En este artículo voy a esbozar una serie de ideas sobre lo que podría ser un gobierno bajo el liderazgo de Edmundo González. Estas reflexiones están basadas en mis observaciones y en algunas de las ideas que he podido percibir de él hasta ahora. Aunque mi acceso a sus propuestas ha sido limitado, estas impresiones me permiten vislumbrar las posibles acciones y enfoques que Edmundo podría tomar para llevar a Venezuela hacia un futuro mejor.
Edmundo González es un funcionario de carrera que ha sacrificado su función técnica para asumir una posición de representar políticamente a la oposición venezolana en las elecciones presidenciales de Venezuela.
Quiero, en principio, aclarar que estas elecciones se realizan en el marco de una situación de usurpación del poder por parte del gobierno ilegítimo de Nicolás Maduro, sostenido por las fuerzas armadas de Venezuela. Este gobierno, acusado de crímenes de lesa humanidad, pretende reelegirse en estos comicios.
Son unas elecciones organizadas por un ente totalmente parcializado con el régimen de Maduro. Bajo esta premisa, es importante aclarar que los venezolanos estamos en la situación menos conveniente e idónea, y más desventajosa para presentar un candidato. Sin embargo, ante la opción de abandonar el poco escenario posible de cambio y abstenerse de participar, con lo que se dejaría el paso franco al régimen de Maduro para que continúe, aplaudo la decisión tomada. Fue lo más acertado, aunque conscientes de que jugamos con las reglas del régimen de Maduro.
Es importante destacar que el candidato presidencial de la oposición es consciente del rol que estamos jugando. María Corina Machado, quien ganó la primaria de la oposición con 90% de los votos, fue inhabilitada por el régimen de Maduro por miedo a competir con ella.
Así que quien tomó la decisión final fue la misma María Corina Machado, endosando su apoyo al embajador Edmundo González.
Aclarados estos puntos, me permito hacer un breve análisis de las ideas vinculantes que pueden emerger de un hipotético gobierno de Edmundo, basado en su perfil.
Pienso que el embajador Edmundo González es un internacionalista formado en la escuela tradicional. Proviene de la Universidad Central de Venezuela y presumo que su entorno inmediato de asesores también provendrá de esta casa de estudio, un entorno que conozco bastante bien, pues yo también soy de esa universidad.
¿Qué pienso que puede suceder? Posiblemente, en el área económica, el embajador Edmundo no se desvinculará del esquema keynesiano clásico, muy apropiado de los tanques de pensamiento del Cendes, que es el centro de pensadores de economía de la UCV. Así que no veo a los IESA Boys comandando la primera avanzada de la recuperación económica, sino a los ucevistas.
Naturalmente, habrá espacio para actores vinculados al principal motor político, que es María Corina, los cuales presumo son factores del IESA y de la UCAB. Sin embargo, en todo caso, creo que el embajador Edmundo es consciente del valor de la paz social como primera fase de la recuperación, así que tomará el camino de la recuperación en vez de la aceleración.
Hay que entender que el embajador Edmundo proviene de un entorno de actores políticos de la era previa al chavismo, por lo que su principal fuente de acceso podría estar en esos entornos. Esto supone que convocará a los factores de todas las organizaciones políticas con el fin de crear una especie de conferencia de asesoría económica multipartidista.
Yo pienso que esta forma sería la más conveniente, dado que el chavismo se encargó de destruir las instituciones, entre ellos los partidos políticos y creo que Edmundo será importante para levantarlos de nuevo.
Sabemos el enorme daño que ocasionó el personalismo y el caudillismo en Venezuela, así como lo que representó Hugo Chávez, quien destruyó los partidos políticos con el fin de polarizar ideológicamente. Fue de ese modo que surgieron actores como Primero Justicia y luego Voluntad Popular. Estos partidos o movimientos representaban grupos de interés económicos. Cuando Chávez retiró el financiamiento de los partidos del CNE, solo aquellos que tenían dinero pudieron sobrevivir en la política.
Dejaron de existir los partidos tradicionales como Acción Democrática y Copei. Otros como el MAS y el PCV fueron asimilados por el chavismo. Todo este trabajo de destrucción de los partidos que hizo Chávez debe ser desmantelado y rescatar los partidos a través del financiamiento del CNE.
Creo que Edmundo va a retomar la vieja escuela de los planes de la nación. Lo que observo es que traerá un plan de la nación con una cantidad de programas sociales importantes que sustituirán a las misiones, que, por cierto, ya no existen.
Los programas sociales más importantes que vislumbro traerá Edmundo están vinculados con la asistencia materna, la atención a los adultos mayores y planes de empleo sectorizados por ciudades.
Pienso que Edmundo también implementará un salario mínimo basado en el dólar y creo que empezará con 100 dólares mensuales.
También creo que Edmundo establecerá un sistema de tarifas de servicios públicos basado en tarifas porcentuales. ¿Qué quiero decir? Por ejemplo, aquí en Estados Unidos la electricidad ocupa entre 5 y 15% del salario. Así que si la gente gana 2.000 dólares, deja entre 70 y 250 dólares en pagos de luz. En el caso venezolano, si el salario mínimo es 100 dólares, no se debería esperar un gasto superior a 15 dólares al mes en luz, con una banda de entre 5 y 15 dólares.
En el caso de servicios como los hospitales y la educación, Edmundo volverá a traer el esquema de mejora de salarios y de profesionalización, y creo que traerá la bonificación dependiendo del nivel de profesionalización.
Pienso que Edmundo desregulará la vida mercantil, buscando la forma rápida de creación de empresas y de inversión privada para generar la mayor cantidad posible de empleos. Por lo tanto, se espera una rebaja sustancial de impuestos, así como un traslado de competencias a las gobernaciones.
Otro objetivo de Edmundo será desregular el sistema impositivo nacional, regional y municipal. Además, buscará reducir el personal donde haya duplicidad de funciones; en los entes donde cuatro funcionarios hacen el trabajo de uno, habrá reducción de personal. Creará un bono de sostén para que estos funcionarios cesantes puedan tener un período de gracia mientras encuentran un espacio laboral en el sector privado.
En cuanto a la privatización, pienso que Edmundo no intentará recuperar las empresas chatarras, sino que ofrecerá estas empresas al mejor postor o a los empleados si están en condiciones de recuperarlas. Edmundo también iniciará un proceso de devolución de empresas y bienes que fueron confiscados ilegalmente por los chavistas, desactivando así las demandas contra el Estado.
Para los sectores estratégicos como petróleo y minerales, pienso que Edmundo retomará el viejo modelo de asociación estratégica mediante la otorgación de concesiones por la vía de la subasta pública. En las concesiones del sector estratégico de servicios, Edmundo se reservará 51% del derecho de las acciones para proteger el precio de los servicios, como en el caso de la electricidad, donde la rentabilidad no debe superar nunca la base de regulación del Estado.
Venezuela ofrece a las empresas concesionarias una infraestructura base, mucha de ella por recuperar, pero en definitiva sigue siendo un entorno con gran potencial. No debe ceder a las presiones de los lobbies para que deje en manos de los privados los precios liberados, ya que eso podría causar estallidos sociales innecesarios. Siempre habrá una empresa dispuesta a trabajar en las condiciones que el Estado ofrezca.
Pienso que Edmundo traerá de vuelta el modelo asistencial del Estado en materia de salud y educación. También buscará apoyar, a través de subsidios, la adquisición de vivienda, pero promoverá la liberación total del sector para generar competencia y bajar los precios.
Edmundo buscará traer de vuelta el sistema tripartito para garantizar que los salarios en el sector privado sean negociados con la participación de los trabajadores. Veremos el rescate de la Confederación de Trabajadores de Venezuela y de otras centrales sindicales, que también fueron destruidas por Chávez y Maduro.
Un elemento que puede traer Edmundo, y por el que lucharemos para que lo haga, será el modelo de Gobierno Abierto, para que se pueda conocer de forma pública el gasto público. Esto significa que los ciudadanos puedan saber en qué se gasta cada dólar de la administración pública en los diferentes niveles del Estado.
Otra propuesta que seguramente Edmundo implementará será la desconcentración y descentralización de funciones en el sector gubernamental a los diferentes niveles del Estado. Veremos la devolución de competencias en seguridad, educación y salud a las gobernaciones y alcaldías.
En el tema de los militares, el señor Edmundo tendrá el desafío de reinstitucionalizar las fuerzas armadas, devolviéndolas a su rol principal de resguardar la seguridad del país y mantener la paz. Será necesario convocar a las fuerzas vivas de la institución, a todos los que amen el pensamiento de Bolívar, que ha sido secuestrado por agentes cubanos instalados en las fuerzas armadas y que lo usan para manipular a los soldados. Edmundo tendrá una labor importante en la reinstitucionalización del país.
Las fuerzas armadas deben volver a ser no beligerantes en el tema político y enfocarse en sus tareas en el sector militar y de seguridad pública. El país debe volver a la democracia representativa.
Finalmente, observo que Edmundo será el gran pacificador que necesitamos los venezolanos. Seguramente enfrentaremos procesos amargos en los que los responsables de crímenes de Estado serán llevados ante la justicia internacional. Veremos cómo actúan los diferentes actores y en qué forma se pueden dar pasos de negociación para facilitar la transición y el nuevo orden. Este orden no es otro que devolver la institucionalidad que teníamos antes de la llegada de Chávez, pero esta vez con mejoras sustanciales.
Es todo por esta semana, hasta una próxima oportunidad en El Nacional.
@estebanoria