OPINIÓN

Lo moral es lo eficaz

por Francisco Galindo Francisco Galindo

La inmoralidad no se debe convertir en realidad, la falsedad es de los inmorales, la civilidad y la moral deben conducir a la eficacia ciudadana y a su respeto a la libertad y a la verdad política  por la transparencia de los actos públicos, la justicia no debe ser torcida, la justicia en civilidad es la madre que debe guiar a todos los políticos honorables de la humanidad. Moral y eficacia debe ser la guía del hombre por el hombre. La moralidad no debe quedarse en la subjetividad, hay que transformarla  a la eticidad como realización del espíritu objetivo, siendo esta una realidad orgánica del Estado, el Estado como creación de la razón es el nicho para el desarrollo de la moral y esta lleva a la eficacia gubernamental.

El habla debe ser una acción transparente y no para manipular a las sociedades,  el habla debe cumplir una función social para el bienestar y no para  mentir y manipular, ello como una característica de la evolución de las sociedades. La ilustración y la civilidad fue un proceso revolucionario que se inició con la revolución inglesa en el siglo XVII y continuo en el siglo XVIII con la revolución francesa, el Estado no es sinónimo de tiranía, todo lo contrario debe orientar a la moral y a la eficacia en acciones transparentes ante las sociedades. La moral esta sostenida objetivamente con valores orientados al bienestar de las sociedades y no a acciones retorcidas de tiranías, la eficacia sin moral destruye la civilidad

Chester Barnard en 1938 manifestó que cuando falta la moral es imposible conservar el liderazgo, así mismo, solo una persona que se deja guiar por valores y principios justos puede ser un líder inspirador.  Allan Flanders definía que se debe ejercer el poder compartiéndolo, no de manera tiránica, los principales líderes tienen que comprender que no todo el poder y sabiduría está en sus manos. 

La política con personas incompetentes lleva a la inmoralidad y a la ineficacia, un ejemplo importante en este sentido para superar la incompetencia, lo dio Malasia al seleccionar para sus cargos públicos a los ciudadanos más competentes, educados de la sociedad civil, a raíz de esa toma de decisión Malasia dio un salto cósmico desde el punto de vista económico y social y se hizo de esa manera competitiva a nivel mundial.