Espero no estar pensando con el deseo al opinar que el triunfo de Milei debe representar un hito en la historia ideológica de Hispanoamérica. Por primera vez un candidato se atreve a hablarle directo al pueblo diciéndole la verdad, presentándose genuinamente y declarando sin miedo su opción ideológica liberal ¡Y GANA!
Considero que la lección fundamental que Milei nos da a los liberales es el rechazo básico a los tibios en política, la sumisión al discurso de la corrección política, el encubrimiento en el rótulo del centro, para esconder la verdadera opción liberal-conservadora, el temor a hacer oposición de frente, todas estas actitudes deben ser eliminadas, pues el miedo a no someterse a la dictadura de la narrativa progresista se demostró ser una elección perdedora.
La lección de Milei es que, si se puede obtener el poder sin miedo a enfrentar al progresismo, con un régimen autoritario, corrupto y delictivo no se puede congeniar, el socialismo del siglo XXI en toda Hispanoamérica quiere imponer un régimen dictatorial, estatista y bajo los patrones del marxismo cultural, frente a este se debe presentar la opción de un régimen de libertad y orden, esto es el liberalismo.
El liberalismo pone prioridad en la libertad del individuo, este es soberano ante el estado y no al revés. Desde Hobbes se establecieron los principios fundamentales de este, tales como el derecho del individuo, la igualdad natural de las personas, el carácter convencional del Estado (que conllevará a la posterior distinción entre este y sociedad civil), la legitimidad representativa y popular del poder político (al poder ser este revocado de no garantizar la protección de sus subordinados).
El opuesto a este es el socialismo, que limita los derechos individuales ante los colectivos, que mitifica al Estado e impone el debilitamiento de la propiedad privada, métodos de redistribución de la riqueza ineficientes sobre todo cuando el régimen estatal no la produce, ya que Mises demostró la inviabilidad de este. El socialismo establece el empoderamiento del Estado y la fuerte intervención del Estado en los asuntos económicos y sociales, por lo tanto, coartando la libertad del individuo.
En la versión posmoderna del socialismo, inspirada en la tesis del populismo de Laclau, se potencia aún más el poder estatal y su versión podemista-chavista lleva a un régimen autoritario, que basado en las tesis de los economistas poskeynesianos de derroche fiscal terminan en dictaduras pauperizantes que eliminan las libertades y quiebran al Estado, ahí están los ejemplos en la versión dura de Chávez- Maduro, Díaz-Canel, Ortega, Evo y Correa y en su versión light Lula, Kirchner, AMLO y Petro (por ahora, pues su sueño es emular a Chávez), todos regímenes que solo benefician al autócrata.
A este socialismo del siglo XXI solamente se le han opuesto líderes con propuestas edulcoradas, que quieren imitar al líder socialista y por lo tanto el pueblo prefiere la versión original, o en el mejor de los casos, ganan pero por su moderación no cumplen el programa de derrotar al socialismo y por lo tanto estos vuelven al poder, ahí están los ejemplos de Macri, Piñeres y Duque.
Frente a esta opción fracasada del gradualismo que tiene en el subdesarrollo estructural a América Latina, se impone ahora la opción radical del liberalismo de Milei, que propone un modelo de gobierno basado en la escuela austriaca de economía (Menger, Von Bohm-Bawerk, Ludwig von Mises, Friedrich Hayek, Milton Friedman, Murray Rothbard.) que postula que el socialismo no sólo es derrochador e ineficiente, sino que es imposible desde un punto de vista puramente teórico.
“El análisis de Mises puede resumirse como sigue:
Sin propiedad privada en los medios de producción, no habrá mercado para los medios de producción. Sin un mercado para los medios de producción, no habrá precios monetarios establecidos para los medios de producción. Sin precios monetarios, que reflejen la escasez relativa de bienes de capital, los responsables económicos no podrán calcular racionalmente el uso alternativo de los bienes de capital.” ( https://mises.org/es/wire/por-que-siempre-el-calculo-socialista-es-imposible ).
Milei en resumen se presenta con un discurso claro, coherente, frentero que propone acabar con el paradigma socialista pauperizante a través de la aplicación integral del paradigma liberal, en campaña presentó la versión ultra de este, la realidad lo hará ir hacia un modelo más moderado, pero sin jamás, espero, transigir en los fundamentos del programa liberal propuesto.
Otra lección que el triunfo de Milei nos da es la imperiosa necesidad de la unidad de la derecha. Macri y Bullrich dieron la gran lección de humildad, antepusieron el interés de la patria y se apoyaron con toda la firmeza necesaria a Milei, esta unidad permitió la derrota del socialismo del siglo XXI en su versión kirchnerista.
Las dos lecciones, la de Milei de un discurso claro, radical y coherente presentando la realidad tal como es y diciendo la verdad sobre la necesidad de un programa radical de rectificación del fracaso socialista; y la de la derecha que se unió a Milei para hacer posible la derrota del kirchnerismo, deben ser seguidas por toda la derecha en Hispanoamérica.
Ya basta del miedo a la narrativa del marxismo cultural, al gradualismo ante el fracaso económico socialista y a la indecisión (centrismo) ante la pretensión totalitaria del socialismo del siglo XXI. Si se presentan en nuestros países líderes que sigan esta ruta, que aprendan la lección de Milei y abandonen la corrección política temerosa de la narrativa progresista, habrá una ruptura fundamental del discurso político socialista predominante, si no, se proseguirá en la senda fracasada del socialismo del siglo XXI. Ojalá haya líderes en nuestros países que aprendan la lección de Milei.
Feliz navidad y Próspero 2024 les deseo a todos mis lectores, salgo de vacaciones de fin de año, nos vemos de nuevo el lunes 22 de enero.