¿Cuál paz general?, la de la ignorancia, la de la pobreza o la de los sepulcros, de cuál paz nos habla, porque a la vista no hay elementos de importancia para afirmar que la consulta electoral organizada y controlada por el presidente de la República es una contribución a la gobernabilidad venezolana, hoy profundamente afectada por la implosión de su aparato productivo, con el consecuente y catastrófico efecto que semejante suceso tiene sobre las condiciones de vida de los ciudadanos.
Extraordinario problema de salud pública, creado por el gobierno que usted inexplicablemente defiende abiertamente e incluso, creo, militantemente, contraviniendo el espíritu y la tarea que por excelencia está encomendada a la institución que dirige, que no es otra que la de proteger a los venezolanos de todo peligro externo o interno, en la medida de lo posible, pero tal y como lo hemos podido apreciar por los hechos, la institución armada, creada para nuestra defensa y protección, es utilizada para lo contrario.
A la vista está ciudadano general, que la consulta electoral no fue convocada por el CNE, lo hizo el binomio Ejecutivo-ANC, pero luego el presidente le dio la tarea a un organismo que se ha convertido en la oficina de asuntos electorales del gobierno, porque el CNE que dirige Tibisay Lucena dejó de ser una institución imparcial respetable y creíble, la mayoría absoluta de sus integrantes son militantes del PSUV, por lo que su permanencia viola toda la normativa de neutralidad política.
El Ejecutivo desoyó todos los llamados que las diversas instituciones públicas y privadas le hicieron para detener tan equivocada decisión, recomendaciones que además fueron acompañadas por el grueso de la representación nacional de los países americanos y de los integrantes de la Unión Europea, pero el presidente no se detuvo, daba por descontado que podría derrotar la oposición política a su gestión, tratando de ignorar que el rechazo al gobierno madurista ha crecido en el interior de la sociedad en forma irreversible, “como el incendio en verano de la paja seca en los llanos”.
Definitivamente, general, nuestra sociedad desea un camino económico, social y político diferente al que el gobierno madurista le ofrece, son muy, pero muy malas las realizaciones de su gestión, miseria y violencia, esas son las razones por las cuales la oposición ciudadana le ha infringido ya varias derrotas, todas contundentes, por lo que tanto su credibilidad como su legitimidad están en tela de juicio, ha llegado la hora de retirarse aún con dignidad y la salida son unas elecciones democráticas ya.
Queremos una paz democrática.
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