OPINIÓN

En el Zulia: presos salen a la calle a protestar por comida

por Carlos Nieto Palma Carlos Nieto Palma

La situación penitenciaria de Venezuela, cada día empeora más, todos sufrimos del desastre económico que vive el país. Nunca imaginamos que viviríamos este caos colectivo del cual nadie se salva.

Hoy me voy a referir a algo que me tiene asombrado, realmente el realismo mágico al que el gran escritor colombiano nos tenía acostumbrados se quedó corto ante esto, que aconteció en el Reten de Cabimas en el estado Zulia el pasado lunes 28 de septiembre.

Un grupo, de aproximadamente 150 reclusos de este centro de detención preventiva salieron a la calle a protestar por la falta de agua, comida y las condiciones infrahumanas en que allí viven. La mayoría de los reclusos que prorrumpieron a la calle son los que padecen tuberculosis, desnutrición, VIH y otras enfermedades.

Supongo que mis lectores se preguntarán: ¿Cómo los presos salieron a protestar a la calle si están presos? Solo puedo decir que esto tiene que ver con el descontrol y la falta de autoridad de los encargados de su custodia. Como muchas veces lo he dicho, en Venezuela, en las cárceles mandan los presos.

Para entenderlo mejor les cito la nota que escribió la investigadora de la organización Una Ventana a la Libertad en el estado Zulia, Jessika Ferrer, en nuestro sitio web: “La situación amaneció tensa. Al mediodía, exactamente a las 12:22, y aprovechando que los funcionarios del Cuerpo de Policía Bolivariana del Estado Zulia (CPBEZ), responsable de la custodia externa del penal, abandonaron la garita, unos 150 internos, entre ellos 4 reclusas empezaron la protesta. Con pancartas, algunos con tapabocas y otros sin camisa se apostaron en la avenida Andrés Bello del sector La Misión. ‘Antes de salir se acordó con los líderes de cada patio que no habría disparos. Una detonación y nos mataban a todos. Otra cosa es que debíamos estar en grupo para evitar que los funcionarios dispararan creyendo que había fuga’, detalló uno de los reos manifestantes.

Segundos después se divulgó el primer video. Para no alarmar a los vecinos, el recluso que grababa aclaró que no se trataba de una fuga masiva. Se les estaban violando sus derechos, su posibilidad de sobrevivir y salían a exigirlo. El primer grupo hizo con gritos su primera petición. ‘Dejen pasar la comida, el agua y la medicina y nosotros nos guardamos’¸ expresó otro interno.

Los guardias, recordaron los privados de libertad, accedieron a la demanda. Habilitarían una carretilla para que todos los familiares depositaran ahí sus insumos y la dejarían en la entrada del penal. ‘Eso iba a generar que nos matáramos unos con otros. Aquí para que no se pierda la comida ni nada, el familiar debe acercarse al portón y que su preso vea qué entrega. Por eso no se aceptó’.

Antes de la 1:00 de la tarde salió otro grupo mayor. Sacaron en hombros a los presos en condiciones más críticas. Hace más de 24 horas que al retén no entraba ni un litro de agua potable, del pozo artesanal en el frente del recinto emana agua salubre, por eso no se bebe, indicó un interno.

Motivados por las restricciones de movilidad por el COVID-19, muchos familiares desistieron, no esperaron más y volvieron a sus casas con sus viandas. A las 3:30 de la tarde dejaron entregar algunos alimentos. Tal como lo prometieron quienes lideraban la protesta, todos los privados volvieron al recinto”.

Como ya contamos, los presos salieron, protestaron y volvieron a su centro de reclusión, es algo inexplicable, pero que pasa en Venezuela.

Finalizo diciendo que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dictó medidas cautelares al Reten de Cabimas, donde Una Ventana a la Libertad somos los peticionarios, el 6 de febrero de este año y ordeno:

a) adopte de forma inmediata las medidas que resulten necesarias para proteger la vida e integridad personal de las personas beneficiarias. Estas medidas deben ser adoptadas por el Estado atendiendo a las condiciones diferenciadas de las personas que se encuentran privadas de su libertad, en especial, las mujeres embarazadas y aquellas que sean madres;

b) adopte las medidas pertinentes para adecuar la situación descrita a las normas internacionales aplicables en materia de tratamiento de personas privadas de libertad, las cuales pueden incluir decomisar las armas que se encuentren en poder de los internos, reducir el hacinamiento y mejorar las condiciones de detención, brindar atención médica a las personas que lo requieran, proveer personal capacitado y en número suficiente para asegurar el adecuado y efectivo control, custodia y vigilancia del centro, separar a las personas condenadas de las que aquellas que no lo están, entre otras medidas;

c) concerte las medidas a adoptarse con la representación de la presente medida cautelar;

d) informe sobre las medidas adoptadas tendentes a la investigación de los hechos alegados que dieron origen a la presente resolución, para así evitar su repetición”.

El régimen sigue indiferente a todo esto y los presos muriendo cada día más.

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@cnietopalma