OPINIÓN

La ciudad destruida

por Omar González Omar González

El destino turístico de ensueño que alguna vez fue Puerto La Cruz en el oriente venezolano ha sido destruido por la incapacidad, el abandono y la desidia de las autoridades nacionales, regionales y locales.

Esta ciudad enclavada frente al mar Caribe, que fue tan atractiva por sus playas, hoteles, restaurantes comercios y sitios de esparcimiento y recreo, hoy solo es una sombra de su pasado.

Hoy Puerto La Cruz es una ciudad sucia, contaminada, insegura; sus calles están intransitables, sus principales comercios cerrados, lo mismo que sus hoteles y famosos restaurantes.

Una ciudad donde el número de turistas que la visitan no se acerca ni por asomo al de sus mejores épocas.

Puerto La Cruz, capital del municipio Sotillo que por años fue el emblema de Anzoátegui y de todo el oriente venezolano, en la actualidad está practicante acabada.

Sus últimos alcaldes la saquearon, exprimiendo su menguado presupuesto para provecho personal, expropiaron hoteles, terrenos y empresas privadas, cerraron comercios y se olvidaron de los servicios públicos.

Puerto La Cruz –de su esplendor solo quedó el recuerdo– es la ciudad con más basura en las calles y playas, y con más huecos de toda Venezuela, y es que los gobernantes no se han ocupado de ella; por el contrario, la arruinaron por completo.

Quienes estamos permanentemente en sus calles, quienes hacemos las compras de alimentos en su Mercado Municipal, quienes transitamos por la Avenida Municipal y por la Calle 5 de Julio, y por sus barrios y urbanizaciones, sabemos todo el daño que le han hecho a este municipio anzoatiguense.

Es momento de que sus vecinos, sus hijos, sus ciudadanos, digan basta y se activen en aras de rescatar esta ciudad, que hoy se encuentra presa y a merced del desgobierno, la apatía y el desdén de autoridades indolentes e insensatas.

Tal vez muchos de ustedes, apreciados lectores, puedan decir lo mismo de sus ciudades, de sus estados y de sus urbanizaciones o barrios populares. Sin embargo, aquí un portocruzano por adopción exterioriza su malestar por el estado en el cual sumieron a la bella ciudad porteña.

Tras décadas de esplendor, que la llevaron a ser considerada uno de los destinos más visitados del país, tanto por turistas nacionales como extranjeros, esta ciudad se ha convertido en un espectro de lo que fue.

Definitivamente Puerto La Cruz se merece un mejor destino. Al igual que el resto de Venezuela, no puede seguir aprisionada, asfixiada, saqueada y abandonada, como lo hizo el chavismo.

Todos nosotros, como ciudadanos conscientes, debemos dar un paso al frente y ser valientes para cambiar esta triste realidad.

Hoy todos los venezolanos, quienes viven en el cerro o en el edificio, quien es profesional u obrero, ama de casa o mujer empoderada en su negocio, el joven y el adulto mayor, todos debemos contribuir en la construcción de una salida a esta terrible situación creada por el socialismo.

Lo primero que hay que pensar es en sacar de las posiciones de poder a los responsables de este desastre. No podemos tolerar más pasivamente esta guachafita de prolongar la usurpación perniciosa ni a sus cómplices.

Queremos vivir en ciudades para la vida, queremos vivir en un país donde se pueda morar con normalidad, es por ello que debemos derrumbar los obstáculos y conseguir la redemocratización de Venezuela y la única forma de hacerlo es sacando a las mafias del poder y punto…

Solo así, tu ciudad y mi ciudad cambiarán para bien, solo así tendremos un país libre y de ciudadanos libres.