COLUMNISTA

El éxodo venezolano

por Freddy Carquez Freddy Carquez

El proceso de deterioro tanto económico como social venezolano se ha expresado de una forma abrumadora, es absolutamente inocultable, demanda soluciones extraordinarias y efectivas, después de una prolongada maniobra de salvamento apoyada en el tráfico de nuestras divisas, la inundación del empobrecimiento generalizado nos ha alcanzado.

Todos los diversos aspectos de la vida pública y también de la privada se encuentran en jaque, aspectos de nuestras condiciones de vida que resultaron de extraordinaria importancia como la salud y la educación pública están gravemente afectados, en completo y sistemático deterioro, de igual manera la seguridad personal, el empleo, los salarios y le transporte.

La nación cuyos ingresos y crecimiento económico le permitió ser hace poco más de medio siglo un importante receptor de la migración de sociedades afectadas estructuralmente por los efectos empobrecedores de la Segunda Guerra Mundial.

Convocatoria que unas décadas más adelante se extendió a nuestros vecinos del sur y del Caribe,   hoy demanda la ayuda de ellas, para proteger a sus ciudadanos de la brutal exigencia de la violencia, de la pobreza y de las enfermedades.

Nuestra implosión estructural, la caída de nuestra economía, abusiva y estúpidamente intervenida por un Ejecutivo ignorante y corrupto, nos ha colocado aún más bajo de lo esperado en los aspectos productivos,  generando en nuestra comunidad la trágica necesidad de emigrar a la vecindad para tratar de acceder a la perspectiva de la satisfacción de sus necesidades y aspiraciones.

Y como una nación sacudida por la guerra o por una epidemia mortal, nuestros compatriotas morral al hombro y con unas divisas en el bolsillo, han decidido cruzar los Andes y el Caribe, transitando la histórica ruta de la libertad, en esta ocasión en la búsqueda del apoyo y la solidaridad de nuestros hermanos.