I El fracaso del Foro de Sao Paulo
Como un total fracaso puede catalogarse el Foro de Sao Paulo que se llevó a cabo en Honduras durante la última semana de junio, al punto que de los “altos” ponentes que habían sido anunciados, sólo asistió Alberto Fernández, el ex presidente de Argentina, y apenas se reunió a puerta cerrada con Xiomara Castro, mientras solo hubo “expositores” de segunda y tercera jerarquía, que vinieron en plan de turismo político, sobre las arcas del Estado de Honduras; quienes ni los nombres fueron conocidos en listas por sus propios “organizadores”, porque simplemente nada tienen escrito, y menos como alguna propuesta válida ante los pueblos de América Latina.
De hecho, fue de tal magnitud el desastre y la vergüenza que el evento fue “clausurado” de manera intempestiva en las mesas donde se estaban reuniendo tales “invitados”, porque ni siquiera pudieron realizar un evento con la lectura del documento final, ante el desmadre político y diplomático en que se convirtió semejante “foro”; al punto que 10 países miembros de la Comisión de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac): Argentina, Chile, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay; rechazaron en un documento emitido por la cancillería de la quinta nación de las mencionadas cualquier denominación de lo que fue llamado en plena ejecución del Foro de Sao Paulo, como “Celac Social” {1}; es decir, otra impronta de Xiomara Castro al frente de este organismo, lo cual revela, en este caso que intentaron elevar el nulo espacio mediático, más aún cuando esta “asamblea” se llevó a cabo, bajo un contubernio de “celebración de 15 años de golpe de Estado”, a la par que ocurría una desaparición de cinco jóvenes en Tegucigalpa, que finalizó con el asesinato de todos ellos; y en la misma medida, otros sectores del país eran afectados por las lluvias.
Es decir, ocurrió un conjunto de eventos naturales, sociales y políticos, que acabaron por diluir hasta la “declaratoria” del Foro de Sao Paulo, todo en un contexto de regresión ciudadana, de una nación que está llena de problemas en sus connotaciones humanas, como el desempleo y la migración, y que irónicamente fue una de las banderas que promovió uno de los “ponentes” a través del represente de Venezuela, Jorge Arreaza, quien hasta fue aplaudido cuando señaló: “…Queremos que tengan una guía…que se parezca a lo que ocurre en Cuba, lo que ocurre en Venezuela…”{2}; es decir, el gobierno de Honduras en vez de tomar ejemplos como su vecino de El Salvador, o naciones del sur como Uruguay o Chile, éstas dos últimas promotoras de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), que han generado resultados positivos en sus naciones y calidad de vida de sus habitantes, se inclina por los peores ejemplos del continente en materia de derechos humanos, y empobrecimiento de sus pueblos; lo que demuestra hasta dónde llegó el fracaso del Foro de Sao Paulo.
Desde esta acotación de escenarios políticos, es poco lo que se podría cambiar en términos de esquemas de orientación de Estado; y, por ende, los problemas se agravan y se multiplican, porque lo que se intenta es concentrar el poder de manera hegemónica sobre la sociedad; en este caso, la hondureña.
II Agotada la retórica anti- ZEDE
Así, luego de ver y escuchar tanta podredumbre política, es evidente que también al foro de Sao Paulo se vio agotado en la retórica contra las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE) en la nación centroamericana, al punto que ni los promotores de Internacional Progresista y sus derivados pudieron conjugar sus monsergas, en virtud que las mismas, ya son evidentes en sus contextos de querer echar de Honduras, cualquier inversión norteamericana, como lo dejan comprobado las palabras de Arreaza, al decir que son precisamente las naciones con el más acérrimo discurso antinorteamericano, los senderos que deben prevalecer en la patria de Morazán.
¿Y por qué lo anterior? Porque de nada han valido las consumadas ficciones en materia constitucional, soberanía, violaciones a los derechos humanos o ambientales, y cuánta historia pudieran imaginarse en contra de las ZEDE – Próspera, Ciudad Morazán y Orquídea -, precisamente, cuando todos los llamados fake news, o desinformación, han estado apartados de los conceptos de las tres I que conforman el oxímoron de los derechos en una democracia: isonomía, isegoría e isotimia, lo que equivale a decir, que esas acusaciones, no solamente tocan la sima (homófona de cima, y con sentido antónimo, o sea, profundidad) en cualquier escenario descriptivo, es que si se procurara revertir con antecedentes los elementos negativos que fustigan contra ese espacios de inversión y empleos en Honduras, bastaría ver la realidad asiática que lidera China en sus diversos esquemas de diversificación económica, que la han llevado a convertirse en un ejemplo de la modernidad mundial, y por ende, con alto impacto positivo sobre las condiciones de vida de esa nación.
En tal sentido, la retórica anti-ZEDE ha sido derrotada por la realidad, y porque sus voceros de propaganda quedaron envueltos en sus propios esquemas sin validez histórica, epistemológica, jurídica y pragmática. Así que el Foro de Sao Paulo tampoco pudo impactar los escenarios de una confrontación estéril, en la cual los principales beneficiados en cada sentido de acciones económicas y sociales de los promotores ZEDE han sido los nativos y sus trabajadores. Significativamente hablando, las redes que han sido los principales espacios en la retórica de las especulaciones y la desinformación; han sido precisamente esas redes con una planificación de vocería y defensa, las que han terminado imponiendo una ofensiva de realidades, que los grupos, fundamentalmente anónimos, no pudieron continuar ampliando ante la pérdida de credibilidad.
En consecuencia, pareciera que al final el recuento de pésimas astracanadas, ahora los principales voceros anti-ZEDE, sitúan sus esferas de discursos en el retiro de Honduras del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a la Inversión (Ciadi), porque ya no existen planteamientos desfasados e inconexos en el ámbito jurídico, con los cuales, pretender continuar sosteniendo una farsa ante la legítima constitucionalidad.
Se agotó el discurso de la nulidad de origen de las ZEDE. Se agotó el tema de que su aparición en la Constitución fue producto de una acción seudojurídica. Se agotó la repetición de frases inicuas. Se agotó un contexto de hechos irreales sobre el daño a los hondureños. Se agotó el maniqueísmo de extender el conflicto ZEDE entre grupos políticos. Se agotó la desviación de intentar culpar a los promotores de otros hechos con más fake news. Se agotó la descontextualización de videos e imágenes. Se agotó el signo de polarizar las ZEDE en una bochornosa diatriba entre el bien y el mal. Se agotó el resquebrajado discurso anti-imperialista al comprobarse que era antinorteamericano. Se agotó el conjunto de falsas visiones anti-ZEDE, y con ello, también se agotó su plenaria en el Foro de Sao Paulo.
@vivassantanaj_
Nota: Investigación en desarrollo por el autor. No implica necesariamente que miembros de ZEDE compartan total o parcialmente lo escrito.
Notas
{1} https://hch.tv/2024/06/28/celac-rechaza-comunicado-publicado-como-celac-social/
{2} https://x.com/vivassantanaj_/status/1807895423652450781
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