No es un secreto que sus datos personales son rutinariamente comprados y vendidos por docenas, probablemente cientos, de compañías. Lo que es menos conocido es cuáles son esas compañías y exactamente qué hacen.
Probablemente no haya jamás oído del término Data Broker o corredor de datos anteriormente, ya que es un término relativamente nuevo. Recientemente han salido a la luz pública, a raíz del escándalo de Facebook, a través del cual el mundo entero aprendió que los datos personales de 87 millones de utilizadores fueron transmitidos a una empresa británica, Cambridge Analytica. El modelo de negocio de esta empresa es justamente la recolección de datos sobre los comportamientos y habitudes de los utilizadores. Este género de sociedades, llamadas Data Brokers, es un nuevo fenómeno que ha tenido y seguirá teniendo un crecimiento exponencial en los próximos años.
Estas empresas, que recuperan datos, facturan aproximadamente los 150 millardos de dólares por año. Entre las más conocidas están Cambridge Analytica, Epsilon, Experian y Acxiom. Esta última, pionera en la materia, se considera que posee más de 700 millones de datos con una facturación anual de 800 millones de dólares en 2016. El comercio de datos es entonces uno de los más rentables, y tienen un peso económico importante en la sociedad.
La pregunta sería cómo utilizan estas empresas los datos recolectados. Es muy simple: los Data Brokers los venden a empresas de manera que estas puedan mejor orientar sus campañas y proponer campañas de publicidad adaptadas a sus necesidades y gustos. Normalmente, los Data Brokers, son especialistas de mercadeo y efectúan sus análisis con el fin de informar a las empresas acerca de las habitudes de los potenciales consumidores.
Cuando usted usa su teléfono celular inteligente o su tarjeta de crédito, no es difícil para estas empresas determinar si usted está en un proceso de divorcio, embarazada o tratando de perder peso, si es extrovertido o cuál medicina usted toma, y por supuesto, dónde ha estado.
Toda esa información es usada para construir un perfil virtual (posiblemente erróneo) de usted, que puede ser usado para abordarlo con publicidad, clasificar los riesgos de su vida personal o incluso determinar su elegibilidad para un trabajo. El solo hecho de recoger y almacenar datos acerca de usted es peligroso, pero aparte de eso, los perfiles de consumidores (sin saber si son erróneos) pueden llevar a discriminaciones tipo raza o basada en ingresos.
Imagine entonces usted cómo ríos de información fluyen hacia los consultores políticos para influenciar su voto (caso Cambridge Analytica) y hacia las agencias gubernamentales.
Esto es conocido como “perfilaje psicográfico” y es “una metodología cualitativa usada para describir a los consumidores basado en atributos psicológicos”.
En otras palabras, hay un valor preciso monetario asociado con entrar dentro de la cabeza de la gente para influenciar sus decisiones.
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