Gran discusión ha causado la “nueva” política económica de Maduro. Eso es insólito, pues él no está haciendo más que la “regla del libro” de las dictaduras comunistas, en particular Cuba, para perpetuarse en el poder tiránico a costa de la esclavitud y hambruna de sus pueblos. Lenin dictó la norma y Stalin la ejecutó a perfección.
Me da risa las largas y profundas elucubraciones de doctos economistas y demás expertos en el análisis de semejante mamotreto dizque de política económica del tirano Maduro. ¡Por favor desde la NEP de Lenin, la tiranía estalinista y sobre todo las medidas castristas todo está dicho!
Algún acucioso analista hizo una recopilación de las medidas de Fidel al respecto, y no ha habido cambio ni en una sola coma; obvio, es que Venezuela es una colonia de esa minúscula y miserable isla, que ejerce un poder imperial gracias a sus poderes terroristas y totalitarios, como todo poder marxista- leninista lo es.
Desde 1992, y quizá como parte de un puñado de “locos” que hicimos la advertencia de lo que se advendría con el chavismo, y de los cuales quiero destacar a mi “maestro” y amigo Aníbal Romero, predije lo que hoy está sucediendo, aunque reconozco que me quedé infinitesimalmente corto en el estado de debacle de lo que ha sucedido en Venezuela. Es que convertir uno de los países más prósperos de la América Latina en uno de los más indigentes del mundo en solo 20 años no se ha visto jamás y espero no se vuelva a ver en la historia mundial.
Señores, la estrategia es muy clara, es el típico guion comunista: acabar con el aparato productivo, la sociedad, los valores de un país, para convertirse en amos y señores de unos famélicos habitantes que esclavizados trabajan para el usufructo del tirano.
Qué ocho cuartos ni que nada de analizar las últimas medidas de Maduro, simplemente tienen un objetivo: eternizarse en el poder a través del dogma castrista de la subyugación del pueblo hambreándolo. Estamos en la recta final: o el pueblo derrota vía insurreccional a este régimen, o tendremos seis décadas más de castrocomunismo.