OPINIÓN

La nueva diplomacia de Napoleonchu

por Ramón Pérez-Maura Ramón Pérez-Maura

Llega un momento en que es un poco cansino que el ministro de Exteriores, mi adorado Napoleonchu, nos tome por idiotas a todos y pretenda que nos creamos que «nosotros no hemos provocado la escalada». Hombre, señor ministro… Aunque mi memoria flaquea, todavía no he olvidado que fue el ministro Óscar Puente el que llamó drogadicto a Milei, que respondió con una dura nota dando por zanjado el asunto. Pero desde el gobierno español se ha seguido acosando a Milei y se le ha insultado. Y él sí encarna una institución: la Presidencia de la República Argentina. ¿Qué es eso que dice Napoleonchu de que Begoña Gómez es una «institución española»? ¿Nos toma por imbéciles? Para hacer negocios desde la Moncloa es una señora privada, pero para provocar una grave crisis con Argentina es nada menos que una «institución española». Con un par.

El lenguaje empleado en esta crisis por Napoleonchu también es impropio de una institución –ésta sí– con la antigüedad de nuestro Ministerio de Estado. Primero anunció el domingo por la tarde que había llamado a consultas sine die a la embajadora en Argentina. ¿A que venía lo de sine die? Cuando se convoca a consultas a un embajador siembre es sin fecha de retorno. Esto los opositores de la carrera se lo aprenden en el minuto uno.

Y ahora nos superamos. Se ha retirado a la embajadora de España «definitivamente». No cabe expresarlo peor.

1) No puede pretender decir que España no va a volver a tener embajador en Argentina nunca, que es lo que «definitivamente» significa. Aunque no sea más que cuando cambiemos de gobierno –si Sánchez no logra impedirlo con vaya usted a saber qué medios– el nuevo gobierno podrá nombrar embajador. ¿O también va a impedir eso?

2) Si se refiere a la actual titular de la embajada, María Jesús Alonso, diplomática de enorme prestigio, decir ahora que es a ella a quien se retira definitivamente parecería implicar que tiene alguna responsabilidad en esta crisis. Si en el desnorte de Napoleonchu se ha llegado a esa conclusión, sería muy conveniente alguna aclaración para entender dónde estamos.

3) Si lo que en realidad quería decir es que vamos a dejar la representación a nivel de encargado de negocios, tampoco era tan difícil enunciar la frase. Ahora hay que ver qué va a pasar con el embajador argentino que apenas lleva dos semanas desde que presentó credenciales al Rey. Si Argentina lo mantiene, ¿qué van a hacer Sánchez y Napoleonchu? ¿Declararlo Persona non grata? Con el grado de disparates que estamos viendo, todo es posible.

Y ahora amenaza con poner trabas a la visita que tiene anunciada Milei el 21 de junio para recoger un premio. ¿Le van a poner impedimentos al presidente de un país con el que mantenemos relaciones diplomáticas? En el entorno del ministro efectivamente se decía ayer que podían declararlo Persona non grata. Eso lo debe decir otro que también ganó la oposición en una rifa. Se puede designar Persona non grata a alguien que está acreditado en tu país. Ya comprendo que por la deriva que está tomando esto, Milei es capaz de mandarse a sí mismo de embajador a España un rato sólo para seguir sacando de quicio a Sánchez y Napoleonchu. Pero por ahora y según los procedimientos existentes antes de que Napoleonchu inventara una nueva diplomacia, declarar a Milei Persona non grata es algo que no se hace. Si lo que pretenden es que no puede venir a España, ya saben lo que tienen que hacer: romper relaciones. Pero no tienen el valor de hacerlo por las catastróficas consecuencias que tendría. Así que son capaces, cuando venga, de no ponerle ni la mínima seguridad que debería tener. Todo se andará. Ya lo saben ustedes: no paramos de mejorar.

Artículo publicado en el diario El Debate de España