Una de las cosas que ha llamado mi atención de María Corina es que al preguntarle qué piensa sobre lo que Maduro dice de ella, responde sencillamente: “Yo estoy concentrada en el objetivo que persigo; por eso no estoy atenta a lo que dicen de mí”. Esto, parafraseando la pregunta de un periodista y la respuesta de María Corina.
Se ve que la estrategia de “concentrarse” es eficaz, pues lo muestran los miles de votos que obtuvo en las primarias. Cuando uno se concentra, no hay nada que venga a empañar el objetivo: lo negativo se deja a un lado y los rasgos positivos crecen, florecen; digamos que se ven lúcidamente.
Por eso es por lo que María Corina tiene sus ideas muy claras: se concentra aunque hablen mal de ella, aunque tantos personajes del régimen canten que hubo fraude, aunque en la oposición haya todavía gente que la rechaza. La carrera está andando, pues todavía falta correr “hasta el final”, como dice ella. Falta superar muchos obstáculos para llegar a las presidenciales, pero ya el pueblo habló y se espera que cuidemos nuestro voto.
Cuidarlo significa estimular y convencer a jóvenes para que se inscriban en el CNE. Jóvenes cuya incredulidad les mantiene alejados de la política. Muchachos que no creen en nuestro poder de cambio de este régimen porque esto es lo único que han vivido y lo ven inmutable.
Esto es tal vez lo que nos pasa: creemos que los personajes de este gobierno van a ser eternos, porque pase lo que pase siguen ahí, permanentemente. María Corina representa la apuesta por un cambio decidido: una autodeterminación que se ha transformado en un movimiento indetenible y esperanzador. El camino, se sabe, es la unión. Por eso todos los políticos deberían abrirse con un corazón generoso a apoyar a María Corina. No es tiempo de mezquindades; es tiempo de cooperación y trabajo conjunto. Si queremos que la cifra de votos aumente, tenemos que hablar con la gente, en la calle, para que vea la trascendencia de su voto.
Pienso que María Corina representa, en este momento histórico, el ideal de libertad y de esperanza que todos necesitamos. Concentrémonos también nosotros y veamos los miles de votos con los que ganó las primarias. Este número puede aumentar en el 2024 si nos lo proponemos.