El término de cada año merece la oportunidad de mirar por el retrovisor lo acontecido en cada país de la región, en nuestro caso permite confrontar el guion del régimen autoritario que pretende imponer su versión de un “pueblo feliz”, lo que contrasta con la penuria y la depauperación social de la mayoría de la población.
Sin desmérito de los múltiples Guinness World Records logrados por venezolanos en diferentes áreas del saber humano: gastronómicos, musicales, folklóricos, arquitectónicos, de belleza, deportivos y un largo etcétera a lo largo de su historia, valdría la pena apartarlos de toda intención gubernamental de pretender manipular los recientemente anunciados en procura de presentar una imagen de país en recuperación.
Lo cierto del caso es que al carecer de cualquier hecho del cual presumir para demostrar logro alguno de la gestión madurista, ha recurrido a la propaganda y al truco a fin de presentar a una Venezuela en reconstrucción. Para impulsar esa política durante 2022 ha contratado a influencers, youtubers, organizado conciertos, festivales y toda suerte de pan y circo romano, en el contexto de una población diezmada por el hambre obligada al infortunio de la diáspora para sobrevivir.
En realidad, no habría ninguna duda en otorgarle récords Guinness a la tiranía, lo que nos conlleva a identificar los efectos sociales, económicos y en materia de derechos humanos, por cierto ampliamente señalados por la comunidad internacional, organismos de justicia y universidades de prestigio planetario, testigos de la debacle causada a la sociedad venezolana a manos del tirano gobernante. Los enuncio a continuación:
1.- ¿Cómo puede evitar reconocer el régimen autoritario haber sido el causante de la más alta migración en el mundo? Alcanza la cifra récord de 8 millones de venezolanos, superior al éxodo ucraniano, sirio, a los roginya de Myanmar, a los de Afganistán. Hoy la migración instalada en la frontera mexicana con Estados Unidos se reconoce con acento venezolano.
2.- La Cepal informa sobre la segunda proeza del “Superbigote”: “Venezuela registró la inflación más alta de América Latina en 2022”, al tiempo que revela que nuestro país acumuló un aumento de la inflación de 146%, entre octubre de 2021 hasta octubre de 2022, siendo Argentina la segunda con 87,8%, mientras que Cuba se ubicó en el tercer lugar con 34,2%. Cifras que son escandalosas y que fueron antecedidas por la mayor hiperinflación registrada a nivel mundial entre 2018 y 2021 de 3.700.000%.
3.- Otro dato de estudio de las universidades a nivel continental ha sido el empeño del “Superbigote” en destruir nuestra economía, al lograr reducirla en 80% desde 2013 cuando asumió el poder hasta el presente 2022. La caída más brutal de cualquier economía a nivel global, ni Ucrania que está en guerra registra esta cifra récord.
4.- La encuesta Encovi de la UCAB en materia de pobreza en el año 2021 señaló una pobreza general de 94% de la población, para 2022 identifica una reducción de 10 puntos, lo que indica la persistencia de la precariedad en la población. Condición que refleja la desigualdad más pronunciada de América Latina.
5.- Los récords continúan, en materia de salarios y poder adquisitivo. El Banco Mundial y la OIT indican que el ingreso de extrema pobreza para cualquier país se ubica en 2 dólares diarios o 60 dólares mensuales, pues bien, en la actualidad el salario mensual en nuestro país se ubica en 10 dólares. Que lo convierte en el salario más bajo del planeta.
6.- Y ahí seguimos con referencia al poder adquisitivo la situación dramática de 3 millones de trabajadores del sector público y 5 millones de jubilados y pensionados para adquirir la canasta alimentaria superior a los 400 dólares, con ingresos que oscilan entre 10 dólares y 40 dólares. Este el récord de la sobrevivencia.
7.- En el área de derechos humanos ha sido el país más visitado por organismos internacionales durante 2022, la presencia de la CPI, la ONU, la OIT y diferentes ONG, denunciando la violación de los derechos humanos y la prisión de más de 350 presos políticos civiles y militares, injustamente encausados.
En resumen, adicionalmente los récords son innumerables en materia de salud, educación, servicios públicos, lo que convierte al mandatario “Superbigote”, en el tirano más reconocido a nivel continental, capaz en su descaro y megalomanía de fabricar millones de muñecos que lo reproducen junto a su consorte, como la pareja más denostada a nivel planetario al pretender manipular la inocencia de millones de niños desprotegidos y vulnerables, quienes concurren a escuelas en ruinas, sometidos a las perversas intenciones de una gestión cuya sola pretensión es mantenerse en el poder.