En esta época de pandemia, cuando muchas de las aerolíneas han disminuido o perdido totalmente la función de transportar pasajeros, sea por restricciones en las rutas o prohibiciones de vuelo, esto ha generado la puesta en tierra de muchos aviones que quedaron fuera de servicio, y uno se pregunta: ¿dónde se están parqueando tantos aviones?
Algo que no mucha gente sabe es que no todos los aviones son propiedad de las aerolíneas. Muchas prefieren comprar solo unos cuantos y alquilar algunos más, para disminuir la inversión de capital y reflejar en los estados de ganancias y pérdidas un gasto ocasionado por el alquiler. Sea que los necesiten para su operación continua o de manera temporal para sustituir alguno que entra en mantenimiento o por la necesidad puntual del aumento del flujo de pasajeros en épocas de temporadas altas. Es por esto que hay empresas especializadas que solo los alquilan, no los operan. Y en este momento muchas aerolíneas, aun cuando deban pagar un monto por indemnización, están devolviendo la mayoría de los aviones en alquiler.
Pero ya sea que pertenezcan a las aerolíneas o a las empresas de arrendamiento, todas ellas tienen que ver cómo solucionar el tema de dónde estacionar todos estos aviones mientras dura esta crisis.
Ciertas aerolíneas de gran tamaño están utilizando las mismas pistas de aterrizaje de los aeropuertos para estacionar sus aviones, en la pista menos utilizada de ellas, como es el caso del aeropuerto de Frankfurt, uno de los aeropuertos centrales más activos e importantes de Europa. Una de las cuatro pistas de aterrizaje, así como las calles de rodaje que conducen a ella, ahora alberga docenas de aviones; lo mismo sucede en Múnich (el segundo centro principal de Lufthansa) y al igual en Berlín. La mayoría de las 700 aeronaves fuera de servicio, de las 763 del Grupo Lufthansa y miembros de su familia corporativa, que incluye a Austrian, Brussels Airlines, Eurowings y Swiss, están estacionadas en estos 3 aeropuertos.
United Airlines y American Airlines están almacenando aviones igualmente en sus aeropuertos centrales. Con más de 40 aviones de United estacionados en el aeropuerto intercontinental George Bush, el principal de la ciudad de Houston, en Texas. American tiene la mayoría de sus aviones Airbus y Embraer en Pittsburgh, en el estado de Pensilvania; mientras que los de la serie Boeing se encuentran en Tulsa, Oklahoma. Agruparon los aviones similares por si algunos necesitan cierto mantenimiento, tener mecánicos e ingenieros que se especialicen en cada tipo de avión reunidos en el mismo lugar.
Las aerolíneas pequeñas que solo tienen algunos aviones y las compañías de alquiler dueñas de algunos otros tantos han tenido que solucionar y ver dónde los estacionan, para que sea lo menos oneroso. El simple hecho de estar parados en aeropuertos principales, donde las tasas de estacionamiento y pernocta pueden ser muy altas, también se puede convertir en una carga financiera considerable si no se están operando.
Algunas aerolíneas están utilizando instalaciones dedicadas al almacenamiento, centros de reciclaje o cementerios aeronáuticos, como es el caso de aeropuertos que muchas veces hemos visto en las películas o en fotografías, donde hay cientos de aviones estacionados y preservados.
Muchos de estos aeropuertos están ubicados en zonas remotas, desérticas o muy secas, para evitar que la humedad dañe equipos electrónicos o erosione componentes mecánicos.
En Estados Unidos hay varias instalaciones de este tipo, uno muy famoso en el desierto, a las afueras de la ciudad de Tucson, Arizona, en la base aérea Davis-Monthan, que alberga alrededor de 4.400 aeronaves, la mayoría aviones militares, estacionados en un espacio de 10,5 kilómetros cuadrados.
Otro que está siendo utilizado por las aerolíneas Southwest y Delta Airlines, almacenando más de 50 aviones cada uno, es Victorville, una antigua base aérea de Estados Unidos, en California.
En Europa, concretamente en España, se encuentra en Aragón el estacionamiento de aeronaves más grande de ese continente. A solo 12 km de la ciudad de Teruel y no pertenece a la empresa pública española que gestiona los aeropuertos de interés general en España (AENA), sino al consorcio formado por el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Teruel, mejor conocido como la plataforma aeroportuaria, Plata.
Con coordenadas Norte-40º 24′ 44.05″ Oeste-1º 13′ 16.43″ y una elevación promedio de 1.015 metros, tiene un excelente clima seco y 242 días de sol al año. Es un aeropuerto internacional con espacio aéreo libre de congestión. Ideal como base para el desarrollo aeronáutico industrial, gracias a las características que lo definen.
Localizado en el centro de las grandes ciudades: Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza y Bilbao (60% del producto interno bruto español y más de 20 millones de habitantes en un radio de 400 kilómetros).
Ha sido desarrollado en 340 hectáreas,siendo el espacio de mantenimiento, reparación y operación, además de estacionamiento de aeronaves, más grande de Europa.
Tiene capacidad de estacionamiento de larga estadía para 250 aeronaves de gran tamaño y empresas dedicadas para su preservación y rutina de mantenimiento.
Los aviones parqueados por largo tiempo necesitan ser preservados. Algunas de las acciones que se deben llevar a cabo son: sellar las puertas, accesos y orificios instrumentales (tubos Pitot, presión estática), para evitar el ingreso de polvo, arena del desierto, e impedir que algunos insectos hagan sus panales o aves formen sus nidos. Igualmente, se debe seguir el procedimiento del fabricante para preservar los motores, como puede ser el drenaje de aceites y fluidos hidráulicos, así como una rutina de mantenimiento programada en el tiempo que se mantenga estacionado.
Entre algunas de las empresas establecidas en el aeropuerto de Teruel para esa función tenemos a Tarmac Aerosave: Conformada por las empresas Airbus, Safran y Suez, y probada por la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) con certificado número FR.145-627, para realizar el mantenimiento de toda la familia Airbus, todos los tipos de motores más los del A380 General Electric y Rolls Royce, además del mantenimiento en línea de Boeing serie MD80 y todas las series del B737.
Esta infraestructura, de fácil acceso a todos los servicios y con mano de obra de gran calidad, es uno de los principales centros de empleo e impulso en Teruel, con referencia a nivel mundial en materia aeronáutica, y mantiene las tasas por servicios más económicas de los aeropuertos españoles.
La misma paralización de la aviación mundial ha dado origen a nuevos proyectos y ampliaciones, solo pendientes de que se levante el estado de alarma.
En estos momentos, los proyectos licitados que están en tramitación suman algo más de 9 millones de euros, los cuales darán empleo a muchos trabajadores parados en esta zona de Aragón.
Un negocio que en este momento y por tiempo indeterminado, pues nadie sabe cuánto tiempo puede durar la recuperación de la industria, generaría unos buenos ingresos para los gobiernos de Aragón y Teruel.