Son millones de sueños de cambio desde la Guajira venezolana hasta el Delta Amacuro; millones de ilusiones de venezolanos que quieren que el socialismo termine de una vez por todas.
Son millones de oraciones que se elevan al cielo pidiéndole a Dios un gran cambio para Venezuela; un mañana mejor y una transformación económica.
Son millones de venezolanos que día a día salen a trabajar y a tratar de sobrevivir en medio de un clima confuso y totalmente adverso, pero que a pesar de los obstáculos dan lo mejor de sí para sacar a sus familias hacia adelante.
Son millones de venezolanos que añoran que sus familiares y amigos puedan regresar a Venezuela, y darse ese abrazo que se deben desde hace muchos años atrás.
Son centenares de venezolanos que ruegan a diario por la libertad de sus familiares. Hombres y mujeres que actualmente son presos de consciencia de Nicolás Maduro.
Son millones de trabajadores del campo que ruegan por semillas, por vías de penetración aptas, por apoyo para ser cada vez más productivos y lograr sacar a sus hogares adelante.
Son miles de comerciantes y cientos de empresarios que valientemente siguen apostando al país a pesar de todas las dificultades y problemas que subsisten debido al modelo socialista.
Esa Venezuela que quiere cambiar, que hoy sufre pero que no se rinde, es la Venezuela que no quiere nada con el socialismo y que tiene sus esperanzas en lo que sucederá este año con las elecciones presidenciales.
Son millones de venezolanos que piensan así, una inmensa mayoría que rompe la barrera de los 80% en todos los estudios de opinión; son millones de voces que están allí, que sienten, padecen y que saldrán a votar en las próximas elecciones.
Y esas voces también tienen un rostro, una sola faz que los representa, la de María Corina Machado.
Esas voces, esos sueños y esas ilusiones, están en cada gesto, en cada palabra y en cada decisión de María Corina Machado; formando en una especie de simbiosis perfecta entre ella y la ciudadanía.
Y esas voces se transformarán en votos y esos votos harán que el nombre de María Corina Machado sea antecedido por la frase: “Señora Presidente”.
Sin más que agregar, nos leemos la próxima semana.
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