El estado Apure posee en su cultura y su folklore la relación intima de la identidad de los ciudadanos con su tierra, no importa que tan lejos nos encontremos de su geografía, de sus ríos, y sus sabanas, hay elementos que siempre nos encuentran y convocan a unirnos en un mismo propósito, aquello del llanero es del taño del compromiso que se nos presente tiene un valor hasta espiritual que nos mueve e impulsa a lograr los objetivos sin importar lo dificil o lo inverosímil que resulte parecer.
Lo experimentado en la visita de María Corina Machado a las poblaciones de Achaguas, San Juan de Payara y San Fernando de Apure, con un recorrido posterior a la Macanilla y Puerto Páez en su paso rumbo a Puerto Ayacucho debe ser valorado a profundidad. El mensaje que adquiere el desarrollo de su visita en la conexión con los ciudadanos es mágico y derrumba por completo todo el acervo político que en otrora poseyó Hugo Chávez, quien en apure sostuvo un apoyo histórico que se ubicó en 69.76% de respaldo popular.
No obstante las pésimas políticas públicas del gobierno, las improvisaciones constantes, la humillación a la población, la carencia de políticas fronterizas para frenar la pérdida de soberanía por las amenazas de los grupos armados externos (FARC-ELN), la corrupción desbordante de funcionarios públicos y las alianzas de los sectores militares con las grandes mafias de la frontera en detrimento de los más humildes, combinados con los estrepitosos desatinos políticos del partido de gobierno PSUV, que no han podido en 25 años coronar un gobernador con identidad apureña, al contrario cada uno ha sido peor que el otro.
Si bien es cierto que el actual gobernador Germán Eduardo Piñate tiene orígenes en Apure, todo su desarrollo personal, académico y político, ocurrió en la ciudad de Caracas, de manera que no posee ningún arraigo con la región ni sus ciudadanos, además de estar perseguido por la herencia de su predecesor el Coronel Carrizalez, que ha sido por mucho el responsable de la devastación política del territorio, imponiendo la barbarie como método de acción política.
Ahora bien todo en la vida se extingue, y queda demostrado que el miedo también, no puede ser más ideal que citar un fragmento de Rómulo Gallegos en su inmortal obra: “Doña Barbará”: «La llanura es bella y terrible a la vez; en ella caben holgadamente, hermosa vida y muerte atroz; Esta acecha por todas partes, pero allí nadie le teme.” Este fragmento seguramente con singular particularidad describe resumidamente lo que se ha levantado en el estado apure; una población decidida a cambiar, decida a derrumbar los muros sociales que nos dividen, empeñados en quemar las naves una y otras vez para comenzar de nuevo.
Esta vez, acompañando el liderazgo radicalmente diferente al de Hugo Chávez, el liderazgo de quien diametralmente se le opuso y se ha fajado pulso a pulso en todo el territorio para adecentar la política venezolana, los apureños al unisonó lo reconocen y han decidido hacer ríos humanos en las calles para manifestar su apoyo y perseguir definitivamente la libertad, invocando a su vez el espíritu libertario que se alberga en sus orígenes independentistas.
Significando además la superación del dogma más persistente en la población llanera, que no es otro que el machismo, cultura relacionada quizás con lo recio del llano, y sus costumbres que de alguna forma ha establecido el subordinamiento de la mujer hacia el hombre, aspecto que se resalta cuando cientos y miles de hombres, se abrazan y lloran desconsoladamente al ser sobrepasados por el mítico y extraordinario liderazgo de María Corina que nos encanta a todos, porque simboliza muchas cosas a la vez; es el símbolo inequívoco de la mujer como elemento transformador de este Siglo, es la esperanza del recuentro con nuestros seres queridos, es el fuego sagrado que enciende la esperanza en la conciencia colectiva e individual, es el rostro de la libertad y la Democracia.
Sin dudas el apure marcha sin miedo hacia la libertad, como dicta el pensamiento del genial e incomparable Albert Camus: “La única manera de lidiar con este mundo sin libertad es volverte tan absolutamente libre que tu mera existencia sea un acto de rebelión. Incluso aunque nos sea prohibido, debemos vivir por mucho que nos juzguen. Vivir libre puede suponer ser perseguido, pero es necesario si queremos vivir y no limitarnos a sobrevivir”
La extinción del miedo dicta que Apure y Venezuela serán libres.
@jufraga12