COLUMNISTA

La efímera reconversión monetaria

por Luis Oliveros B. Luis Oliveros B.

El gobierno ha decidido quitarle tres ceros a la moneda y crear un nuevo cono (sí, sin ñ, aunque provoque ponérsela) monetario, esto para salvar al país de las garras imperialistas extranjeras (guerra económica, persecución por los recursos, envidia porque tenemos patria y un gran etc. de charlatanerías).

Según Nicolás Maduro, con esta reconversión monetaria la inflación bajará, los ciudadanos van a tener un mayor poder adquisitivo y la economía se va a estabilizar. Igual que con el petro, las propiedades curativas de las medidas económicas del gobierno exceden en capacidad a los milagros, sin duda, están en otro nivel de generación de bienestar. Y lo mejor de todo, es que no hay que tomar ninguna medida económica adicional, solamente cambiar la moneda, quitarle ceros y listo. Obviamente, esto solo ocurre en el imaginario de un gobierno que para nada le interesa arreglarle los problemas económicos a la gran mayoría de la población, que sufre los embates de una terrible hiperinflación y recesión.

Complicado pensar que sin instituciones, con una industria petrolera destruida, con políticas fiscales y monetarias demenciales y una política cambiaria errática, los problemas económicos de Venezuela se vayan a solucionar. No hay nada positivo en esta reconversión monetaria, quien les venda lo contrario, desconfíe de ese personaje.

Debemos ser conscientes de que esta reconversión monetaria no es más que un maquillaje electoral para esconder la hiperinflación y vender la errada idea de que tenemos unas autoridades que sí están tomando las medidas económicas adecuadas para superar la crisis.

Estamos en medio de la más efímera reconversión monetaria en la historia de Venezuela y tal vez de la región (y miren que entre el Brasil de los años noventa y Argentina tenemos competencia). A cifras de febrero de 2018, en Venezuela habían 15.555 millones de billetes en circulación (no tomo en cuenta las monedas). ¿Es factible reponer esa cantidad de billetes en 2 meses?, eso suponiendo que 15 millardos de billetes sea lo que necesiten los venezolanos para sus transacciones diarias. Obviamente la respuesta es No.

Saquemos cuentas. Si la inflación promedio mensual entre julio y diciembre es de 50%, el billete de 100 bolívares tendría a final de año un valor de 9 bolívares, el de 200 bolívares de 18 bolívares y el de 500 bolívares de 44 bolívares. ¿Qué se podrá adquirir en Venezuela en diciembre de este año con esos billetes? Pero si la inflación promedio mensual no es de 50% sino de 80%, la situación (poder de compra de los billetes) será aún más crítica: el billete de 100 bolívares tendría a final de año un valor de 3 bolívares, el de 200 bolívares de 6 bolívares y el de 500 bolívares de 15 bolívares. Serán billetes al estilo el famoso juego Monopolio. Las monedas de 0,5 y 1 bolívar servirán en apenas días de haber aparecido para hacer botones. Es una torpeza sacar monedas de tan baja denominación en medio de una hiperinflación. A menos que haya otros intereses.

En lo personal no me voy a preocupar mucho por esta reconversión monetaria. Estoy convencido de que para finales de año al ministro Serrano se le ocurrirá emprender una nueva reconversión monetaria, total, sus recomendaciones (experimentos) de políticas económicas desquiciadas hacia Venezuela cuestan vidas y nos sumergen cada vez más en una tendencia hacia la convergencia con Haití, Eritrea y Sudán.

Con el permiso de ustedes, me voy a permitir hacer las siguientes apuestas: 1- el 4 de junio no estará lista la reconversión monetaria; 2- los nuevos y viejos billetes (cono monetario) vivirán juntos un buen tiempo; 3- el problema del efectivo va a continuar, sin o con nuevo cono monetario; 4- a que esta NO será la última reconversión (en el corto plazo) que veremos; es más, pareciera que vamos hacia otra reforma monetaria este mismo año.