“Yo no tengo ideología amigo mío. Yo lo que tengo es biblioteca”

Arturo Pérez-Reverte

El primero del año, el periodista Ignacio Ramonet, residenciado en la Ciudad Luz de Europa, decidió hacerle una entrevista a Nicolás Maduro, para escudriñar los intersticios del telurismo que para la Europa Occidental supone un modelo primitivo, atrasado y abyecto como el aplicado en Venezuela, esas cadencias caribeñas que son de especial gusto para las sociedades europeas, pues les permiten ver con sorna los telurismos propios de los atavismos, atrasos y barbaries, superadas pero fascinantemente placenteras para estas sociedades que las tratan con fruición perversa, de un fenómeno lejano y mórbidamente espectado, es quizás el atavismo de los circos de Roma.

Así, la entrevista se dio en un clima en el cual el entrevistador nunca confrontó al entrevistado. Fue un diálogo entre amigos, de la misma ideología. Es muy fácil, señor Ramonet, ser comunista viviendo en París y sin los agobios de la pobreza de un venezolano. En su vasta entrevista, ¿Nicolás Maduro le explicó que el salario mínimo de un funcionario es de 130 bolívares, es decir, 3,71 dólares mensuales, 0,12 centavos de dólar? ¿Podría usted vivir en París con ese monto?, ¿le explicó que 80% de la población está bajo el umbral de la pobreza, que no hay servicios públicos, ni red de hospitales, que los estudiantes del subsistema educativo acuden dos veces a la semana a clases y que las universidades adolecen de fondos de mantenimiento y funcionamiento, además de que un profesor titular devenga 15 dólares mensuales? Nada de eso se abordó en la entrevista, en la cual usted daba cuenta de los logros de la telúrica Venezuela.

Cifras reales, Sr. Ramonet e información pertinente

En sus datos, usted indicaba que el país había crecido 22% en 2022, pero esos datos absolutos aún no los publica el Banco Central de Venezuela. Lo lógico, siendo usted periodista, es que preguntase el sustento de estos datos, cosa que jamás hizo, pues le ganó la admiración heroica hacia Nicolás Maduro. Los datos de 2023 se están trabajando, pues en este año, señor Ramonet, la República vivió dos trimestres de caída y eso da cuenta de una recesión técnica, a menos que eso se le haya olvidado en sus cursos doctorales, lo que dicho sea de paso lo cual lo compele a la realización de una entrevista que cuantitativamente procure demostrar una verdad inocultable, la Emergencia Humanitaria de Carácter Complejo, es un hecho fáctico denunciado por la Oficina del Alta Comisionado de los  Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), así como la sistemática violación de derechos humanos, seguida de cerca por la Corte Penal Internacional (CPI), la cual no se siente satisfecha con ninguna de las actuaciones del Ministerio Público, hecho público  y notorio.

En cuanto  a las cifras de recaudación tributaria, se acude al guarismo relativo 25,8%, para luego presentar un valor de 5.181 millones de bolívares, los cuales afectados por la ecuación de Olivera Tanzi, insisto, a menos de que también se le hayan olvidado estas lecciones básicas a un sujeto, que ostenta el cargo de doctor, llevan esa cifra recaudada a un valor de 1.290 millones de bolívares, pues la inflación en Venezuela, datos oficiales, es superior al 301%. Es necesario, amigo Ramonet, preparar las entrevistas y las clases, pues si no se vuelven en “microrrelatos en donde prevalece la pobreza de la lengua” (Barrera Linares, 2009); justamente esta entrevista no fue más que una amena cháchara entre militantes ideológicos.

El amor revolucionario y la hermosura de los vicios

Ramonet, casi con  lágrimas en los ojos, describía el hermoso gesto de la liberación ominosa de Alex Saab, un paladín de la justicia con una mixtura de sangre colombiana y palestina. Me imagino que la manipulada osamenta de Bolívar daba vueltas en el sepulcro al cual jamás ha descendido, pues el numen de Bolívar, enemigo jurado  de la corrupción y firmante de un decreto de guerra contra los corruptos, advirtió en otro plano cómo Alex Saab era encumbrado al empíreo de las virtudes ciudadanas, un sujeto que se hizo rico  primero con la Misión Vivienda Venezuela y luego con las bolsas de los Comités de Abastecimiento, mismos que han sido denunciados por la ONU como un mecanismo de control y chantaje social.

Lo que se produjo fue un canje, entre una deforme administración de Estados Unidos y un régimen que tenía secuestrados a unos ciudadanos norteamericanos, allí no cabe ningún adorno lingüístico y menos el relato nihilista del amigo Ramonet.

No hubo preguntas sobre el caso del concejal Albán, menos sobre las torturas y muerte del capitán Arévalo y menos de las torturas y golpizas que lisiaron al general Ángel Vivas. Aún hay 277 presos políticos en las ergástulas del régimen y de eso no se trató ni un tema tangencial, menos de los horribles casos de atropellos brutales contra las literalmente aplastadas manifestaciones de 2014 y 2017. Es así el amor revolucionario.

Finalmente, señor Ramonet, su entrevista fue aprobada por Maduro, no corrió la misma suerte el periodista Jorge Ramos, quien con sus incómodas preguntas causó la ira del tirano y el arrebato de la tableta de trabajo. Qué bien es ser entrevistado con preguntas cómodas, es como el estudiante que es examinado sobre los temas que domina, qué fraude para el oficio de periodista.

Aspiraciones 2024 y Guyana

Al ser consultado sobre las aspiraciones para un nuevo mandato, Maduro lo consideró prematuro, dependerá de Dios y no de Diosdado, dejando ver en ese vulgar retruécano cierta fisura, también la posibilidad de hacerse del conflicto recreado con el Esequibo e imponer un Estado de conmoción que suspenda unas elecciones en las cuales el régimen tiene un notorio rechazo del 80%. Al declarar sobre Guyana volvió con su tono fanfarrón y pendenciero, indicando que no somos cobardes, que Guyana se comporta como una colonia británica… claro, nadie le ha explicado el convenio del Commonwealth, en fin, eso forma parte de esa costra de petulancia e ignorancia que suelen acompañar al imprudente.

Huxley y el asesinato de un cantante un tema de Estado  

Tratar el tema de un supuesto homicidio de un cantante en un balance de gestión es cuando menos infantil, además de que demuestra una absoluta falta de división de poderes. No están resueltos los temas de la corrupción en Pdvsa, los delitos de violación de los derechos humanos, pero el tema del cantante levanta la mordacidad y de allí la levedad del ser. “Lo grave no es que la gente no lea, es que no le interese leer” (Huxley, 2007).

En fin, el Ministerio Público, hizo lo que tiene que hacer y aún le faltan muchos otros casos por resolver, con la misma prontitud.

Ni balances, ni datos económicos, ni proyecciones políticas, solo fue la charla de dos amigos, uno de ellos comunista hasta los tuétanos, pero residente en París, un izquierdista caviar, así es muy fácil estudiar nuestros telurismos. Un consejo final, doctor Ramonet, prepare su material, determine la metodología a aplicar y condúzcase como un académico y no como un militante del chavismo.

Referencia 

Barrera Linares, L. (2009). Habla Pública. Caracas: Equinoccio.

Huxley, A. (2007). Regreso a un mundo feliz. México: Porrua.

X @carlosnanezr

IG @nanezr

 


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