La relación México-Estados Unidos se ha complicado con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, a lo que hay que sumar la crisis de migración de nuestros connacionales que buscan el sueño americano, que para muchos termina en una pesadilla en la que incluso menores de edad son separados de su familia.
El reto para Andrés Manuel López Obrador es enorme, tendrá que enfrentar con suma maestría al gobierno de Trump, y ante ello, la propuesta de Marcelo Ebrard y Martha Bárcena como canciller y embajadora de México ante Washington, respectivamente, va más allá de Donald Trump. El mensaje es claro, la prioridad es la defensa de los mexicanos y la cooperación para el desarrollo.
La protección consular será un reto que se puede enfrentar, es una tarea urgente que sin duda el equipo de Andrés Manuel López Obrador sabe, por lo que deberá existir una cooperación real desde la Cancillería, la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo y nuestra Embajada en Washington, de ahí estas propuestas de personajes. Se tendrá que dar una reingeniería en relaciones exteriores ante Estados Unidos.
Y solo bastaron 12 días tras la aplastante victoria electoral de AMLO para que Trump enviara a México una delegación del máximo nivel para conocer de primera mano a quién será el futuro presidente de México, y así, despejar las muchas dudas que existen sobre la política exterior de López Obrador.
A México llegaron el viernes pasado el secretario de Estado, Mike Pompeo, acompañado por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin; Kirstjen Nielsen, secretaria de Seguridad Interior; y Jared Kushner, el polémico yerno de Donald Trump.
Marcelo Ebrard describió el fugaz encuentro como “franco, respetuoso y cordial”, y reveló que entregó a la delegación estadounidense la “propuesta” del futuro gobierno sobre cuatro temas: renegociación del Tratado de Libre Comercio, desarrollo, migración y seguridad. No quiso detallar el contenido, pero dijo que se hará público cuando se confirme que llega a manos de Trump.
Según Ebrard, esta propuesta sentará las bases para una nueva etapa que “mejorará” las relaciones entre ambos países.
Por parte de México estuvieron presentes quien será la futura secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; el de Hacienda, Carlos Urzúa; el próximo secretario de Seguridad, Alfonso Durazo; y Jesús Seade, que se convertirá en los próximos meses en el jefe negociador para México del Tratado Comercial con Canadá y Estados Unidos.
Este encuentro forma parte de los guiños de concordia que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, ha lanzado a Estados Unidos desde la noche de su victoria y se espera que la cereza sea la presencia del mandatario estadounidense durante la toma de posesión del tabasqueño, lo que daría señales de una dignificación de la relación entre ambos países, promesa de campaña de AMLO.
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