Ya pasó de moda la subversión tradicional satirizada en los filmes Bananas (1971) de Woody Allen y Amaneció de golpe (1998), texto de José Ignacio Cabrujas y dirección de Carlos Azpúrua.
Ahora, en el caso cubazolano, es un sistema votacional planificado por el socialismo del siglo XXI que torna en colaboradores automáticos a dirigentes personalistas de oratoria demócrata carente de doctrina y proyecto. Así se configura una sociedad obediente, que a falta de liderazgo apegado a la Constitución vigente y violada se vuelve apática, conformista, centrada en la rutina del sobrevivir neutralizado. Lecciones de Mao, Stalin, Mussolini, Hitler, Fidel Castro.
Las fuentes de este cambio son, a saber:
Primera. Durante 22 años oculta el origen del dinero que sufraga sus puestas en escena. Sin licitaciones ni rendición de cuentas, se compra, quema y renueva el aparataje electoral, se lo programa para el fraude sistemático a través de personal selectivo que va desde su Consejo Nacional Electoral hasta el testigo de mesa que no existe o desaparece. Esta noria puede hacer pausa provisional ante la evidencia de encuestas locales serias, que las hay pocas. Quien concibió y prolonga este mecanismo es el médico Jorge Rodríguez Gómez, graduado en la Escuela de Psicópatas “Edmundo Chirinos”.
Segunda. Votantes en un 20% bajo tutela son empleados públicos y mendigos con carnet de la patria para la limosna del clapismo. Quizás lleguen a 10% supuestos militantes demócratas sobornados con promesas o en efectivo. El resto, grosso modo 70%, no acudió a la reciente farsa del 21N. Oprimido, reprimido, hambreado, secuestrado, atemorizado, tiene la suerte de no sucumbir torturado, ejecutado, suicidado, asesinado. Es el mayoritario sector de cubazolanos a juro, hartos por igual del trono criminal armado y del partidismo anacrónico del G4 con sus caciques de tribus mínimas, finalmente patético, pues acepta secundar a un sufragio de base inconstitucional porque el nuevo improvisado Consejo Nacional Electoral fue diseñado por la dictadura y no por la legítima Asamblea Nacional elegida en 2015, reemplazada por la constituyente oficialista. De este modo, la mafia golpista votacional Maduro-Flores y Rodríguez Gómez abre y cierra su flujo. Dispone sobre México, quizá sí o no, bajo las órdenes de Moscú-La Habana, mediante cable submarino siempre activo dirigido a la….
Tercera y fundamental. El narcomilitarismo hamponil con su Vladimir que apadrina según confesión pública, 100.000 milicianos analfabetas funcionales, 2.000 generales y otros tantos soldados listos para una guerra cainista, armados hasta las uñas, bajo mandato del militarismo castrocubano G2.
Son las columnas de este C3 la tolerada costumbre electoralista que relegitima sin cesar al régimen totalitario. Hoy, la causa del definitivo fracaso opositor formal, de hecho y sin derechos, complicitado con esta trama golpista que impondrá su ilegítimo Estado comunal.
¿Opciones? Pocas y difíciles. Descartados por ahora una explosión popular, una intervención de la DEA, repetición de votaciones que no eligen y convenios mexicanos oportunistas, a simple vista cuando un fruto renace podrido y se busca sembrar un huerto sano resulta determinante erradicar la raíz de esa maligna planta.
Es la más exigente de las alternativas porque, al igual que el 23 de enero de 1958, requiere del trabajo clandestino de una disidencia capaz, fuertemente atada y clara en su prioridad, junto a la imprescindible fuerza del lobby foráneo. Fue así como se pudo refundar a Israel donde su primer presidente, el químico Jaim Weismann, confirmó que luego de 2.000 años bajo sucesivos crueles colonialismos, convertir un pantano en vergel independiente no fue milagro sino resultado de la gigantesca dispersión articulada en función unitaria. Así también para Suráfrica, cuando las democracias liberales advirtieron sin más habladera de paja, con un firme plazo, su decisión de boicotear todo comercio y suprimir todas las relaciones diplomáticas con la blanca dirigencia racista de no iniciarse un pacto electoral, previa liberación del respetado líder Mandela. Por citar solo dos ejemplos.
Para el caso cubazolano se requiere que comprobados demócratas de adentro y afuera penetren los estratos medio y bajo de la fuerza armada fasciochavista con la asesoría de especialistas en ese arduo proceso. Para gestar un golpe institucional cuyas premisas son constitucionales.
Es el reto que afronta la nueva generación política desarmada en lo material pero equipada en lo conceptual, ético y técnico, como lo hace la ejemplarizante cubana de “Patria y vida”, dispuesta para una sufrida tenaz lucha a toda costa por la libertad de su país vital.