OPINIÓN

“Háganlo juntos”

por El Nacional El Nacional

El régimen de Nicolás Maduro ha desatado, también, contra España y su gobierno una escalada de insultos, amenazas y acusaciones. Llama la atención que esa andanada no vaya dirigida contra la “ultraderecha” -en cuyo saco meten al PP y a Vox- de donde surgió, por iniciativa del Partido Popular, la propuesta que resultó aprobada por el Congreso de los Diputados de reconocer a Edmundo González como el presidente electo. 

A Maduro, Cabello y los Rodríguez lo que más les molestó fue que la ministra de Defensa de España, Margarita Robles, haya calificado al gobierno de “dictadura” y haya cuestionado la persecución y la violación de los derechos fundamentales de los venezolanos. De manera que a pesar de las precauciones y mediaciones que la política del Ejecutivo de Pedro Sánchez esgrime para tratar el caso venezolano, no le exime del aporreo verbal de la cúpula del régimen ni protege a sus ciudadanos en territorio nacional, como lo evidencia la detención de los dos españoles que han sido señalados, en una maniobra típica del régimen madurista, de participar en un supuesto complot terrorista.

El director del diario El Español, Pedro J. Ramírez, de larga trayectoria periodística en su país, donde también ejerció la dirección de los diarios Cambio16 y El Mundo, conocedor profundo de la vida democrática española y de los hombres que han ejercido el poder, junta estos hechos recientes para reflexionar sobre la política exterior del gobierno socialista –“no debería ser un ring”, dice– y proponer tanto a Pedro Sánchez como al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, que descuelguen simultáneamente el teléfono, se escuchen y actúen de manera coordinada tanto para proteger sus intereses nacionales como ayudar, efectivamente, a acabar con «la tiranía chavista».

Lo que plantea Pedro J. Ramírez es que sobre Venezuela, tanto el PP como el gobierno de Sánchez están de acuerdo en lo sustancial, porque no tienen ninguna duda de que fue Edmundo González quien ganó las elecciones en Venezuela. De allí, que el gobierno español no haya reconocido la proclamación de Maduro y que el PP, por su parte, haya presentado la propuesta parlamentaria para reconocer a González. Ambas posturas, precisa Ramírez, son perfectamente compatibles. Es más, agrega, “deberían obedecer a un reparto de papeles”, atendiendo a la posición de quien es gobierno y de quien es oposición y puede “clavar las espuelas”.

La “sucia treta” de la detención de los dos españoles –vecinos de Bilbao, sin afiliación política y amantes de los viajes, como registra la prensa española– solo evidencia para Ramírez que ya no cabe duda de que es Maduro quien impulsa la “escalada antiespañola, para tapar el aislamiento político al que le está llevando su fraude electoral”.

Lo que pide en definitiva Pedro J. Ramírez es que el gobierno de Sánchez y el líder de la oposición “aquieten a sus arietes” y sumen para contribuir con eficacia a la liberación de Venezuela. “Por lo menos esta vez, háganlo juntos”. A la causa democrática venezolana le interesa la mayor cantidad de apoyos robustos por encima de los espacios ideológicos y los cálculos partidistas.