OPINIÓN

Cuando solo importan las preguntas y sus respuestas

por Antonio Guevara Antonio Guevara

De izquierda a derecha, Gentil Duarte, Iván Márquez y Jesús Santrich

Primera pregunta

P.- ¿Cuáles son los contextos de los combates militares en La Victoria estado Apure?

R.- En primer lugar el histórico. 60 años, que es el tiempo de vida organizacional de las FARC, más el del ELN, hacen de la experiencia de combate un valor agregado a la hora de establecer un poder relativo de combate favorable para la guerrilla a la hora de una confrontación. Esa zona siempre ha sido controlada militarmente del lado venezolano por el Estado; del colombiano, no. Y eso fue así hasta 1998.

En segundo lugar, el económico que le da valor a la pregunta de por qué se está peleando en esa zona y qué representa. El departamento de Arauca; del lado colombiano y el estado Apure del venezolano, tienen una importancia agrícola, pecuaria y petrolera de primer orden en términos de producción y explotación. Los ingresos por estos rubros y los derivados de la extorsión, los secuestros, el narcotráfico y el contrabando de minerales estratégicos hacen del control de esta zona, por los millones de dólares que circulan allí, un objetivo de prioridad.

Tercero, el contexto político. El régimen venezolano es un conglomerado criminal global, del cual forma parte la guerrilla  colombiana, y países como Cuba, Nicaragua, China, Rusia, Turquía e Irán, afiliado a una entidad llamada Foro de Sao Paulo o Grupo de Puebla. Y a esa organización política se obedecen sus dictados, por encima del pueblo venezolano y de todo escrúpulo moral, para sostenerse en el poder con las banderas del socialismo del siglo XXI.

Cuarto, el geoestratégico. Esa zona de norte a sur abre una amplia compartimentación entre Colombia y Venezuela. Su control abre un estratégico corredor terrestre, naval y aéreo donde la territorialidad y la soberanía de los Estados ha sido difícil históricamente. El delito, tiene unos picos importantísimos en las estadísticas. Los ingresos derivados del secuestro, contrabando, extorsión y narcotráfico; el control social de la población en el amplio territorio que la ilustra, y su adaptación al modo de vida en la zona, grafican un modelo de Estado factual que hacen del ejercicio del poder en esa zona, de ambos lados, una república independiente no declarada. En vías de hecho, ese amplio corredor colombo venezolano, esa bisagra geográfica tiene un importante valor estratégico y, es un Estado independiente dentro del Estado venezolano y el colombiano.

Quinto, el contexto militar. Desde 1998, se ha establecido un entendimiento político con la guerrilla colombiana que ha cambiado el concepto operacional para la zona. Las FARC y el ELN dejaron de ser los enemigos y ahora son los aliados para garantizar la permanencia de la revolución bolivariana en el poder, y para que esta ayudara a los guerrilleros a llegar al poder en Colombia. Luego está un diseño político de alcance estratégico establecido después de los eventos del 11 de abril de 2002. La misma FAN a lo interno ha dejado de ser el soporte principal del régimen venezolano y esta responsabilidad se comparte ahora con la delincuencia común, el pranato, las megabandas, los colectivos paramilitares y la guerrilla colombiana, legalizados en la milicia nacional. Desde esa misma época, los militares dejaron de ser apegados a la letra constitucional en el artículo 328 y ahora son el brazo armado del PSUV. En Apure, donde se combate desde el 21 de marzo de 2021, es el mismo terreno, los mismos actores, el mismo valor económico de la zona; pero el enemigo es otro y el concepto operacional también cambió. El sector de la FAN que está en la zona, está combatiendo con planes para otro enemigo y de allí estos resultados, que favorecen a la guerrilla en las dos disidencias y su organización de fachada que participará en las elecciones presidenciales de Colombia en mayo de 2022, al régimen y al sector político y radicalizado de la FAN encabezado por el ministro Vladimir Padrino López. ¿Y los perdedores?… son los cuadros operativos venezolanos que están en la zona combatiendo.

Segunda pregunta

P.- Entonces, ¿en qué se falló? ¿Por qué con los antecedentes de control y victorias anteriores contra la guerrilla en esa zona, se tienen estos resultados negativos y lamentables que ponen en entredicho la capacidad de la FAN para cumplir sus misiones constitucionales?

R.- Si esa pregunta la respondemos con los referentes institucionales de las antiguas Fuerzas Armadas Nacionales hasta 1998, la respuesta es que se falló en todo. En el ministerio, en la ADI, en la ZODI y en la REDI, y en unidad recientemente activada ad hoc, y los jefes militares responsables de conducir las operaciones militares en Apure. En la planificación y en la ejecución de los planes se falló en todo. Pero, si nos atenemos a los postulados políticos, militares de esta nueva Fuerza Armada Nacional (FAN) y el contexto de los acuerdos del régimen con la guerrilla y la situación política interna en Colombia, no se ha fallado en nada. Los resultados, expresados en militares venezolanos muertos y heridos, daños a equipos militares, desplazados civiles venezolanos hacia Colombia y el control territorial de la guerrilla en esa zona del estado Apure, podemos concluir que esta operación fue un éxito rotundo y contundente. Ojo, respondiendo la pregunta con los referentes de la nueva realidad de una fuerza armada politizada y orientada a contribuir a obtener objetivos políticos en la subregión latinoamericana. La operación fue un éxito.

Tercera pregunta

P.- Uno lee las pocas informaciones oficiales que han circulado sobre estos eventos de Apure y concluye que no ha habido coordinaciones eficientes en los mandos responsables, para alcanzar un resultado de victoria en estos eventos militares.

R.- Por supuesto que sí hay coordinaciones. Lo que se evidencia de estas informaciones es que ese abandono de los cuadros de mando a los cuadros operativos, me refiero a las unidades que están en la zona caliente combatiendo, es que los jefes militares  en la ADI, la ZODI y la REDI, especialmente la que se acaba de activar tienen un cortocircuito con los combatientes. El ruido en las comunicaciones entre quien comanda y quien combate no es casual y eso confirma que estamos en presencia de algo inusual de acuerdo con lo doctrinario, lo operativo, y lo histórico. Y, de acuerdo con los contextos, las conclusiones son que estamos frente a una operación de propaganda y contrapropaganda diseñada por la pulida y refinada maquinaria de inteligencia y contrainteligencia con alcances políticos, inducida por el más alto nivel del régimen, que se está ejecutando con el respaldo de los altos jefes militares encabezados por el ministro Padrino López. Esto es lo que se conoce en esa zona de Apure y Arauca, como un falso positivo y en general en la frontera común con Colombia. Desafortunadamente; los muertos los está poniendo la Fuerza Armada Nacional que le está sirviendo de sparring a la guerrilla colombiana. Un triste papel. Lamentable.

Cuarta pregunta

P.- Pero… eso es muy grave. Estamos hablando de una traición de los altos mandos militares a sus subordinados. Estamos asumiendo que envían a sus subalternos a mataderos militares para sacar réditos políticos. Y eso también significa que los jefes militares comparten con la guerrilla la información exacta de la ubicación de las unidades. Una emboscada. Una traición.

R.- Bueno, esa es otra ratificación de la respuesta anteriormente expresada. El tema de la traición de los altos mandos militares comienza por el incumplimiento de la norma establecida en el artículo 328 de la carta magna. Desde allí empieza la traición. Los combatientes militares en la zona solo están sirviendo de carne política para el cañón electoral de la guerrilla. Esto que estamos viendo y oyendo a través de las redes sociales, sobre lo que está ocurriendo en el estado Apure, en el sector de La Victoria; frente a Arauquita, del lado venezolano, es un falso positivo montado por el régimen para beneficiar a la disidencia, entre comillas, liderada por Iván Márquez. Esa que llaman la Nueva Marquetalia. Allí reside la traición de los altos mandos militares, a los cuadros medios e intermedios (tenientes coroneles, mayores, capitanes, tenientes, soldados), quienes son los que están poniendo los muertos en la zona de combate, para arrimar réditos políticos al acuerdo entre la revolución bolivariana y la guerrilla colombiana. Los muertos y los heridos militares, más el desplazamiento forzoso de los civiles de Apure hacia el Arauca colombiano, son los famosos daños colaterales. Yo ratifico que esto de Apure es un falso positivo.

Quinta pregunta

P.- Y entonces eso explica el silencio oficial sobre estos eventos. La escasa información que difunde el Ministerio de la Defensa y el régimen sobre Apure. Y cuando se contrasta con la que se publica de lado colombiano, provoca muchas especulaciones.

R.- Como dice la salsa que canta Héctor Lavoe, “esa risa no es de locos, te estás riendo de mí”. Esa opacidad ante estos hechos son una burla bien calculada para distraer a la opinión pública. Ese silencio de Maduro y esa indiferencia del general Padrino López no son casuales. Son causales. Saben que los objetivos establecidos en el diseño político y estratégico del plan militar que se está ejecutando en Apure, se están alcanzando al cien por ciento. Se está garantizando la permanencia en el tiempo de la revolución bolivariana en Venezuela y abriendo un importante espacio electoral para que las FARC alcancen el poder en Colombia en mayo de 2022. ¿Para qué exponerse a declarar y salirse del guion construido? Al régimen siempre le ha funcionado el manejo de las verdades convenientemente sembradas, la difusión de medias verdades y la plantación de mentiras. En este caso, la opacidad comunicacional y el control e intensificación de esta a través de las redes sociales es un plus que ellos explotan de manera muy eficiente, a través de sus pulidas maquinarias de inteligencia, de contrainteligencia y de operaciones psicológicas. Así han funcionado en 22 años de revolución bolivariana y 62 años de Revolución cubana.

Sexta pregunta

P.- Entonces… esto que está ocurriendo en Apure es el despeje de una amplia zona para que la guerrilla de las FARC con la disidencia de Iván Márquez termine de ejercer el control territorial, ejerza soberanía y gobierno, y controle la población de ese sector con apoyo del régimen.

R.- Eso puede resumir exactamente lo que está pasando en Apure. Históricamente, esa zona; del lado colombiano ha sido del control de la guerrilla. Del lado venezolano, como dijimos inicialmente, las fuerzas armadas venezolanas hicieron un muro de contención hasta 1998. El ejercicio de la territorialidad y la soberanía se garantizaba con la presencia militar y las operaciones de combate a través de los dos teatros de operaciones activados en Guasdualito, estado Apure, y El Guayabo, estado Zulia. Después de 1998, con la llegada de Hugo Chávez al poder, eso cambió. Los acuerdos políticos entre el régimen y la guerrilla alentaron la penetración pasiva de la guerrilla colombiana a territorio venezolano. Los militares venezolanos solo combatían a los paramilitares colombianos y a la delincuencia común; de hecho, se estableció una suerte de convivencia entre la guerrilla y la fuerza armada. Solo faltaba el chispazo que le entregara el testigo del control de la zona por completo a la guerrilla.

Eso es lo  que estamos viendo en este momento en Apure. Del lado colombiano, la disidencia de Gentil Duarte ejerce soberanía y ahora del lado venezolano, la de Iván Márquez es la dueña del patio. Y en general, ambas suman para ilustrar lo que es la Nueva Marquetalia, que está comprendida en los departamentos Guajira, Cesar, Norte de Santander, Arauca, Guainia y Vichada en Colombia; y los estados Zulia, Táchira, Apure, Bolívar, Amazonas y la lengüeta geográfica que penetra el corazón de Venezuela por el estado Guárico. Esa es la Nueva Marquetalia. La Nueva Marquetalia es el asiento fundacional para mantener activa desde ya, la Guerra Popular Prolongada (GPP) como garantía de poder ad eternum para la revolución bolivariana en Venezuela, establecer otra manera distinta a la electoral para llegar en Colombia, o constituirse como una República Independiente de Nueva Marquetalia, en caso contrario, como se quiso en 1960, cuando se activaron fundacionalmente las FARC, con Manuel Marulanda Vélez, alias Tirofijo, al frente. Esto que estamos viendo en Apure es un planteamiento político y militar para garantizar la permanencia de la revolución bolivariana en el poder en Venezuela y el triunfo electoral de las FARC en Colombia.