A esta hora de la noche que escribo el post de la semana tenemos al presidente electo Joe Biden presentando su gabinete y creo que podemos celebrar con estas primeras nominaciones: por lo menos 2 estarán directamente vinculados con la situación venezolana. Demás está decir que todos presentan un excelente perfil para desarrollar ese nuevo concepto de las relaciones que busca Biden de cara al mundo, que no es otra que traer a Estados Unidos de vuelta.
Primero me voy a referir al encargado de inmigración, aquí se le conoce como DHS, es el señor Alejandro Mayorkas, nacido en La Habana, sería el primer latino e inmigrante nominado para ese cargo, él y su familia escaparon del comunismo cubano, él será quien vele por la política inmigratoria, seguramente se pondrá al tanto de la situación de los venezolanos, seguramente será sorprendido por las altas cifras de deportaciones ocurridas durante la era Trump, así como el altísimo nivel de rechazo de solicitudes de asilo político, algo realmente alarmante que nos ocurre a los venezolanos en una administración que decía que amaba a Venezuela. Sabemos que la mayoría de los que estamos aquí en Estados Unidos lo hacemos para salvarnos de esa feroz dictadura de Maduro.
La segunda nominación de interés es para el diplomático de carrera Tony Blinken como Secretario de Estado, es quien tiene el encargo de la política exterior norteamericana, así que atenderá entre muchos de sus asuntos, la situación de la dictadura de Maduro y grave problema que esta geopolítico que está representando, también nos va a interesar mucho la experimentada diplomática Linda Thomas-Greenfield como embajadora de Estados Unidos en Naciones Unidas dada cuenta Venezuela tiene una representación de la Asamblea Nacional y el gobierno interino, que esta compartiendo espacio de beligerancia dentro de la ONU con la dictadura de Maduro, un régimen que está protegido por Rusia y China.
Observen y llama la atención que todos estos nominados son esencialmente profesionales de carrera, entiendo que el presidente Biden busca el mejor ambiente con los senadores republicanos a los fines que sean ratificados sin mayores problemas sus nominados.
Pese a que aún se mantienen las disputas y los desafíos legales del presidente Trump puedo comentarles que es casi un hecho la presidencia para Biden, Wisconsin, Pensilvania, Georgia, Nevada y Arizona ya lo han confirmado, el señor Biden será el próximo presidente de los Estados Unidos, lo más relevantes de esta victoria es que resulta del apoyo de los millones de ciudadanos provenientes de las minorías, hablamos de los inmigrantes, afroamericanos, nativos-americanos, la clase media y profesional, trabajadores sindicalizados, las tecnológicas y sorprendentemente también un nutrido grupo de republicanos.
Ahora quiero hablarles un poco de lo que veo y escucho de los venezolanos, la verdad hay bastante silencio casi sepulcral en la redes sociales y en algunas esferas de la actividad social venezolana, posiblemente ahora estén moviéndose rápido para acercarse a estos nuevos factores ya que muchos habían apostado a Trump. Sobre esto quiero especular un poco de sus movimientos, definitivamente de la oposición puedo esperar probablemente un acercamiento de Guaidó y su gobierno interino al Partido Demócrata a través de Leopoldo Martínez, una cabeza venezolana visible dentro del Comité Nacional Demócrata (DNC), éll preside el Comité Nacional del Proyecto de Victoria Latina y Política Exterior para América Latina, es miembro de la Junta de la Comisión de Pequeñas Empresas de la Commonwealth de Virginia y la Junta de Visitantes de la Universidad Mary Washington en Virginia. Su curriculum dice que se desempeñó en el Comité de Transición del Gobierno del 73º Gobernador de Virginia Ralph Northam, es abogado con estudios de posgrado en Harvard, Princeton y la Universidad de Miami, en Venezuela el señor Martínez fue parlamentario independiente hasta 2005, encabezando el grupo de opinión Construyendo País.
Otros factores que están activándose son los partidos que participan en las elecciones de la AN de Maduro, muy probablemente la Acción Democrática de Bernabé sea la más potable de ese grupo, y no descarto un trabajo de seguimiento de la gente de Henri Falcón y Claudio Fermín aquí en Estados Unidos. Lo cierto es que pese al desconocimiento de las parlamentarias de Maduro por parte de la comunidad internacional, los jefes de estas organizaciones políticas son conscientes de que ahora ellos tienen un espacio de negociación y esperan ser útiles en estos escenarios por venir, habida cuenta buena parte de la oposición de Guaidó y sus seguidores compraron la oferta de Trump al punto de acompañarles y votarles.
Otro grupo de interés que observo lo constituyen los influencers y posiblemente la que más destaca es la periodista Patricia Poleo, quien por cierto tiene serios cuestionamientos a la gestión de la presidencia interina de Guaidó, particularmente sus críticas versan sobre el manejo del dinero de la ayuda humanitaria, el destino de otros fondos, así como los bienes recuperados del Estado. Pienso que ella está bien rankeada en la opinión pública de buena parte de los venezolanos, en oportunidades la veo bastante cerca de actores movidos a la derecha pro-Trump; sin embargo, es sobresaliente el trabajo de su hija Germania Rodríguez Poleo del independentespanol.com, quien no ha tenido reparo en cuestionar a Trump, a quien llama el caudillo norteamericano por su parecido a Chávez, si ella es la cabeza de playa de la familia en esta batalla, créanme que lo hizo bien y puede ahora moverse con una mayor simpatía en este terreno de la legitimidad opositora venezolana.
Otros grupos que observo y pienso que van a desaparecer en las redes de Whatsapp –amantes de las teorías de conspiraciones– por lo menos por estos 4 años, son los llamados republicos y los que son pro-Trump. Creo que se autoanularon con sus campañas fuertemente anti-Biden y quizás líderes políticos muy conocidos que dejaron trazas en las redes sociales, por cierto innecesarias. Ya lo decía Ricardo Haussman, quien seguramente ha visto a más de uno alertando sobre cuidarse de hacer el ridículo en Internet, porque es difícil de borrarlo.
Así que tenemos a todos estos grupos de oposición empezando a competir por alcanzar espacios dentro de la nueva nomenclatura de poder en Estados Unidos, lo que veo y creo es difícil que haya algo de donde sostener las viejas estrategias de financiamiento de la opospción, prácticamente hay desmovilización política en todo el país, la mayoría de los guerreros de la calle han salido para el exilio y lo que queda son guerreros del teclado, es poco lo que pueden hacer ante una tirania tan nefasta como la de Maduro, esta situación deja un espacio para otros actores de la oposición que no son conocidos aún, pero que pueden armar una nueva estrategia probablemente mas cónsona con la realidad.
El caso venezolanos es realmente preocupante, aun no sabemos hacia donde apuntara la doctrina de la nueva administración en política exterior, naturalmente que dominara la vertiente multilateral, el régimen de Maduro es una amenaza potencial, tiene una lista de crímenes cometidos de forma sistemático, muchos de nosotros hemos sido testigo, bien porque ha ocurrido en las propias familias o porque tenemos conocidos o amigos que han sufrido estas situaciones, sin embargo la realidad de los países tiene su propio ritmo, me decía un amigo militar que trabajaba para la administración Trump que era muy difícil que interviniera los Estados Unidos y me puso como ejemplo, que mientras al presidente le colocaban sobre la mesa carpetas con cientos de hojas de casos con miles de muertes y heridos en zonas de conflicto, de Venezuela le llegaba una carpetica, así que sabemos que no tenemos una guerra civil, pero los efectos se pueden ver en la muerte de cientos de miles en sus propias casas por falta de médicos y medicinas, y es el tipo de guerra que debemos visualizar a la comunidad internacional, que si bien es cierto no hay muertes masivas, el régimen extermina sistemáticamente, en pequeños grupos, hay evidencia de ello. Pero que otra cosa podemos alegar preparándonos para apoyar una salida democrática para Venezuela, a la final tendremos una dura y larga jornada por delante aquí en los Estadios Unidos, esto solo es el comienzo.
Finalmente me quiero referir a Datanálisis, en su último reporte indica que más de 70% de los encuestados no dan credibilidad a ningún actor político y esto incluye tanto a Guaidó como Maduro, es francamente inútil creer que la oposición puede tener resultados con semejante desgaste, y sobre el régimen de Maduro, solo puedo decirle que a ellos no les interesa esta medición, creo que por ahora hay que dejar pasar esto de la navidad, la consulta popular de Guaido la veo bastante baja, queda el consuelo que por ahora la Unión Europea desconoce las elecciones parlamentarias de Maduro y tenemos hasta entrado febrero para empezar a ver para donde gira esta política exterior de los Estados Unidos.
Espero leernos pronto aquí en El Nacional
@estebanoria