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EE UU y la farándula militar cubazolana

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Sobre  el origen y evolución del vocablo farándula hay distintas versiones académicas y del habla popular; define a los artistas y ambientes teatrales, a la fotografía fiel del generalato cubazolano, al igual que a la antigua “pandilla de vagabundos” ambulantes que distraían al pueblo con sus actuaciones cantadas y bailadas, hasta el insurgente “Por ahora” emitido por el subversivo paracaidista Hugo Chávez en la sede presidencial democrática, realidad vigente en  la invadida colonial Cubazuela bajo secuestro militarizado de Rusia y sus policías intermediarios castristas.

Este régimen castrense, castrador de los civilizados derechos humanos, puede analizarse a fondo desde los datos que aportan escasos pero valientes periodistas ocultos que aplican su lente a la parasitaria Fuerza Armada chavista, una práctica de espionaje que ejercida en el ámbito cotidiano se pudo conocer a plenitud  desde aquella pionera pantalla escondida que el genial cineasta estadounidense Alfred Hitchcock tituló La ventana indiscreta (1954), espejo vecinal que bajo censura refleja la cruda verdad a partir de rumores, runrunes, chismografía seria con reveladoras fotos y videos anónimos. Dimes y diretes sobre si quien gana es Maduro, Padrino, Cabello, pleitos del poder caudillista  en la dividida farandulera casta militar criminalizada. Esa crónica distrae pero también trasluce para quien sabe leerlas, hasta dónde y hasta cuándo mandan Estados Unidos, Rusia y China. Separados, juntos o revueltos.

90% de la malquerida población venezolana busca sobrevivir a través de remesas, miserables pensiones y sueldos, oficialistas bolsas CLAP repletas de sustancias sin nutrientes, buhoneros bien abastecidos que encarecen los escasos productos para la decadente clase media y numerosos basureros para los mayoritarios parias. Mientras la oligarquía criolla verde oliva del bandolerismo  vendepatria bolivariano en sociedad con el comercio transnacional  de drogas, armas y riqueza mineral saqueada, provoca su guerra interior entre padrinos, ahijados, terroristas domésticos, regionales y mundiales, todos apertrechados buscando cada uno el absoluto control territorial de la mina gigantesca que todavía es Cubazuela.

En el otro mientras tanto, partiditos del G4 con el interinato presidido por Juan Guaidó son ratificados al fin el 5 de enero y muestran una llamada plataforma unitaria que de nada servirá mientras exista esta clase de Fuerte Tiuna, porque siempre habrá sustitutos obedientes al modernizado imperialismo zarista del Kremlin.

Lo que no se comprende del todo es por qué un probado y ejemplar democrático Estados Unidos, que sustenta verbalmente a los  citados organismos representativos de la legitimidad constitucional venezolana y protege sus activos financieros de la voracidad oficialista, al mismo tiempo secunde sin ambages a su eterno enemigo ruso que comanda la mexicana, degradante puesta en escena para más de lo mismo y si fuera posible hasta peor. ¿Es que en verdad se trata de negociar Ucrania por Venezuela? ¿Acaso se repetirá el canje que hizo el gobierno de Kennedy cuando aceptó el retiro de los misiles apuntando a su país y a cambio les entregó la Cuba libre y no puede liberarla hasta hoy? ¿Es que el Partido Demócrata continuará la macabra mentira  trumpista de “todas las opciones están sobre la mesa”?

Ese juego político que reparte zonas de influencia resulta peligroso y fatal para el Estados Unidos de hoy al retardar demasiado en su desenlace. No hay un Winston Churchill ni un estadista latinoamericano de la talla de Rómulo Betancourt en este hemisferio. Su cercano corral o patio, la ex Venezuela rica en minería esencial, ya está bastante equipada con misiles sofisticados, se sirve del instrumento bélico foráneo para someter y derramar sangre inocente.

Para colmo el detalle que faltaba, ya sin disfraces faranduleros, en boca del dictador colombiano que usurpa la presidencia de Venezuela libre. Declara a voz en cuello que Cavim (Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares), desde el estado Aragua, corrupta  ensambladora fundada por Chávez, desde ahora, con o sin estos padrinos y ahijados, será  fabricante directo de actualizados fusiles de asalto, los rusos Kalashnikov, a repartirse muy pronto a narcoclientes domésticos, fronterizos y regionales de Centro y Suramérica.

Tamaño contrasentido de nuestro gran aliado del norte provoca sin tregua inestabilidad y sufrimiento a las víctimas secuestradas. Si alguien calificado pudiera justificar aunque sea parcial pero públicamente tamaña sostenida contradicción, pues bienvenido sea.

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