El canciller de Rusia asiste a reunión de las divisas capitalistas -G20- pero insiste en que el marxismo es su divisa. Como el cable submarino de la ruta Venezuela-Cuba-Rusia puede haber sido la diversión favorita para los juguetones de la CIA, el ministro vino a Caracas para traer instrucciones que no pueden darse por el cable.
Es inusual que el canciller, estando en guerra, viaje a Cuba y Venezuela estos días, quitándose tiempo que debe usar en asuntos bélicos. Pero hay otra cara que prefiere la charla personal por miedo a la comunicación electrónica, que es escuchable y leíble, pero esta comunicación es inseparable de la manera de vida de hoy en todo el planeta. De haber ese miedo seria demasiado grave, pues rompería el sistema de vida actual, a menos que el viaje a Caracas sea para salvar a Maduro o dar órdenes militares y electorales y no las simples razones dadas por la prensa que son bla bla bla, con demasiado relleno de toda clase de cosas que le quitan seriedad, teniendo en cuenta lo que se lee muy claramente: «Canciller ruso aseguró que Cuba es el aliado más importante de su país en América Latina y el Caribe» ni más ni menos. El país «más rico del mundo» le interesa medio pepino, pero le atrae cualquier plátano pintón.
Rusia está repleta de nuevas aplicaciones de comunicación electrónica que puede usar para desmantelar fuentes de información en cualquier parte del planeta. Las máquinas para conteo electoral que usan nuevas técnicas son más caras y no son confiables porque son mucho más tramposas. Las anteriores máquinas no son usables por ser deficientes.
Los países se están viendo obligados a regresar al proceso electoral sin máquinas de conteo. No hay que hacer referencia a los escándalos que se producen por fallas electorales.
No estamos solamente en guerra a plomo en Ucrania, en el Medio Oriente, Irán, Iraq. No, Rusia está avanzando en guerra electrónica capaz de alterar los medios de información. Rusia estuvo intentando influir en las elecciones de Estados Unidos mediante pirateo del servidor de correo electrónico y otros archivos de campaña. Piratas informáticos extranjeros pudieron penetrar bases de datos electorales en algunos estados de Estados Unidos. La nueva fortaleza electrónica da a Rusia enorme ventaja impensable hace algún tiempo (todo ello según el International Center for Defense and Security).
Por todo lo anterior, no puede haber confianza en máquinas de conteo electoral. Hasta hace poco todos los países han hecho conteo manual de votos y por ello es fácil regresar a este sistema. No debe haber apuro en un conteo que debe ser pulcro; no debe haber carrera para hacer la cuenta más importante del país. Los mirones y las radios y aun la TV, son los mejores testigos del conteo, aparte de observadores internacionales. El país no tiene dinero para comprar máquinas tramposas o no.
Pero no es posible hacer conteo manual si las autoridades oficiales no son democráticas, a menos que militares venezolanos no maduristas tengan entereza para asegurar que se haga.