OPINIÓN

La torre de Segismundo

por Eugenio Fouz Eugenio Fouz

‘Piadoso príncipe es el que castiga tiranos’ (Jornada II, La vida es sueño. CALDERÓN DE LA BARCA)

Anoche al acostarme encendí la radio para distraerme de mis pensamientos. A veces, cuando estoy un poco agobiado elijo un camino equivocado. Me gusta pensar las cosas una y otra vez; sin embargo, si no puedo seguir dando vueltas a lo mismo, trato de evadirme. La radio es una buena opción. El caso es que anoche la voz eléctrica fallaba, iba y venía como un boomerang invisible. No había cambiado las pilas que estaban a punto de agotarse. Así que apagué la radio. Me quedé solo. Yo con mis cosas. Mis cosas y yo.

Mañana pondría pilas nuevas a la radio. Ahora mismo toca pensar. A oscuras con los ojos abiertos recitaba líneas de un texto* encontrado esta mañana. Aunque pudiese parecer ingenuo, saber distinguir algunos conceptos nos ayuda a vivir mejor. Un internauta compartía el escrito que decía ‘Quizás una de las cosas que más necesitamos es aprender a distinguir lo útil de lo valioso’. Y comenzaba con este ejemplo: ‘Un sacacorchos es útil. Un abrazo es valioso’. 

Sonrío mientras pienso mi propia línea ‘Las pilas de la radio son útiles. Un buen pensamiento es valioso’. Seguí leyendo. El autor afirma más adelante una verdad incuestionable: ‘Casi siempre lo útil es más caro que lo valioso’. Y lo remata cuando escribe ‘De hecho, lo valioso rara vez cuesta dinero’. Piense, amable lector, en estas dos sentencias ¿No es cierto que la libertad no cuesta dinero? ¿No es verdad acaso, querido lector del otro lado del Atlántico, que la dignidad no se compra ni se vende? 

Ahora es el momento de hacer sitio a lo valioso, este es el momento de pelear por eso que de verdad merece la pena.


*Lo útil y lo valioso 

religiondigital.org/Luis.A.Díaz/Lo útil y lo valioso