Por Servando Marin Lista
Entendemos, que con la plataforma electoral, sociedad Integrada: «SÍ es sí en positivo (…) no solo se dicen, se hacen, porque al hacerlas se dicen solas” -Woody Allen-.
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Una plataforma electoral con liderazgo de nuevo tipo representa un decálogo de conciencia ciudadana.
I Resumen
La semántica se limita a la relación entre las palabras, mientras que la pragmática abarca las relaciones entre las palabras, las personas y los contextos.
No se trata de que la sociedad integrada: «sí es sí en positivo [+]», enriqueció su léxico; al contrario, diversificó los medios edificantes y lo positivo de la política con un liderazgo militante de nuevo tipo que representa un decálogo de conducta ciudadana.
En nuestro proyecto de Plataforma Electoral Sociedad Integrada: sí es sí en positivo [+], sólo necesitamos ese tipo de voz, ninguna otra nos hace falta. No necesitamos charlatanes ni vendehumos, necesitamos hacedores de cosas. Las cosas se hacen haciéndolas, no hablándoles. Sí es sí en positivo [+]», nos preguntamos:
[i]- ¿Qué significa sí es sí?
[ii]- ¿Por qué utilizar el nombre de clase media en positivo -llamada ahora- «sí es sí en positivo [+]»?
[iii]- ¿Para qué utilizamos el «Sí» de Lusinchi (1984)?
La plataforma electoral «sociedad integrada: sÍ es sí en positivo [+]», desarrolla una jerga, un vocabulario, y con él, la importancia de la neolengua, nuevalengua o nuevahabla -newspeak en inglés-, es una lengua artística que aparece en la novela 1984, de George Orwell [A], quien de su narrativa que -no por ficticia-, es menos real.
II Palabras difíciles
[a] Construir una «realidad», con un conjunto organizado de significaciones político-ideológicas, con ideas o postulados fundamentales que nos deben caracterizar en relación con el cómo deberían funcionar las instituciones de un Estado, una sociedad o una población.
[b] Usar de manera debida un léxico con una lenguaje para no agredir, insultar, halagar, distraer, engañar e, incluso, estigmatizar -como «alacrán» o «nazbol»-, a alguien ni a nadie.
[c] Corroborar lo que han afirmado varios filósofos, poetas y educadores, que el mundo de los políticos es del tamaño de su lenguaje, las neolenguas tienen un léxico cada vez más importante.
[d] Impedir los matices, las ironías, todos esos vuelcos que no enriquecen la comunicación y el pensamiento humano, porque éstas son sustituidas por fórmulas, clichés, frases repetidas hasta la saciedad, lo que los retóricos llaman lugares comunes: Aristóteles habla del éthos del orador, el páthos del oyente, y el discurso.
[e] Lograr una mejor comunicación, pero también, y sobre todo, impulsar un pensamiento crítico que sea capaz de analizar la información que recibimos.
[f] Repetir de manera ritual la narrativa que terminan por impulsar el pensamiento y la reflexión: con nuestros anhelos forjaremos la «Sociedad Integrada» que deseamos lograr y no cesaremos de soñar hasta convertirlos en realidad.
[g] Adoptar un decálogo de conducta, donde seremos fieles a valores y principios de la honestidad, actuar con sinceridad, honradez, decencia, justicia, recato y la franqueza.
[h] Legitimar otras vías o espacios para impulsar, la discusión y la crítica: Estamos conformando una estructura regional en busca de los «militantes de nuevo tipo» que representan un decálogo de conducta ciudadana.
[i] Erigir un modelo a seguir de conciencia ciudadana a partir de la formación de líderes cuyas actitudes éticas y políticas sean suficientes para promover la justicia social, la soberanía popular y consecuentemente, el desarrollo de la democracia.
[j] Comprender que la vida no es algo que se nos da hecho, sino que tenemos que producir las oportunidades para alcanzar el éxito a partir de la inteligencia emocional, es decir que todos lo que queremos lograr el éxito debemos detenernos y reflexionar acerca de lo que nos hace totalmente libre de factores externos de poder -como lo que piensen los «alacranes» o los nazbol-.
III Las exigencias
[i] Instruir al fiscal para que revisen los casos de los muchachos presos y a nombre de la justicia: Debemos seguir insistiendo pacíficamente hasta lograr la libertad de todos.
[ii] Ya varios destacados venezolanos -el ex diputado José Aparicio, entre otros-, se han pronunciado por revisar esas detenciones políticas y solicitar su libertad incondicional -mientras están siendo liberados jóvenes , que estaban detenidos desde el 28J-.
[iii] Hay casos dolorosos allí. Hay abusos inaceptables. No sabemos si después de negar el perdón y ofrecer la cárcel de Tocorón a todos los «terroristas»: paz, el amor y la reconciliación nacional, seguirán siendo necesarias.
[iv] Solo queda tener esperanzas de que, efectivamente, habrá una pizca de justicia, no son agentes de la CIA, ni traidores de la patria, ni mucho más.
IV Comprometidos en sí para sí
La sociedad integrada: si es sí en positivo [+], viene realizando una gira por todo el estado Sucre, desde la fundación de esta plataforma ha sostenido encuentros con líderes naturales, personalidades, intelectuales, independientes, progresistas y los movimientos sociales independientes nacidos a luz de sus propias luchas reivindicativas.
La sociedad integrada: si es sí en positivo [+], está dedicado al trabajo organizativo que le corresponde y, además, tiene el deber de proteger estos movimientos sociales frente al gobierno y sus partidos, no solo por él, sino por los votos que representan cada liderazgo de nuevo tipo en cada municipio del estado Sucre comprometidos, en sí y para sí.
La sociedad integrada: si es sí en positivo [+], muestra nuestra capacidad de asombro, que se ha venido extinguiendo, pareciera que activar mecanismos jurídicos, cuando se trata de contrariar disposiciones o acciones del gobierno, siendo legales, pasan a una especie de limbo donde todo es posible.
La sociedad integrada: si es sí en positivo [+], considera que ese tipo de orquestación no conducen a la larga a la reducción total de los sectores de la «oposición otra», porque al final del camino triunfará la «democracia», en el deber ser.
Para evitar que la «población desee o piense en la libertad», se eliminan los significados no deseados de la palabra, de forma que el propio concepto de «libertad política o intelectual» deje de existir en las mentes de los hablantes.
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