas dos estrenos de factoría propia: Muppets Now y Hamilton, pero la mayoría de las nuevas adiciones del canal en julio es contenido antiguo de Disney y National Geographic. Por su parte, Apple TV Plus tiene el Greyhound recientemente adquirido y protagonizado por Tom Hanks y Little Voice de Sara Bareilles, pero su contenido sigue siendo el más escaso (y menos atractivo) de todas las ofertas actuales.
Amazon Prime Video, el otro canal con cobertura mundial y la competencia más directa de Netflix en cuanto a contenido original, tampoco las tiene todas consigo: el canal estrenará la esperada película My Spy dirigida por Peter Segal y protagonizada por Dave Bautista, que adquirió de STX, y una nueva temporada de la serie de suspenso Hanna. No obstante, el resto de la oferta continúa siendo títulos con más de dos años de antigüedad, que llegan al catálogo como una opción no demasiado atractiva para buena parre de los suscriptores.
De modo que el fenómeno Netflix, con 59 originales, no solo sacude el mercado sino que además, supone un nuevo límite que difícilmente otra plataforma podrá alcanzar pronto. ¿Cómo lo hace? La respuesta es sencilla: anticipación.
Mejor por docena
Netflix trabaja por temporadas completas, lo que quiere decir que la mayoría de sus anuncios, se filman con un tiempo considerable de anticipación. Además, la compañía tiene unos 200 proyectos en los que está trabajando ahora mismo de forma remota y aprovechando las condiciones de la pandemia. Un buen ejemplo, es el estreno de Homemade, una antología de cortometrajes que incluye trabajos de Sergio Larraín y Paolo Sorrentino, filmados desde los lugares en que atraviesan la cuarentena. El resultado es un inteligente análisis de la situación actual, así como material fresco de considerable valor autoral.
«Nuestra lista de series y películas de 2020 se filma en gran medida», dijo Ted Sarandos, director de contenido de la compañía, a los analistas durante la reciente convocatoria trimestral de ganancias de la compañía, «y se encuentran en etapas de posproducción en ubicaciones de todo el mundo. Y en realidad estamos bastante metidos en nuestra pizarra (de contenido) de 2021. No anticipamos cambiar mucho el horario, y ciertamente no en 2020».
Para Netflix, el contenido original es primordial y sus ejecutivos, lo descubrieron luego de perder buena parte de su catálogo en el incómodo período de transición que siguió a la llegada de otros canales. La respuesta inmediata fue una colosal inversión para contenido propio y además, elevar la apuesta a las producciones bajo el ala de Netflix. La compañía aumentó diez veces la producción y para cuando el resto de los canales comprendieron en la batalla por el contenido emblemático de estudios que este no era tan valioso como el propio, Netflix había quintuplicado su oferta original.
Para 2017, Netflix dedicó 50% de su presupuesto a contenido nuevo creado para la cadena, que ha ido aumentado considerablemente hasta llegar a la astronómica suma de 18.000 millones de dólares solo en 2020. Eso incluye, además, contenido que puede incluir como original en su catálogo, como la exitosa Casa de Papel de España, que saltó del mercado local al mundial de la mano de Netflix y bajo exclusividad de la cadena.
De modo que el exitoso mes de julio que se aproxima para Netflix no es fruto de la casualidad. La cadena se encamina a llegar a quizás a cien o doscientos programas originales para final de año o comienzos del siguiente, lo que la convertiría en la productora más exitosa de un mercado que atraviesa una discreta crisis debido a la pandemia, además de un suceso del mundo del entretenimiento difícil de emular.