OPINIÓN

María Corina Machado: la líder civil desobediente que demostró al pueblo cómo llegar a Caracas y cumplir el deber

por Eduardo Ortega Díaz Eduardo Ortega Díaz

Mujer, madre, ingeniero, estratega, líder política, venezolana, legitimada y respaldada con el voto popular en las primarias del 22 octubre de 2023, evento democrático, cívico, libre, justo y con participación del venezolano dentro y fuera del país, con reconocimiento nacional e internacional, decidió sacrificarlo todo como una “Libertadora” por la emancipación de los venezolanos y la patria; incansablemente lucha contra todo el poder de una dictadura cleptocrática, criminal, sin limitaciones ni escrúpulos.

En su lucha recorre los caminos, siempre partiendo desde Caracas a pesar de todos los obstáculos, alcabalas policiales y militares, cierres de carretera, ha llegado a cada rincón del país, cumpliendo el compromiso de escuchar el clamor del pueblo, retornando luego con igual o mayores peligros y amenazas. Inspira, entusiasma, demuestra que se puede llegar a Caracas desde cualquier lugar del país si se asume con determinación y compromiso.

Es la referente político del país, su motivación es la unión nacional, asumir la ruta electoral para recuperar la institucionalidad, el ejercicio libre de la política y el voto como instrumento de autodeterminación nacional, lograr sin violencia y de forma pacífica un cambio del sistema actual de gobierno. Ha pedido al pueblo enfocar los esfuerzos en organizarse, votar, apoyar los testigos y cuidar el voto en la elección presidencial, demostrar lo que está muy claro en las calles, que la mayoría quiere cambio de gobierno, no más divisiones, represión y necesidad del regreso de sus familiares al país, es un movimiento completo de liberación.

Del 27 al 31 de julio 2024, son días que marcarán la historia contemporánea de Venezuela, que determinarán el futuro durante los próximos 60 años, lo que se haga definirá la libertad o la condena como sociedad, como individuos sin derechos, la miseria de vida que vivirán los hijos y nietos si se mantiene la dictadura; es el momento de la verdad, ir a votar y cuidar el voto.

La selección e imposición de personas arrastradas a Nicolás Maduro como presidentes de los poderes del Estado y sus actuaciones contra el pueblo generan desconfianza en las instituciones y los resultados que anuncian.

Del análisis objetivo de los discursos y acciones recientes de Nicolás Maduro, Jorge Rodríguez, Diosdado Cabello y Elvis Amoroso, indican claramente que van a desconocer la voluntad del pueblo, están en total negación de la realidad, manipulan para inducir represión y pretenden llamar a un falso diálogo nacional e internacional para intentar estabilizar su dictadura. Es un régimen que viola a diario la Constitución, los acuerdos internacionales que firman, los derechos humanos y es investigado en la Corte Penal Internacional.

Estas señales claras obligan a estar preparados, en alerta y dispuestos a defender la voluntad de la mayoría, esta elección presidencial es la última oportunidad y momento político de lograr el cambio.

No hay forma de que Maduro haga fraude sin que los venezolanos se enteren y lo que procede después, si ocurre, es directo, sin interpretación o necesidad de convocarlo, está establecido en el artículo 350 de la CRBV y es la desobediencia civil, desconocer al régimen, legislación o autoridad que contraríe los valores y menoscabe los derechos humanos, lo que permite que el pueblo recupere la libertad y la autodeterminación nacional. Es en el pueblo venezolano donde reside intransferiblemente la soberanía, está en su derecho solicitar la renuncia de quien ocupe o usurpe cualquier cargo.

La Fuerza Armada Nacional Bolivariana es testigo presencial de las grandes manifestaciones espontáneas por el cambio, de las minúsculas manifestaciones de apoyo coaccionadas de la dictadura, que de paso cuando su militancia tiene oportunidad se escapan a la concentración de la oposición y sobre todo las órdenes abusivas que emite el régimen a colectivos y cuerpos de seguridad para causarle daños físicos y obstaculizar a la oposición civil, deben apoyar y acompañar si ocurriera ese ejercicio democrático de autodeterminación nacional, entender que por el daño y abuso causado al pueblo durante estos 25 años, Caracas se llenará de pueblo y ocupará todos los poderes del Estado buscando solución a la falta de libertades. Los problemas se generan desde Caracas, la solución está en Caracas. Respetar la libre movilización del pueblo y no obedecer órdenes abusivas de reprimir para defender un tirano, al permitir que pase el pueblo le aseguro que ese jefe corrupto, inmoral y déspota que tiene no lo será más.

Para evitar resistencia con las instituciones más influenciadas por el comunismo y la represión como la Guardia de Honor presidencial, la Dgcim y el Sebin, mi propuesta es que aquellos militares y funcionarios que a pesar de estar en esos organismos reestructurados para violar los derechos humanos en nombre de la revolución, no se dañaron y han respetado lo que dice la Constitución, enviarlos a los países aliados de la democracia como Italia, Francia, Alemania, Canadá, Reino Unido, Estados Unidos, España, Argentina, Chile, etc., que puedan aprender, reforzar los valores y principios democráticos, ir de comisión de servicio a embajadas, agregadurías, cursos y luego regresar a servir a la democracia y al desarrollo del país. Por supuesto, con la respectiva recompensa para aquellos que valientemente capturen algún fugitivo de la justicia internacional. Esta propuesta permitirá que se pueda dar el cambio de forma pacífica y ordenada, tan igual o mejor que como Hugo Chávez recibió la presidencia cuando ganó.

Recuerdo la frase del reverendo Martín Luther King, Jr.: “Nunca olvides que todo lo que hizo Hitler en Alemania era legal”, una reflexión que nos recuerda que cuando personas desequilibradas mentalmente, mitómanos, psiquiatra del terror y poeta de la tortura, pierden el alma humana, se corrompen con el poder, son capaces de violar la Constitución, hacer leyes abusivas dentro del territorio y adoctrinar grupos para cometer los mayores crímenes contra un pueblo y la humanidad, aquella minoría que se prestaron y cometieron crímenes deben ser juzgados.

Si en Venezuela llegase a una confrontación política violenta por las amenazas de Nicolás Maduro debería ser con puño, piedra y palos, pues el monopolio de las armas está en manos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y por más adulador que sea el Alto Mando, no permitirían su uso en contra del pueblo, mucho menos entendiendo que eso sería una excusa para que el imperio interviniera. Por más que cualquier país del continente americano se considere antigobierno estadounidense, Estados Unidos ha ganado varias guerras mundiales, por lo que tiene algunos derechos, sobre todo cuando existe una amenaza real que afecta la región, como lo son: un área de influencia, área de responsabilidad específica para ellos solos y derechos especiales.