Andalucía es una comunidad del sur de España cuya economía crecerá en 2022 en torno al 5,5 %, pese al escenario de guerra de invasión de Rusia a Ucrania, que obviamente afecta a Europa y al mundo.
Andalucía tiene ocho provincias: Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla. Su capital es Sevilla.
La economía andaluza es la tercera economía de España en cuanto al tamaño de su PIB. Aunque bajo administración socialista Andalucía no tuvo los mejores índices de crecimiento: (según Eurostat): Andalucía posee el peor mercado laboral; es la Comunidad Autónoma con mayor burocracia de España, contando con medio millón de funcionarios. Utilizan energía vía importación de combustibles, lo que encarece sus formas y dinámicas de negocios industriales, aunque tiene el potencial, y están en ello, de desarrollar importantes proyectos de renovables que pueden hacer de Andalucía un centro comercial, industrial y de negocios capaz de liderar relaciones económicas comerciales con América Latina.
Hay pedidos para que desde el gobierno central hayan reducciones a IVA a los productos básicos y a los hidrocarburos y se precisan recortes presupuestarios de costos (altísima burocracia) en la Junta Andaluza para lograr equilibrios económicos.
Para América Latina pensar, hablar y sentir Andalucía no es extraño, son parte inextricable de nuestro pasado, nuestro mestizaje y nuestro futuro. Desde la forma de hablar, la comida y la idiosincracia son parte diaria de nuestro futuro.
Desde el puerto de Palos de la Frontera (provincia de Huelva, Andalucía) en agosto de 1492 zarpó Cristóbal Colón para descubrir América en octubre de ese año. Sí, descubrir, aunque los puristas y los políticamente correctos se enfaden. Dejemos de negar la positiva interacción de los españoles en América Latina, principalmente de los andaluces.
Andalucía tiene mucha historia en Europa, en España y en América Latina. El paso de los árabes (800 años en la península) estableciendo el “califato” de Córdoba -que tenía en su jurisdicción a Andalucía- fue otra impronta en la historia andaluza. Menos mal el liderazgo militar cristiano que condujo la denominada “Reconquista” logró la derrota del emirato de Granada, el último “estado” musulmán en la península española, en 1492, expulsando a los invasores musulmanes de la península. Sin embargo de ello la presencia árabe en Andalucía, particularmente, es notaria, en su arte, su arquitectura y el lenguaje (que nos llegó hasta nuestros días).
No hay duda de la influencia de Andalucía en América Latina (desde México hasta Argentina) dado el papel protagonista y en gran medida articulador de la historia de la Andalucía moderna jugado por la Carrera de Indias, cuya capital residió sucesivamente en Sevilla y en Cádiz. Esa “importante ruta atlántica de navegación, a través de la que se desarrolló el gran tráfico colonial americano, en todos los ámbitos de la vida de la Andalucía de los siglos XVI a XVIII, desde la evolución demográfica a las estructuras económicas, la dinámica social, la cultura o las mentalidades colectivas…”consolidaron una relación estrecha entre Andalucía y América Latina (tomado de: Andalucía y América latina: el impacto de la Carrera de Indias sobre las redes sociales y las actividades económicas regionales, Universidad de Sevilla).
Infortunadamente por casi 40 años el partido socialista de España dominó el gobierno de Andalucía. Con más sombras que luces. El buen Felipe González, sevillano, tuvo como plataforma electoral y base política a Andalucía para gobernar España. De Felipe podemos decir que, con todo, es un dirigente socialista que supo acomodarse a la realidad histórica y no condenar al reino español a los postulados de la doctrina radical marxista. Hoy es un estadista bien respetado en, en lo que me toca decir, en América Latina.
Políticamente Andalucía está por dar un giro positivo luego de 40 años de dominio socialista.
Se espera, ahora en junio, una derrota contundente del socialismo andaluz y luego de casi 40 años dar paso a una nueva forma de pensar: encuestas prevén: victoria del PP (34% equivale a 45 y 48 escaños legislativos); PSOE (25% y entre 32 y 33 diputados), y Vox (17% o 18% de los sufragios y entre 16 y 17 asientos en la asamblea legislativa andaluza).
No les deseo suerte: les dejo bendiciones. El futuro de Andalucía es parte de América Latina y todos los latinoamericanos somos un poco andaluces, un poco vascos, un poco canarios.
El mensaje es claro: Andalucía elige salir del letargo de 40 años (37, para ser precisos) y volver a comprender el futuro construyéndolo desde ya con nuevos liderazgos liberales, democráticos y no apegados a doctrinas que hacen daño en ésta parte del mundo.