OPINIÓN

Intentar que Maduro negocie su salida puede traer más muertos, presos y torturados que la opción de sacarlo

por Eduardo Ortega Díaz Eduardo Ortega Díaz

Hasta la fecha y aunque son liderazgos opositores diferentes, el resultado final sumado es lamentable, cientos de muertos, torturados, desaparecidos, presos, con sus negocios arruinados, familias sufriendo por órdenes de Maduro y todos en vano, porque no ha sido ni siquiera enfrentando al tirano o peor, consiguiendo la libertad del país.

Estados Unidos quiere presentarlo ante la justicia, el pueblo quiere derrocarlo y María Corina darle garantías. Así de compleja está la situación actual en Venezuela, nada sencillo de resolver.

Estados Unidos mantiene una recompensa sobre Nicolás Maduro y por la declaración del jefe de su misión diplomática para Venezuela, que es importante aclarar despacha desde Bogotá, se debe reconocer el triunfo de Edmundo González Urrutia primero para poder negociar y espera que sea antes del 10 de enero 2025.

El pueblo quiere derrocarlo, se ha visto el riesgo que corrieron los ciudadanos para asistir a los eventos de María Corina Machado en todo el territorio. Aun sin recursos y con represión, participaron en la elección y defendieron el voto, incluso exponiendo su vida, porque si algo caracteriza a Maduro es la represión a todo aquel que disienta de su política.

La líder política María Corina ha manifestado que está lista y dispuesta a negociar, darle garantías al dictador y su cúpula, luego de tantos muertos, detenidos, exiliados y personas saliendo del país, luego de demostrar con actas que ganó Edmundo, es su ruta propuesta y asumida por ella.

Mientras esto ocurre Nicolás Maduro la tiene clara, esperar que pase el tiempo, utilizar la represión para mantenerse en el poder, luego hacer lobby con el petróleo y los recursos de los venezolanos para comenzar negociaciones internacionales, tal vez en este momento estén complejas por su fraude, pero al pasar de los años y llegada de otros presidentes nuevos en la región podrá volver a retomar relaciones, una práctica cubana aprendida de Fidel Castro, quien pasaba años difíciles con los republicanos en el poder y conseguía luego alivios con los demócratas.

Es lógico pensar que Maduro no va a entregar de buena forma, no lo hizo Daniel Ortega ni Fidel Castro, dictadores de dos países pobres, ¿por qué va a entregar Maduro si tiene más recursos,  incluyendo las grandes comisiones que le quedan por inundar a Estados Unidos de droga, como señala la acusación contra él?

¿Se podrán alinear los intereses de todos y así poder derrocar a Maduro y presentarlo a la justicia de Estados Unidos?, como él no es venezolano se puede extraditar.

Estados Unidos tiene una oferta de mercenarios para entregarle a Maduro por una recompensa mayor, el pueblo tiene la fuerza y capacidad de tomar todos los espacios políticos y de poder en el país, quedando demostrado en las elecciones que cuadruplicamos a los que defienden al dictador y María Corina puede contribuir en lograr articular al pueblo, a Estados Unidos y aumentar la recompensa por Maduro.