“Listen to many people, but talk to few” (William Shakespeare)
Un profesor llamado Douglas Smith escribía un disclaimer –descargo de responsabilidad– para evitar malentendidos con los estudiantes de Sociología de su facultad en el estado de Kentucky. Yo encontré el documento hace un par de años más o menos y ya me preocupaba establecer una tabla de valores sobre la actitud del alumnado, el trabajo en clase, la evaluación y la asistencia, entre otras cuestiones. Gracias a mi devoción por la lengua de Shakespeare pude echar la palabra “disclaimer” al océano Google y recoger las redes. En segundos, ese inmenso mar me trajo buena pesca: el documento del profesor Smith. Este escrito estaba redactado con humor en la lengua de moda del siglo XX y principios del XXI. Compruebo que la última actualización registrada es del año 2013.
En el apartado inicial dedicado a las normas de aula, el profesor dice literalmente “I expect you to be in class”, es decir, “cuento con que usted esté en el aula”. Sigue irónico: “Little interaction can occur between us if you are not”, lo que traducido a la lengua cervantina viene a ser “no puede haber mucha interacción entre nosotros si usted no acude a clase”. La verdad es que me hizo reír. Tuve que seguir leyendo. El hombre de Kentucky había elaborado un singular sistema de reglas en el que premiaba la asistencia y el trabajo. En este sistema penalizaba la inasistencia y la procrastinación. Por extraño que parezca, estas ideas pueden ser consideradas hoy obsoletas y decimonónicas por algunos profesores.
Pero el profesor de Sociología tiene un plan y lo expone abiertamente cuando anuncia que a lo largo del curso repartirá hojas de ejercicios a los estudiantes presentes en el aula coincidiendo con días del calendario que él mismo elige. Habría marcado previamente esos días de forma aleatoria e irregular. Más adelante –el texto apenas supera las cuarenta líneas– el autor matiza la importancia de la atención y el silencio en el aula. También trata acerca de la inconveniencia del abuso de teléfonos inteligentes en recintos poblados por individuos inteligentes.
Tal vez, la parte más curiosa del escrito sea esa en la que se refiere a las excusas que el alumno sinvergüenza podría inventarse para no entregar una tarea a tiempo. Apunta cosas como estas “If you are anticipating: computer glitches, extremely tight pants, hurtful comments by close friends” (…) , o sea, “si está anticipándose con excusas: he tenido error informático de software, mis pantalones estaban demasiado apretados, he recibido comentarios dolorosos de amigos íntimos” (…) Sin conocerle de nada, el señor Smith ya empieza a caerme simpático.
En el apartado final, el profesor esboza un símil entre el curso académico y una excursión. En ambos casos, puede haber cambios de última hora debido a circunstancias inesperadas. Douglas Smith explica que él es responsable de lo que le corresponde. Su disclaimer es una advertencia para los incautos que se apuntan a un viaje feliz, sin esfuerzo ni trabajo y pretenden disfrutar de las ventajas de una generación mal acostumbrada a apropiarse de todo sin hacer apenas nada. Pero también es una propuesta saludable para los estudiantes de esa misma generación que aprecian el viaje en sí mismo y no piensan exclusivamente en llegar al destino de cualquier manera.