Finalicé mi artículo de la semana pasada para El Nacional, “Las causas del colapso”, afirmando que hay dos conceptos que, por lo común, no son considerados en el adiestramiento de emprendedores. En este artículo escribo sobre el primer concepto: el punto de equilibrio.
El Global Entrepreneurship Monitor Resultados Venezuela 2022, GEM, dado a conocer ahora en marzo 2023, afirma que la principal razón para el abandono de un emprendimiento es su falta de rentabilidad (lámina 63). Con base a lo que expondré más adelante en este artículo, la anterior afirmación bien puede escribirse así: “La principal razón para el abandono de un emprendimiento es que no cubre sus costos”. O también: “La principal razón para el abandono de un emprendimiento es que no alcanza su punto de equilibrio”.
Al conocer y dominar el punto de equilibrio, el emprendedor puede determinar cursos de acción importantes que lo conduzcan a la rentabilidad. A modo de ejemplo, imaginemos una definición de emprendimiento como aquella de la ley para el fomento y desarrollo de nuevos emprendimientos (octubre de 2021): una «actividad económica con fines de lucro ejercida por una o más personas…» y supongamos una venta casera de arepas. El emprendedor puede hacerse las siguientes preguntas: Si quiero comenzar a ser sostenible, ¿a qué precio mínimo debo vender mis arepas? O también, a este precio (competitivo) al que estoy vendiendo las arepas, ¿cuantas debo vender para cubrir los costos totales y comenzar a ser sostenible?
El punto de equilibrio constituye una métrica crucial para que los emprendedores determinen la cantidad mínima de ingresos que necesitan generar para cubrir sus costos, probado, claro, que tengan demanda y cobren lo que venden.
Calcular el punto de equilibrio involucra dos movimientos. El primero es conocer sus tres componentes: precio de venta, costos variables y costos fijos. Los costos variables son costos que cambian según la cantidad de productos que se producen, como materias primas o empaques. En el ejemplo de las arepas, el costo variable viene representado por la harina, los distintos rellenos, los condimentos y todo aquello que se use como empaque o como medio de entrega. Los costos fijos por su parte, son aquellos costos que no cambian con el número de arepas producidas, como el alquiler del local o el salario del ayudante.
El segundo movimiento es conocer el modelo que relaciona los ingresos y los costos. Dicho modelo puede ser enunciado así: “la rentabilidad asoma (aparece) cuando la contribución (la diferencia entre los ingresos y los costos variables) excede los costos fijos de la operación”.
El caso es que el concepto de rentabilidad que subyace tras el punto de equilibrio lo convierte en una métrica fundamental y poderosa para los emprendedores. Tan es así que hace un par de años, Carlos Díaz-Santamaría y Jacques Bulchand-Gidumal publicaron su trabajo titulado «Econometric Estimation of the Factors That Influence Startup Success» (Sustainability 2021, 13, 2242) en donde plantean un modelo en el que aparece, como variable independiente, el punto de equilibrio. En consecuencia y además de métrica fundamental, la habilidad para alcanzar el punto de equilibrio es un factor de éxito en cualquier emprendimiento.
Resumiendo para ustedes, amigos lectores. ¿Por qué es importante el punto de equilibrio? Hay como mínimo cinco razones que apuntan al corazón de la permanencia del emprendimiento: 1) El punto de equilibrio es un factor de éxito en los emprendimientos; 2) La rentabilidad del emprendimiento crece a medida que se alcanza y se supera el punto de equilibrio; 3) El punto de equilibrio ayuda no solo a fijar los precios sino a identificar oportunidades donde se pueden reducir los costos y a planificar; 4) Como consecuencia del punto anterior, conocer su punto de equilibrio le permite a los emprendedores ajustar la manufactura u oferta de servicios y la promoción y, finalmente, 5) Promueve la materialización de planes de negocios realistas.
La afirmación del estudio GEM, en su versión original “la principal razón para el abandono de un emprendimiento es su falta de rentabilidad”, o en su versión interpretada de “la principal razón para el abandono de un emprendimiento es que no alcanza su punto de equilibrio”, envuelve una magnífica oportunidad para incluir el tema del punto de equilibrio en el currículo del adiestramiento que se ofrece a los emprendedores. Ni el modelo Canvas ni los cursos como Finanzas para no financieros abordan el punto de equilibrio. Sin embargo, lograr el punto de equilibrio es una habilidad que puede aprenderse.