I
Con fecha 29 de agosto de 2024 conocimos, a través de la prensa nacional, el reporte del Banco Central de Venezuela (BCV) sobre el Producto Interno Bruto (PIB) en los últimos trece trimestres hasta junio de 2024, titulado «Suman trece trimestres de crecimiento en la actividad económica».
Adelanto, que mi intención con este artículo no es comentar las cifras reportadas por el BCV. Aquí simplemente intentaré abordar un hecho “curioso» relacionado con la Bolsa de Valores de Caracas (BVC) en el contexto del crecimiento reportado por el BCV. Un comentario sobre las cifras del PIB reportadas recientemente por el BCV lo pueden ubicar aquí.
II
Tal parece que hay una total congruencia entre el prolongado crecimiento económico reportado por el BCV y el Índice Bursátil Caracas (IBC) reportado por la BVC.
En efecto, en diciembre de 2021, el IBC cerró en 5.806 puntos. Ocho trimestres después, en diciembre 2023, el índice cerró en 57.832 puntos. Lo anterior se traduce en una variación positiva de 896,16% entre las dos fechas mencionadas, reflejo de un más que notorio crecimiento. De hecho, para el 31 de julio de 2024, la fecha más reciente de la gráfica que abre este artículo, el IBC cerraba en 90.191 puntos.
Cualquier analista ubicado fuera de Venezuela que, sin conocer su economía –ni tampoco las cifras de su PIB-, hubiera visto la gráfica del ascenso del IBC, habría afirmado que se trata de un «país en pleno crecimiento económico», después de todo ¿No son los índices bursátiles termómetros de la economía?
III
Sin embargo, y he aquí el hecho curioso: para diciembre de 2023, la BVC arrojó una pérdida operativa que montó a casi 11 millones de bolívares, según se desprende de su estado de resultados no auditado en bolívares nominales, estados financieros colocados en la plataforma scribd por el inefable José Coluccio.
En palabras más llanas: los ingresos operativos de la bolsa por actividades ordinarias y conexas no cubrieron sus costos y gastos operativos en ese periodo mostrado.
Hay que decir que la BVC presenta como principales los estados financieros expresados en bolívares nominales y como complementarios los expresados en bolívares constantes, “al revés” de como lo hacen las empresas emisoras en el mercado de valores. Ello es así porque prácticamente la totalidad del Total Activo de la BVC es activo monetario y su dinámica con el pasivo monetario, mismo que es sensiblemente menor, termina generando pérdida monetaria que se añade con su signo en el estado de resultados expresado en bolívares constantes. En los últimos cuatro años, la BVC solo ha evidenciado ganancia monetaria en el ejercicio de 2021.
Por su parte, el “Estado de Flujos de Efectivo” preliminar para el cierre de 2023, colocado en la plataforma scribd, evidencia que las operaciones no dieron efectivo. El saldo de la cuenta “Efectivo neto provisto por las operaciones” fue de -18,3 millones de bolívares.
El mismo portal de la BVC permite el acceso a los estados financieros no auditados de diciembre de 2022 y de 2021 en los cuales se puede evidenciar la misma situación operativa, que apunta a la siguiente conclusión: durante los últimos tres años, la BVC ha operado fuera de su punto de equilibrio.
Lo anterior abona el sustrato para una interpretación de la caída de la liquidez bursátil de la acción de la BVC. Según Vicente Carrillo-Batalla en un artículo, publicado aquí mismo en El Nacional el pasado mes de mayo de 2023, dicha acción venía siendo una de las más líquidas en el mercado secundario venezolano. Sin embargo, su volumen negociado cayó en un 59% en comparación con el primer cuatrimestre del año 2023. En palabras de Vicente Carrillo-Batalla: «un dato que por su impacto debe observarse con la debida atención».
IV
A los anteriores datos verificables suministrados, se le suman afirmaciones como esta: «la Bolsa de Valores de Caracas debe convertirse en un promotor de la recuperación económica con una visión basada en una economía diversificada post petrolera que promueve el gobierno nacional». Uno no puede más que preguntarse: ¿Y cómo una entidad que ni siquiera genera efectivo en sus operaciones puede promover recuperación económica?
Ese “bla bla bla” politoide podría, sin duda, transformarse en interesante en la misma medida en que la Bolsa de Valores de Caracas comience a generar efectivo en sus operaciones. En palabras más llanas: “facta, non verba”.
Finalizo entonces como comencé. Una economía boyante, un índice bursátil boyante y una bolsa de valores que da pérdidas operativas: además de un hecho curioso, si se quiere, una total y lastimosa asimetría.